Abril, 5
- ¿¡Se puede saber en donde estabas!? ¡Te buscamos por todos lado ayer y no aparecías! ¡Nos tenías sumamente preocupados! - exclamó Ginny en cuanto entró por el retrato de la Dama Gorda. Ron y Harry entraron detrás de ella.
- ¡Salvándole la vida a una persona! Que, por cierto, ¡no me mató! - argumentó Hermione mientras soltaba el libro que estaba leyendo. - ¡No entiendo por qué no confían en ella!
- Violet nos afirmó que es una asesina, Hermione. - agregó Harry cruzándose de brazos.
- ¡Yo no le creo a una chica que acabamos de conocer! - bramó Hermione, resignada.
- ¡A Samantha también la acabamos de conocer! - saltó Ron apuntándola.
- ¡Pero...!
- Deja de insistir, Hermione. Nameless es peligrosa, debemos hacerle caso a Violet, ¿si no qué otra explicación tendría el comportamiento de esa peli blanca? - interrogó Ginny despectivamente.
Los chicos se fueron a su dormitorio para descansar y Ginny se quedó con Hermione a solas mientras esta terminaba de guardar sus cosas.
- Amor, por favor. Hazme caso, ¿sí? - dijo Ginny en cuanto vio a los dos Gryffindor subir el último peldaño de la antigua escalera de piedra. - No tenemos otra opción que creerle a Violet. A menos que quieras acercarte a Samantha y arriesgar tu vida. - supuso la pelirroja mientras tomaba la mano de su novia con cuidado.
- Sí, ya lo sé, pero no puedo evitar sentirme intrigada por ese comportamiento. No es natural que le crean a una desconocida, ¡que mató y mata gente!, así por así. - se extrañó más calmada pero igual alarmada. Sus ojos café denotaban tristeza y preocupación, Ginny lo notó.
- Ya sé que Violet dice que mata gente, pero yo la conozco, son solo infanterías suyas para hacerse destacar. ¿No piensas, acaso, que la hubieran detenido si ella hubiera cometido esos actos? - apuntó Ginny. Hermione asintió y fijó su vista en otro sitio, apenada de no haberlo pensado antes.
- Si es así... ¿No podría pasar lo mismo con Nameless? - resolvió Hermione. - Esa es la lógica de porquería que siempre usas. - repuso en voz baja. Ginny la miro ofendida.
- ¡No me faltes el respeto! ¡No seré mayor que tú, ni más habilidosa, pero soy tu maldita novia, Hermione Granger! - chilló fastidiada con las manos apretujadas al costado de sus caderas, presa de la ira.
- ¡Puedo decirte lo que yo quiera, aunque ello traía sus respectivas consecuencias! - rugió con voz rápida.
- ¡Basta! - pidió una voz a sus espaldas que bajaba por las escaleras. - ¡Basta ustedes dos, son las dos de la mañana, por Merlín! - insistió Ron, quien era el que había bajado al escuchar semejantes gritos. - Dejen de pelear por cosas que se pueden resolver luego y vayan a dormir. - advirtió ahora susurrando. - Despertarán a medio Gryffindor con sus gritos. - se quejó y volvió a subir al dormitorio de los chicos.
Las dos chicas subieron resignadas y cansadas hacia su habitación. Preferían dormir antes de pelear por estupideces.
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NAMELESS – Abril, 6
Ser salvada se siente magnífico, salir del bosque también. La respiración en mis pulmones de nuevo se siente como la mismísima gloria.
Poder ver gente a tu alrededor y conversar con los profesores de los temas más insignificantes como las recetas de Pociones o los conjuros en Trasfiguración es un gran alivio para mí.
No sé cuál es mi nombre, no lo sabe nadie. Violet miente, pero creo que todos le creen. Es duro saber la verdad, pero no poder contarla, ya que nadie confiara en ti puesto a que estás acusada de matar gente o cosas por el estilo.
- Eso no lo hace ningún estudiante, ni siquiera Violet. - pensé. Es bueno asegurarse de que sabes la realidad y que esta misma es correcta.
Uno nunca sabe cuando su mejor amiga puede clavarle un puñal en la espalda.
Tal y como lo hizo ella.
Flashback
- Name, estamos cerca. - avisó susurrando una pequeña Violet. - Es por aquí. - guio, apartando las ramas con sus manos.
- ¿Estás segura de que es por aquí? - cuestionó una pequeña Nameless, con el pelo igual de blanco, pero más corto. Sus ojos azules en ese entonces eran más grises que azules. - Vio, nunca hemos ido por aquí, ¿verdad? - pregunta, pero la entonces castaña no responde.
Avanzan un poco más, las ramas y la mugre van desapareciendo poco a poco. Violet sonríe al ver el paisaje frente a ellas. Nameless observa a su alrededor extrañada, ese lugar no parecía en lo absoluto a lo que le retrató su amiga. No había sol, ni ninguna flor viva. Los árboles eran tan tupidos que no se podía llegar a ver ningún rayo de sol, solo algunos que se escapaban por algunos huecos.
- Tapate los ojos y acércate a ese árbol. - pidió con calma Violet. - Tengo algo para ti.
- Bien. - aceptó quedita Nameless y se acercó al árbol cuidadosamente, ya que había algunas piedras y podía resbalarse.
Violet dudó un poco por lo que iba a hacer, pero solo fueron unos segundos para qué sacará una daga de plata del bolsillo trasero de su túnica y atacará a su amiga.
Nameless no pudo ni formular palabra alguna, quedó inconsciente en cuanto el arma atravesó su espalda.
Fin del flashback
Ha pasado mucho tiempo de eso; algunos años talvez, pero no puedo evitar recordarlo cada vez que la veo.
Me traicionó, y después de tanto sigo sin saber el porqué. Tampoco se me ocurren muchas razones, solo puedo asumir que fue por diversión y es la respuesta que le he dado todo este tiempo.
Violet usualmente hace cosas de ese estilo por diversión. Aunque no mate, hace cosas de ese estilo de perturbación, como matar animales o a la propia naturaleza, quemando simples flores o partes enteras del Bosque Prohibido con el hechizo "Incendio".
Sé que algunas de las locuras que comete Violet también las he hecho yo, pero yo tengo una razón, un motivo, un propósito. Ella solo es mala.
Mala.
Mala y sabe que lo es, mala y le encanta serlo, mala y piensa que serlo es fascinante, mala como cualquier otra, mala de verdad. Mala solo como Violet sabe ser.
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Estoy tratando de ser constante por estos lares 😭
- soo
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NAMELESS ✔
Bí ẩn / Giật gânNadie sabe su nombre, ni lo que oculta detrás de esos ojos azules que aterrorizan a todo Hogwarts. . Ella nunca supo su nombre, su madre falleció a muy temprana edad como para recordarlo. Al no tener una respuesta para la mundana, pero inquietante...