↑ Dániel♥ ↑
En ese momento me tomó de los cabellos y me arrastró hasta la cama, lo único que podía hacer era gritar y decirle que me soltara, pero éste no parecia escucharme, me arrojó en la cama y se subió encima de mi sin soltar todo su peso, por que estoy segura que si lo hacia hivan a salir mis orgando por mi boca como un maldito sapo
-Ana, no me provoques lo digo enserio aun no me conoces, puedo hacer de tu vida un infierno- dijo sujetando fuertemente mis muñecas, sentía que en cualquier momento iban a romperse
De mi garganta salió un jadeo y las lagrimas mojaban mis mejillas, Nick miró detenidamente mi rostro y liberó mis manos al mismo tiempo que se levantaba liberandome de su peso
-duermete- dijo seco para luego salir de la habitación dando un portazo
Agarré una almoada y la estrujé en mis brazos, no tenía sueño, pero iba a intentar dormir
¤¤¤
-Ana despierta- escuché a lo lejos, de apoco fuí volviendo a la realidad, otra vez ese horrible dolor de cabeza, abrí los ojos encontrandome con unos hermosos ojos azules, pero éstos pertenecían a un sádico que disfrutaba mientras marcaba mi cuerpo
-ya despertáste- dijo Nick mientras me miraba con frialdad, ¿porqué siempre tenía esa mirada? Tan vacía siento que es un pozo si fondo totalmente oscuro
-si- dije tomando mi cabeza si ántes me dolía ahora me explotaba
-te desperté porque ya estabas durmiendo demaciado y porque dentro de poco llegará un medico para revisar tu cabeza- dijo seco
-esta bien ¿que hora es?- pregunté trarando de sentarme en la cama, pero me fué imposible por la fuerte puntada en mi cabeza
-no intentes moverte a menos que quieras tener la cabeza mas rota de lo que ya la tienes.......son las diez y media de la noche- dijo tecleando su móvil
La puerta se abrió dejando ver a un chico de estatura media, tenía unos lindos ojos verde esmeralda, el cabello un poco largo y dorado como el sol, tenía el cuerpo bastante trabajado, no parecía un medico, era demaciado joven para ello, aparentaba unos veinte tal vez, aunque soy pésima a la hora de adivinar la edad, por culpa de ello me gané una enemiga
Sonreí inconcientemente al recordar la expresión en la cara de esa señora al decirle que yo le daba tal vez unos cuarenta y ocho cuando sólo tenía treinta
-ah Dániel ya era hora, ella es Ana- dijo señalandome sin quitar la mirada de su móvil, el tal Dániel rodo los ojos ante la "gran bienvenida de parte de Nick"
-mucho gusto Ana, soy Dániel tu doctor- dijo extendido su mano para que yo la apoyara sobre ésta
-el gusto es mio- dije poniendo mi mano en su palma, apoyó sus labios en ésta y dejó un delicado beso, Nick quién por fín despegó sus ojos del movil vió lo que Dániel hizo y gruño
-bien debo revisarte, Nick necesito que nos dejes solos por favor- dijo Dániel sentandose en una silla que estaba al lado de la cama
-puedes revisarla sin necesidad de que yo salga- dijo mirándolo con el seño fruncido
-Nick el médico soy yo y necesito revisar a mi paciente, largate- dijo aburrido a lo que Nick rodó los ojos y salió de mala gana dando un portazo
-bueno, ya que el estorbo se fué vamos a ver que tenemos aquí- dijo mientras quitaba la venda de mi cabeza, la quitó por completo y abrió los ojos como platos, ya me imaginaba por qué
-¿está muy mal?- pregunté haciendo una mueca
Dániel solto un suspiro y habló
-si te soy sincero me sorprende que no estés muerta, perdiste bastante sangre por lo que te pondre un anestésico, dormiras mientras hago mi trabajo- dijo mientras tomaba una gerigna la cual coloco en mi brazo, un segundo después, perdí la concienca
(...)
Unos gritos hicieron que despertara de golpe ¿qué era eso? Abrí mis ojos de a poco, aún era de noche, lo sabía por la ventana que se encotraba al frente de la cama, los gritos se detuvieron por un momento, pero la paz no duró mucho, ya que los gritos volvieron
Me levanté despacio para tratar de acercarme a la puerta, hasta que lo logré pero a duras penas, aún seguía mareada
-cómo le háces algo así puedes matarla idiota- dijo una voz que estaba segura era del sexy doctor
-cállate, no eres nadie para decirme que debo hacer o que no con ella- dijo la inconfundible vos del estúpido de Nick
-soy tu hermano y no puedes lastimar a esa chica sólo porque a tí si te da la jodida gana- espetó Dániel algo enojado
-¿y a ti que te importa?
-me importa porque creo que es alguien que no merece que la lastimen- punto para Dániel
-tu no sabes nada de ella, así que no hables, yo la trato como quiero- respondió Nick cruzandose de brazos
Daniel 1 / Nick -1
-¿sábes qué? Haz lo que quieras pero no me llames las próxima vez que le pase algo a la chica, ya estoy arto de tener que venir a cualquier hora a curar a tus novias porque tu no puedes controlarte- dijo mientras desaparecía por la puerta
Lo que dijo me dejó helada, yo no era la única que sufría sus maltratos, valla a saber a cuantas chicas le hizo ésto, la pregunta que rondaba mi cabeza era ¿que pasó con ellas? Estoy segura que no terminaron bien, pase lo que pase juro no terminar como ellas
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¿Tuya? ¡Jamás!
VampirosSentí mi mejilla arder, y estoy segura de que sus dedos están macados en ellas -¡¡eres mía!! entiende de una maldita vez, ningún hombre que no sea yo puede tocarte ¿te quedó claro?- preguntó jalandome del cabello -¡yo jamas sere tuya!- espeté furios...