Capitulo 17

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POV Ivón

—Tu-tu—digo retrocediendo un poco algo asombrada por ver su desnudez.

—Tranquila. De todas formas somos esposos ¿no?—dice Andrew y vuelvo a acercarme a él otra vez con el pedazo de tela en mano y suspiro.

—Tu...realmente—trato de mirar solo su pecho con el rostro caliente—de seguro estoy sonrojada—pienso en mis adentros y algo nerviosa procedo a lavar la parte de su espalda para limpiar la zona de la herida.

Y comienzo a evaluarme—¿por qué estoy nerviosa?, ¿es por qué él está desnudo?—estaba ensimismada en mis pensamientos que no me di cuenta que Andrew estaba temblando de frío hasta que él se mueve y cruza los brazos por delante como volviendose un ovillo y caigo en cuenta—ya, terminé. Puedes levantarte—me paro también y recojo toda su ropa del suelo que estaba tirado cerca y cuando me volteo comienzo a patinar con agua que cayó al lado de la bañera y estos zapatos además que son algo resbalosos, tiro toda la ropa dentro de la bañera porque mi primer instinto fue agarrarme de allí y cuando iba a caer de boca hacía la bañera Andrew, me sostiene rápidamente con sus brazos y me acerca a él como protegiendome.

—Te tengo—pestañeo varias veces tratando de no recordar que él está completamente desnudo.

—Y cerca mío, muy cerca—pienso y me sonrojo a más no poder y levanto la vista fijándola en sus ojos y mi corazón comienza a palpitar deprisa—creo que me estoy poniendo tan mal que me está dando taquicardía o algo así—umm, gracias Andrew.

Me alejo lentamente para no volver a resvalar y él entra la mano en la bañera para sacar su ropa de allí y noto que su vestimenta al caer adentro se mojó toda—lo siento—me disculpo.

 —Esta bien, se secará—comenta y lo veo exprimir la ropa para sacarle el agua.

—Espera, estas herido. Yo lo hago, mejor acuestate y cubrete con esa sábana que está ahí—me hace caso y yo después de terminar de exprimirla la tiendo en la única silla que hay, cerca de la chimenea y pienso donde sentarme o acostarme a dormir ya que, el suelo con este frio no sería buena idea.

—Oh tengo mucho frío—escucho a Andrew quejarse y me acerco a él entonces, me jala del brazo haciendo que me siente a su lado—mucho frío tengo—lo oigo hasta chocar sus dientes de la tembladera que tiene y me siento mal.

 —Ya, calma—le digo mientras él se acurruca a mi lado como buscando calor—tal vez sería mejor que te abrazara para que entres en calor—quito sus brazos que tenía abrazando a mis piernas y me acuesto a su lado—haré esto pero, solo por esta vez ¿de acuerdo?

—Lo que tu digas leighiche. (Tradución:curandera)—dice él y yo lo abrazo intentando calentarlo y él me devuelve el abrazo y así nos dormimos abrazados hasta que siento en la mañana los rayos del sol entrar por la ventana y darme a la cara toda la claridad y desde luego, despierto antes que Andrew.

Quito su agarre de mi cuerpo y me levanto para buscar plantas medicinales o algo para su herida antes que se le infecte—sí, tengo que darme prisa—me acomodo bien la gabardina y antes de salir miro a Andrew—gran pelirrojo, ya vuelvo ¿okey?—no dice nada porque, está todavía dormido y arropándolo bien con la sábana decido salir deprisa para ver si encuentro algo lo que sea que funcione para él.

Junto la puerta para que no entre la brisa fria de esta mañana que choca a mi rostro haciendo que me percate del viento y la temperatura que hace por aquí.

Miro a mi alrededor y solo veo árboles y más árboles —tendré que buscar diligentemente solo por esta vez—me digo a mi misma y salgo en la búsqueda.

Observo debajo de los árboles y veo solo acumulación de nieve y césped abundantemente en este lugar—tendré que ir más lejos...—razono y me adentro más al espeso bosque—podría perderme por aquí. Umm—decido poner ramas de los árboles dobladas como en círculo para tratar de no perder el camino a la cabaña y sigo adentrandome más buscando por todas partes hasta debajo de las piedras hasta que lo encuentro—¡sí!—vocifero de la emoción y escucho de pronto moverse los arbustos frente a mí como si algo estuviera ahí—tiene que ser el viento Ivón, no seas tan dramática—me digo a mi misma sin embargo, los demás árboles no se movían no podía ser el viento y me comencé a asustar un poco.

—¿Hay alguien ahí? O ¿un animal está...?—musito y cesó el movimiento al instante y yo tomo una piedra grande que hay cerca y con toda mi valentía me acerco despacio y lo que veo me espanta tanto que suelto la piedra y la persona que estaba ahí alza sus ojos y me observa de forma amenazante—yo-yo lo-lo siento—camino hacía atrás lentamente y esta persona se pone de pie y limpia la sangre de su boca que estaba bebiendo de esa persona y me pongo de los nervios.

Da un paso hacía mí y yo retrocedo dos lentamente—pero, ¿qué tenemos aquí?—no digo nada y solo me quedo como impresionada por lo que vi y no reaccionaba del todo—oh vaya, Hasatán si que es bueno. Envío más comida para mí—yo pestañeo varias veces con el ceño fruncido y sonríe de forma malévola el pelinegro de ojos negros también, de tez blanca por como podia observar desde donde estaba.

Da otros pasos más cerca hacía mí—Ivón, ¡reacciona!—agarro fuertemente lo que tengo en la mano y el hombre se acerca lentamente como estudiando a su presa.

—Debes estar sorprendida aunque, tal vez no lo sabías pero, todos aquí somos...—sonríe otra vez y llega hasta donde estoy y roza sus labios en mi cuello.

—¿Y si este hombre me asesina para beber mi sangre?, ¡Creo que voy a morir!—hablo internamente conmigo misma y cierro los ojos con fuerza mientras este hombre pasa su lengua por mi cuello después—¡no, Andrew me necesita debo volver!—me doy un pellizco para despertarme del ensimismamiento y yo abro mis ojos, lo empujo con todas mis fuerzas para que retroceda un poco y salgo corriendo a toda velocidad.

Una luz en la oscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora