F I V E.

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Era más de media noche, nosotros seguíamos bebiendo y charlando de nuestras vidas, ambos estábamos comprometidos más allá de lo que queríamos pero no había marcha atrás, estábamos juntos en esto, una traición y sabíamos las consecuencias que eso conlleva.

—Señor, tiene una llamada— entró una de mis empleadas luego de pedir permiso mientras extendía el teléfono de la casa hacía mí.

—¿A ésta hora?— pregunté confundido.

—Puede que sea algo importante, ¿No?— habló Keyla estirando un poco su cuerpo.

Asentí con una sonrisa leve poco confiado, cosa de la cual Bladio se dió cuenta una vez llegó junto a nosotros, sin embargo, bastó una mirada para que no dijera absolutamente nada.

—Jeon— hablé llevando el teléfono a mi oreja.

—¿De verdad quieres seguir investigando quién asesinó al boss?— la voz tras la línea estaba distorsionada, me era imposible reconocer quién llamaba.

—¿Crees que me darás miedo?— pregunté burlón colocándome de pie aún con mi vaso en mano.

—¿Y tú crees que soy una persona estúpida para creer que te daré miedo?— preguntó riendo —. Sólo quiero saludarte, nada más. Te conozco muy bien, Jeon.

Miré a mi empleada haciéndole una seña de que se marchara, no era necesario que estuviera aquí escuchando todo, una vez ella entendió dirigí mi vista hasta Keyla quién inmediatamente negó sin siquiera permitirme pedirle lo mismo, suspiré profundamente y rodé mis ojos para seguir enfocándome en la llamada que seguía en curso.

—¿Qué pretendes?

Ya te dije que sólo quería saludarte... ¿Por qué eres tan paranoico?

—Nada que ver— reí —, pero tampoco soy tan imbécil como para no darme cuenta que hay algo más detrás de todo esto.

Si que eres inteligente.

—Muchas gracias.

No hay de qué, siempre un placer— se escuchaba la burla en su manera de hablar, en cambio yo tenía poca paciencia y quería saber exactamente lo que quería —. Veo que ya no aguantas ninguna broma Jeon, ¡Que aburrido eres!

Aquello último había llamado mi atención...

—¿Por qué tan serio?— rió —. Por cierto, la mujer que te acompaña está bastante bien, ¿No la compartes?

Todos mis sentidos se pusieron alerta, la persona tras la llamada sabía con quién estaba, incluso sabía que estaba haciendo, me tenía a la mira y yo aún no lograba encontrarla. Miré a Bladio rápidamente quién se puso alerta tomando su arma entre sus manos, tomé a Keyla del brazo y la arrastré detrás de mí protegiéndola con mi cuerpo.

—¿Pasa algo, no es así?— preguntó ella, asentí rápidamente.

—Espero que disfrutes mi sorpresa, Jeon— escuché su risa una vez y sin más la llamada finalizó.

—¡Maldición!— con todas las fuerzas que tenía arrojé el teléfono a algún lugar haciéndolo añicos, mi respiración estaba agitada, mi agarre en el brazo de Keyla se intensificaba y todo el alcohol que había consumido desapareció en cuestión de segundos —. Llévatela de aquí— le ordené a Bladio.

—¿Y usted?— preguntó.

—¡Llévatela!

—¡No!— gritó safandose de mí —. Estas completamente loco si piensas que vamos a dejarte solo.

Mobster Wolf | JJK [+21] ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora