We Are Legend

Capitulo 3

— Al fin – Murmuró para mi, entro a la cabaña con mis maletas.

Después de casi 8 horas de viaje hemos llegado y nos asignaron una cabaña. No llegue a escuchar con quién me tocaba compartir, espero y no sea una amargada.

Dejo las maletas al lado de la cama y me acuesto en esta, respire profundo dejando que el aire fresco se adueñe de mis pulmones y me llene de paz.

Mi mente divagando hizo que el recuerdo de esa chica este presente una vez más. ¿Quien es ella?, ¿Por qué Simón nunca me la presentó?, ¿La chica que beso, será su novia?.

— Si sigues mirando así el techo, le harás un agujero. – me senté en la cama al escuchar aquella voz. Era Madison ¿Que hace aquí? – ¿Viste algún muerto?.

— ¿Eh?, No.. – paso saliva – ¿Que haces aquí?, dejaron muy en claro que tenemos que permanecer en las cabañas por al menos una hora, hasta que terminen de organizar las actividades.

— Lo sé, lo escuché. – Dejo sus maletas al lado de su cama, después paso a acostarse en ella mirándome. – Creo que es demasiado obvio que hago aquí, es mi cabaña también.

— Perfecto – Murmuré , vuelvo a acostarme mirando el techo.

— ¿Que has Dicho Peralta?

— ¿Qué? – me senté de golpe, la miro – No he dicho nada que a ti te incumba. – Miro una vez más el techo.

– Soltó una risa, después me sonrió con burla. — ¿Asustada?, Ja, tranquila no me enviaron a matarte. En realidad si lo hicieron, pero soy tan buena persona que no lo haré. – su tono de diversión me causo escalofríos, que manera bonita de bromear #Sarcasmo.

— No es gracioso.... –me quedé callada, tenía más respuestas, Pero no quiero comenzar una discusión ahora mismo.

— ¿irás a las actividades del lago Peralta?

— No me llames por mi apellido – rodeo los ojos – No iré.

— De todas formas te harán ir.

— Pues los miraré de lejos – me levante y comencé a guardar mi ropa en el mueble.

— Eso está por verse – Murmuró.

Decidí no preguntarle qué había dicho. Ahora se preguntarán ¿Quien es ella? , okey ella es la hija no aceptada de mi madrastra, si la ogra tiene una mini copia y para mí mala suerte tengo que aguantarla aquí.

Cuando apenas tenía 13 años, este demonio encarnado, trato de ahogarme en el lago que tiene la casa de vacaciones de mi padre.  Si casi muero y me generó traumas, ahora se me dificulta nadar e incluso pensar en meterme en un lago, mar o pileta, es pensar en mi muerte y más teniendo a esta mujer cerca.

★★★

Las actividades comenzaron una hora y media más tarde. Dichas actividades se dividieron en 4 equipos, lamentablemente a mí equipo le tocó la actividad en el lago. Está declarado, estoy maldecida por la mala suerte.

— Vamos Peralta, tienes que entrar – La voz de la profesora me saco de mis pensamientos. Miro el lago, después la miro a ella.

— ¿Es necesario?, ¿no puedo simplemente verlos desde aquí?.

— No, entra ahora mismo al lago.

Sentí mi cuerpo temblar, mis piernas no respondían, pero aún así intenté caminar sin tropezar hacia el lago.

Mis pies tocaron el agua y segundos después, el agua me llegaba hasta por arriba del ombligo. Tome una bocanada de Aire , tratando que el pánico no me consuma. Di unos cuántos pasos y en cuestión de segundos el agua me tapo por completo.