Normas De La Empresa | Murder Drones

XVII

V salió corriendo en busca de tal piedra pero antes de recogerla sintió un abrazo por la espalda.

—V...Esto, es algo fuerte...Lamento no haberte dicho pero ya sabes, estábamos ocupados y...

—No alargues esto N ¿Dónde está ella?—Él se quedó pensativo, en verdad no sabía dónde estaba, desde que cayó en el arbusto de fresas la perdió de vista aunque lo más probable es que esté en la empresa y que se le cayó cuando salió volando.

Empezó a buscar por el lugar con la mirada y encontró lo que buscaba, vio sus piernas debajo de unas piedras, no queria que su amada se enterara de la noticia de esta forma pero no sabia como apartarla de la escena.

Fue salvado por la campana, afuera se escuchaban las alarmas de los policías, ambulancias y bomberos, cierta parte estaba en incendios.

—Uh...yo me encargo de J. Una ambulancia se llevó a Tessa antes del desastre, ¡Deberías preguntarles como está para ir a verla! Seguro estará muy feliz de ver qué todo está...bien...

—Me estás ocultando algo y presiento que tiene que ver con J, acaso...—Los ruidos de los bomberos alarmaron a la dron y no le quedó de otra más que salir y tomar el consejo de su acompañante.

El masculino aprovechó y se dirigió hacia la de coletas, él todavía tenía esperanzas, cuando levantó las piedras que estaban en el cuerpo de aquella pensó que estaría despierta y que lo regañaría por demorarse como siempre lo hacía, pero...No fue así.

Se arrodilló frente a su cuerpo y se resistió ante las lágrimas ya que en cualquier momento alguien iba a entrar, la cargó y de una vez se llevó la piedra para luego ir por la puerta trasera hacia los arbustos quienes ahora se veían coloridos, con muchas flores de colores pasteles, aves y mariposas. No podían estar bajo el sol por mucho tiempo así que arrecostó el cuerpo de su líder cuidadosamente en un arbusto de flores rosas y preciosas bajo las hojas de los árboles.

Fue ahí cuando estalló en llanto, se abrazó a sí mismo para tratar de aguantar el dolor que sentía, comenzó a darse palmadas y a respirar hondo, a lo lejos se podían ver los autos de los oficiales, primeros auxilios, bomberos y reportaje.

—J...Todo ha ido bien gracias a tí, te esmeraste mucho para una solución a todo el caos que se formó, estamos con vida, los humanos están con vida, pero no entiendo...por qué tú...Es mi culpa, debí de cuidarte y no dejarte sola, no se como se me ocurrio dejarte adentro, fui un pésimo líder, no puedo seguir así..sé que me estás escuchando, por favor... respóndeme...

Él apoyó su rostro en el hombro de su líder, se quitó su gorro y se lo colocó a ella, las lágrimas digitales recorrían por su rostro, no podía parar de llorar aunque era urgente hacerlo, escuchaba como algunos pasos se acercaban pero eso dejó de importarle y solo se aferró al cuerpo de la dron.

—¡N! Vámonos, Tessa está algo mal, nos solicitan en el hospital ¡Corre tonto!—Gracias al cielo V solo se asomó y no logró ver tal escena deprimente. El masculino aún no se detenía las lágrimas, solo no podía dejarla así como así. Necesitaba su tiempo aunque no podían dárselo, la ambulancia se dispuso a llevarlos y estaban apunto de irse.

—Jamas dejarás de ser mi jefa...Lo prometo...Me encargaré de cuidar bien de Tessa, sé que ella es, era...alguien muy importante para tí, prometo por mi alma que no dejaré que nadie más muera ni sufra como tú lo hiciste por mi culpa...—Se limpió sus lágrimas y fue de forma lenta hacia su mujer con su cabeza cabizbaja y arrastrando sus pies al caminar, ambos se sentaron en la parte trasera del transporte medical en silencio, nadie dijo nada hasta que la fémina le planteó un beso en los labios a su pareja mientras le tomaba de la mano.
—¿Qué te dijeron específicamente de ella?...