Capítulo 26

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-¿tu...eres la prometida de Nick Williams cierto?- preguntó enarcando una ceja haciendo que frunciera el ceño

-¿cómo lo sabes?- pregunté confundida

Ésta se puso de pie mientras sonreía de lado

-solo vine a advertirtelo, si no quieres que convierta tu vida en un infierno como lo hizo con la mia, te recomiendo que te alejes de él- dijo para luego alejarse, claro que comenzé a seguirla ¿que quería decir con que Nick convirtió su vida en un infierno?

-¡espera! ¡por favor! ¿¡que te hizo Nick?!-grité mientras trataba de seguirla pero era demaciado rápida y cada vez se alejaba más hasta que ya no logre visualizarla

-¡necesito saberlo!- exclame

Debía saberlo... debía saberlo ántes de seguir ilusionandome con el Nick que besé anoche, un Nick diferente al que conocí en la manción por que lo último que necesitaba era sufrir y llorar como una adolecente a la que le ropieron el corazón e hicieron pedazos sus iluciones, por eso mismo necesitaba saber si fué sincero al pedirme una oportunidad, si fué sincero al pedirme perdón

-¿de verdad quieres saberlo?- dijo la muchacha apareciendo detras de mi haciendo que me sobresaltara

-s-si- dije dudosa

en realidad no estaba segura si quería saberlo, muy dentro de mi quería que no me lo dijera, olvidarme de lo que Nick hizo y seguir con él a mi lado, pero la parte racional decía que debía saberlo y si fué algo tan horroroso debía alejarme

-me violó

Esa simple palabras hicieron que mi mundo se derrubara, esas simples palabras hicieron que mi corazon se estrujara, por que esas simples palabras significaban que la persona a la que estaba por darle una oportunidad seguía siendo el mismo monstruo al cual odie tanto en un pasado, pero sin querer terminó enamorandome con todas sus idioteces

Pero esto no era una idiotez, esto no era una simple pelea, en la pudiera pedirme perdón y yo se lo daría

Esto era mucho peor, esto imbolucraba a una mujer ultrajada y eso, era imperdonable

-no...no, no, no, no, no- cada vez que pronunciaba cada palabra mi voz se hacia más y más inaudible

-si y lo hizo brutalmente, y no solo eso, también me asecino- las palabras salían como veneno de su boca

-¿cómo pudo haberte acesinado si...- no dejó que terminara ya que me interrumpió

-eso... es una larga historia, la cual no contaré, solo estoy aquí para decirte eso

-no entiendo ¿que ganas tu diciendome esto?- pregunté desconfiada, tal vez solo era una loca, ésta me miro y sonrió

-digamos que sé que Nick te quiere y con lo poco que averigue de ti, sé que eres muy... justa y al contarte esto lo odiaras, entonces el sufrira y eso es una satisfacción para mi, por ahora- dijo sonriendo con malicia para luego desaparecer en un santiamen

No podía creerlo ¿cómo era posible que le hiziera tanto daño? O tal vez si, tal vez él nunca cambió y solo actuó de esa forma con migo este tiempo solo por diverción, solo me pidió esa oportunidad para ilucionarme y destruirme psicologicamente, porque fisicamente ya lo hizo, claro está

Sentí como las lagrimas caían como cascadas mojando mis mejillas mientras mi labio inferior temblaba como un papel

No podía moverme, pareciera como si mis pies estubieran clabados en la humeda tierra

Sentí como unos frios y fuertes brazos me apretaba a un cuerpo musculoso mientras éste acercó su boca a mi cuello dejando besos mojados desde mi hombro hasta el lobulo de mi oreja la cual mordió suavemente

-me desepcioné al no encontrate a mi lado cuando desperté- dijo con voz ronca en mi oido provocando que me estremeciera

me separé de sus brazos bruscamente mientras lo miraba con odio, asco y desprecio

-¿¡que mierda te sucede Ana?!- preguntó por mi repentino cambio

-sucede, sucede que eres una mierda, un cerdo, un monstruo, no entiendo como pude haber pensado que habías cambiado ¡te odio monstruo!- grite desagarrando mi garganta, no sabía de donde había adquirido tanto valor, pero ya no le temía, me importaba una mierda lo que me hiciera

Éste me miro confundido, sus ojos tomaron un color rojo carmesi, parecía como si sus ojos estubieran bañados en sangre

De un momento a otro me encontraba acorralada entre un árbol y Nick, el cual me sujetaba del cuello con tal fuerza que creí que me decapitaría

-¡NO VUELVAS A HABLARME DE ESA FORMA MALDITA PERRA! LO INTENTÉ, INTENTÉ CAMBIAR POR TI ¿¡Y ME TRATAS DE ESTA FORMA?!- gritó mientras me soltaba haciendo que callera y comenzara a toser

-maldito ¡eres un maldtito violador!- grite aún en el suelo bajando la mirada ya que sentía como mis lagrimas comenzaban a salir y no quería que él me viera

-¿qué? ¿de qué hablas? jamás te toqué Ana, te juro...te juro que intento entenderte pero no puedo

-no hablo de mi, hablo de Ana, la chica morena de ojos verdes, me lo dijo todo- dije ésto ultimo en un susurro

Éste se quedó estatico mirando un punto fijo en el suelo, como si estubiera recordando algo, ésto hizo que sus hombro calleran rendidos, sus manos que ántes estaban en forma de puño ahora caían como si estubieran sin vida a sus lados, levanto la mirada encontrandose con la mía, en ésta se notaba la tristeza y el arrepentimiento

-yo puedo explicarlo- dijo en un susurro

-¿¡qué vas a explicarme?! ¿¡cómo violaste a esa chica sin motivo alguno?!- dije levantandome del suelo mientras comenzaba a golpear su pecho y mi llanto se hacía más audible, éste me roadeó con sus brazos pegandome a su cuerpo

-¡sueltame!- grité mientras trataba de safarme de sus brazos, pero no me era posible, era muy fuerte y no podía esperar menos, después de todo el era un vampiro y yo humana, no había comparación

-Ana, escuchame, no fué como tu piensas...

-¡no me importa como fué lo que importa es que te odio y no quiero verte en mi vida!- esas palabras salieron como veneno de mi

Éste aflojó su agarre permitiendo que pudiera liberarme de sus brazos, ni si quiera lo miré, salí corriendo en dirección a la pequeña casa de madera, las lagrimas nublaban mi vista haciendo que mi vición fuera borrosa

Al abrir la puerta de la casa choqué con un cuerpo, levanté la mirada y al ver ese rostro tan familiar no dudé en pasar mis brazos por su estrecha cintura mientras él me respondía de la misma manera

-Dan- susurré




¿Tuya? ¡Jamás!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora