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Se podía apreciar el cambio de estación, el invierno estaba cerca, se podía sentir una suave brisa colándose por cada rincón del pueblo, las hojas se movían al compás del viento. A lo lejos, en el jardín, una pequeña niña de 5 años jugaba en los columpios, sin tener conocimiento de que alguien la cuidaba desde las sombras del bosque.

13 años después.

Pero ¿¡Qué diablos!? Me he despertado a las 5:30 de la mañana un sábado... ya que, intentaré volveré a los brazos de Morfeo.

Después de media hora intentando conciliar el sueño, al fin me he dado por vencida. He decidido vestirme, debo admitir que me quede en el celular un rato (viendo videos y jugando), al salir de mi habitación guardé silencio para ver si alguien más ya estaba despierto, al parecer soy la única que está despierta a estas horas; me coloco los audífonos y salgo a correr veinte minutos disfrutando del amanecer, la parte de la Ciudad en la que vivo es bastante tranquila, cerca de la casa hay un parque en el cual me propuse empezar a correr un rato por las mañanas, al llevar a casa me siento un poco exhausta y con mucha hambre.

No soy muy buena cocinando, pero se me antojaron unos Hot Cakes y va a ser lindo sorprender a mi familia con el desayuno listo, así que me pongo en marcha. Después de un rato, a eso de las 8:00, ya con la mezcla lista y un jugo de naranja recién exprimido, empiezo a prepararlos, mi hermano suelen despertarse a las 9:00 todos los días a diferencia de mi nana que se levanta a las 8:00.

-Nana, buenos días--digo con una sonrisa, volteando a verla.

-Dios, niña ¿Qué haces despierta tan temprano? - pregunta nana.

-No pude seguir durmiendo, nana, así que salí a correr y decidí prepararles el desayuno--contesté aún con mi sonrisa-- Mira, me están saliendo muy bonitos, aunque los primeros se quemaron un poco...

-No te preocupes, con el tiempo y practica hasta los primeros te saldrán bien- dijo dándome un beso en la frente, alcance a ver como miraba los trastes que había ensuciado- Aunque veo que el ir recogiendo mientras cocinas aún no se te da- dijo riéndose y colocándose los guantes para empezar a lavar los trastes.

-Soy un desastre ¿Cierto?

-Eres el desastre más bonito del mundo, cariño- Mi nana era como una segunda mamá para mi, mis padres trabajaban todo el día y los veía muy poco, así que desde que tengo memoria ella ha cuidado de nosotros- Ahora ve a levantar a tu hermano.

Como había dicho, me dirigí a despertarlo, lo cual era una tarea bastante sencilla. Después desayunar y conversar un poco con ambos, me dispuse a ver una serie de Netflix, un poco aterradora pero bastante entretenida: tres chicas tenían que pasar una serie de pruebas para convertirse en la bruja suprema del aquelarre. Cuando me di cuenta ya se me había ido gran parte de la tarde viendo dicha serie, baje a comer con mi familia y me quede conversando con mi nana sobre la llegada de mis padres y sobre la Universidad. Jugamos un rato algunos juegos de mesa con mi hermano y a eso de las 9:00 me dirigí a mi habitación a leer un libro de Wattpad.

Me despierto la mañana del lunes por el sonido de la alarma, tengo que ir a la Universidad, me doy un baño y recuerdo que hoy es un día muy importante, mis padres regresan de su viaje, estuvieron en un hermoso pueblo por lo que he escuchado. Además, en unas semanas es el cumpleaños número 8 de mi hermano, eso me hace recordar una nota mental que hice hace algunos días: "comprarle el regalo que él más quería". Al llegar a mi habitación selecciono algo ligero para el día de hoy, me decido por una linda blusa blanca de tirantes, un short negro y tenis blancos, arreglar mi cabello es una pequeña batalla así que solo me lo seco y me hago una cola de caballo alta, me coloco un suéter y bajo a desayunar. Cuando bajo me encuentro con que mis padres ya se encontraban en casa y estaban desayunando junto con mi Jeremy, mi hermano, y mi nana, mi nana me ve y se dispone a levantarse para servir mi desayuno.

-Buenos días, por favor nana siéntate a desayunar, yo me puedo servir – digo, para después darles un abrazo y un beso a mis padres, los había extrañado.

- Buenos días mi niña, pamplinas siéntate que yo te sirvo- me dice mi nana y mi hermano me da un abrazo.

Me siento en la mesa, discutir con nana es una batalla perdida, mis padres me dedican una sonrisa y por lo que veo están revisando unos documentos mientras desayunan. Al terminar de desayunar mis padres nos explican que pasaron algunas pequeñas sorpresas en el viaje, el cual según recuerdo fue por negocios y se fueron un mes, ante lo que nos dicen quedo sorprendida, al parecer en dicho pueblo encontraron una casa muy hermosa y mi padre consiguió un trabajo, el cual permitirá que mamá ya no tenga que trabajar y se quede en casa con nosotros, nos dicen que nos vamos a mudar lo mas pronto posible

- Eh... ¿Cuándo nos vamos a mudar? – preguntó, ya que esto es un poco impactante.

-En dos días, cariño, para el miércoles ya estaremos allá y tendremos el resto de la semana para desempacar, el lunes entraran a clases, ya está todo arreglado en sus escuelas, solo debemos entregar unos papeles el jueves y listo. - dice mi papá con entusiasmo.

¡En dos días! ¡Dios, esto debe ser una broma! No me malinterpreten, me da gusto y alegría saber que mamá va a pasar mas tiempo con nosotros y que es un lugar tranquilo para vivir y todo eso... pero ¿Dejar mi vida aquí? Esta bien que no todo es color de rosas, pero es un gran cambio y mas si piensan que nos vayamos en dos días.

- Cariño, el taxi ya está aquí, ve a la escuela, que se te está haciendo tarde y cuando regreses seguiremos hablando sobre la mudanza, sé que amaras vivir allá- dijo mi mamá dándonos un beso en la frente a mi hermano Jeremy y a mí, nana estaba hablando con mi papá sobre la mudanza, escuche a papá decirle que ella vendría a vivir con nosotros, ya que es parte de la familia.

Llevaría a Jeremy a la primaria, Jeremy estaba a nada de salir de vacaciones, solo dos semanas más y era libre, así que no había mucho problema si nos mudábamos, pero era todo tan repentino. Al dejar a Jer y prometerle que pasaría por él al terminar mis clases, me fui rumbo a la Universidad, aun dándole vueltas al asunto de la mudanza. 

Mi Luna (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora