¿Tuya? ¡Jamás!

Capítulo 9

Estoy harta de estar en esta maldita habitación, hace mas o menos una hora que Dániel se fue a ver a Nick y hasta ahora no hay rastro de el

Tal vez se lo comió el perro gigante, ojala que Nick ya se encuentre en el estamogo de ese lobo

El efecto de la anestesia ya pasó y mi brazo volvió a doler, suspire y me levanté de la cama, intenté abrir la puerta pero no hay modo, esta cerrada con llave, el idiota de Dániel me encerró

Y es mejor que lo haga porque la primera oportunidad que se me presente para escapar no tardaré en aprovecharla

Resignada me alejé de la puerta y observé la habitación, a los costados de la cama habia estantes con porta retratos, objetos raros, títulos y algunos libros

Me acerqué a éste y tomé un porta retraro, la foto estaba en blanco y negro, parecía antigua en ésta habia un niño, supongo era Dániel y a su lado había una señora bastante pareciada a Dániel, solo que ésta parecía tener el cabello negro azabache, el niño parecía feliz, en su rostro había una deslumbrante sonrisa inocente que me hizo sonreír

-¿qué haces con eso? Mejor dicho ¿qué haces en la habitación de Dániel?- dijo una voz que me sobresalto, me voltee y ahí estaba Nick, intacto ni si quiera un rasguño lo acompañaba aunque si lo lo acompañaba el enojo, tenia la mandíbula apretada y en sus ojos había un pequeño destello rojo

-e-el me trajo a-qui para curar mi brazo- la plabras salían en un susurro y solo podía tartamudear, aún le temía, que digo, le temo mas que la vez en la que me golpeó en la carretera

Después de todo ahora se que es un monstruo

Nick miró mi brazo y apretó aún mas la mandíbula, caminó hasta mi mirándome con su penetrante mirada, estoy segura de que si pudiera matarme con la mirada ya estaría cinco metros bajo la tierra

De un momento a otro alzó su mano y golpeó mi mejilla haciendome caer, mi mejilla ardía y comenzé a llorar, me sentía impotente porque el podía pegarme, humillarme, maltratarme, insultarme y de más y yo solo podía llorar y recibirlo todo

-¿¡porqué mierda intentaste escapar?! ¡Por poco te matan idiota!- gritó tomandome del brazo que estaba lastimado para que me levantara, grité de dolor al sentir como los puntos se iban abriendo de apoco

-¡lo vuelves a hacer y te juro que esta vez no estaré para salvarte, dejaré que ese perro asqueroso te devore! Aunque ¿sabes algo? Hubiera dejado que te mate, de esa forma me sacaría un peso de encima- dijo frío

-¡nadie te mandó a traerme aquí! Me alejaste de mi familia, me trajiste aquí y dices que soy una carga ¡eres un idiota!- grité sollosando, el brazo me dolía demaciado, todos los puntos se abrieron

¡Dániel a donde mierda te metiste!

-ja, valla familia la tuya- dijo burlón, ¿que mierda dice?

-¿que quieres decir?- dije aprerando la mandíbula

-digo que la zorra de tu ma...- no pudo teminar porque Dániel entró y se quedó sorprendido al ver a Nick, después de mirarlo su vista se dirigió a mi y luego a mi brazo al verlo abrió lo ojos como platos

-¿que diablos le pasó a tu brazo?- dijo acercandose rapidamente para revisar mi brazo, se veía preocupado, algo extraño porque vámos, hace menos de tres días que me conoce, aunque creo que yo también me preocuparía si viera a una persona en mi estado, aunque no la conociera

-¡fué ese idiota!- dije volteando para encontrarme con Nick, pero éste ya no estaba ¡claro, huye como un cobarde! Idiota

-maldito hijo de..., ven volveré a coserte, y por ese idota no te preocupes, me encargaré de hacerle comer sus propias bolas- dijo guiandome a la cama, reí mientras el sacaba el botiquín y repetia todo el procedimiento, otra vez

-¿porqué siempre me lastima? ¿qué le hize?- dije bajando la mirada

-no es personal Ana, él es asi un poco...- lo interrumpí

-¿loco, psicopata, idiota, sádico, enfermo?- pregunté

-si, todo eso y más- dijo riendo

-¿pero porqué es así?- pregunté mirando mi brazo

-él es así, no se mucho, verás por lo que me contaron, cuando era niño era muy cercano a Bryan, era un buen niño, inocente, solidario y demás, pero algo pasó, algo que lo alejó de su padre, no sé lo que fue, pero de ese entonces se aproximó mucho a Rebeca y ésta le pudrió el cerebro llenandolo de mierda, y se volvió así, engreído, egocéntrico, egoísta, sádico etc- dijo mientras terminaba de coserme y me colocaba un parche

-ya veo- dije algo confundida

-y bueno obiamente Diana se está volviendo igual que Nick, Rebeca esta oscureciendo su alma al igual que cuando lo hizo con Nick ¿acaso no notaste las miaradas que te lazaba Diana?

-claro que lo noté, parecía como si me conociera de toda la vida y fuera su peor enemiga- dije haciendo una mueca

-como te lo dije con respecto a Nick, te lo digo con respecto a Diana, no te lo tomes personal, ellos estan peleados con el mundo, son así con todos- dijo y  asentí

-¿y que hay de ti? Es decir tu no eres igual, y Ariel tampoco- era una pregunta que rondaba en mi cabeza desde la cena

- es diferente, Ariel y yo somos diferentes, pero luego te contaré eso, ya terminé con tu brazo y debo prepararme para ir al hospital- dijo levantandose de la cama, como si quisiera evitar hablar del tema, y yo no iba a presionarlo

Al menos por ahora

Es decir se que soy una cotilla, pero se cuando debo callarme, además ya hizo mucho con contarme lo que me contó, ya que estoy segura que jamás iba a enterarme por parte de Nick

-de acuerdo, gracias por contarmelo y por curar mi brazo- dije sonriendo con dulzura

-de nada, solo procura no hacer fuerza o se abrirán otra vez y...quiero pedirte algo

-claro, dime

-es algo difícil, pero trata de no acercarte demaciado a Nick, puede ser un animal cuando quiere, puede hacerte mucho daño- dijo firme, lo miré algo confundida, asenti y salí de la habitación

Aun no conocía del todo la casa, pero al menos recordaba algo, la habitación donde yo estaba era la tercera de la derecha, en amobos lado había puertas blancas, solo una era marrón, la que estaba al lado de la mía, pasé por ahí sin darle mucha importancia, cuando quise entrar a mi habitación escuché gritos de una mujer que provenían de esa puerta marrón

Tragué saliva y estaba debatiendo entre entrar a mi habitación y no meterme en lo que no me incumbe o entrar a averiguar lo que pasaba, tal vez necesitaba ayuda

Negué y decidí entar a mi habitación, pero lo gritos se intensificaron y no pude resistirme, esa mujer necesitaba ayuda y no la podía dejar

Me armé de valor y gire lentamente la perilla, la abrí por completo y en cuanto lo hize hubiera deceado no haberlo hecho

Holaa, espero que les esté gustando la nove, si tienen alguna recomendación no duden en decírmela porque bue no tengo mucha experiencia y eso :)

Ahh y perdón lo errores de ortografía, voy a tratar de corregirlos pronto ;)

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