Te pertenezco

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El castaño sintió una mano que acarició su cabello, rápidamente levantó la vista, topándose con aquellos ojos azules que lo miraron con ternura, luego recibió un abrazo.

— Si mi hijo se porta mal contigo me lo dices. —Mencionó la mujer dandole un beso en la frente al menor.

— Señora Sara yo...

— Solo dime Sara, o mamá Sara. —Dijo la mujer sonriendo, Tony volvió a abrazarla.— Bien conseguiremos un buen sastre.

— ¿Para qué?

— Para que confeccione tu traje cariño, sera blanco ¿cierto?

— ¿Eh? No entiendo, ¿para que necesito un traje blanco?

— Para tu bo...

— ¡Mami Sara! —Exclamó Bucky llegando a la sala.

— Bucky... —Sara casi grita horrorizada la ver el brazo de metal, pero Bucky la calmó, bueno un poco.— ¡¡Steven!! —El rubio estaba por salir del estudio pero al escuchar el grito de su madre se quedó ahí.

— Tranquila, fue mi culpa. —Dijo Bucky tratando de calmar a la mujer, para su suerte llegaron Natasha y Clint.

— ¡Mami Sara! —Saludaron ambos.

— ¿Me harás galletas? —Preguntó Clint.

—  ¿Y porqué solo a ti? —Preguntó Bucky.

— Porque soy su hijo preferido.

— El unico hijo de Sara Rogers soy yo.—Interrumpió Steve quien al fin había salido.

— Si pero no eres el preferido. —Mencionó Bucky, así empezaron una infantil discusión, mientras Sara agarró de la mano a Tony y se dirigieron a la cocina.

— ¿Qué hacemos aquí? —Preguntó el menor.

— Haremos galletas, querido.

— Está bien, no soy muy bueno en eso pero aprendí un poco de Jarvis...

— Lo harás bien. —Animó Sara, Tony le sonrió sintiendo un nudo en su garganta, limpió las lagrimas que querían salir y luego abrazó a Sara quien palmeo su espalda cariñosamente.— Serás un gran yerno.

— ¿Eh? Bueno Steve aun no me ha propuesto nada...

— Disculpalo, para esas cosas mi hijo es poco lento.

— Lento o simple...

— Espera cuando se comporte empalagoso.

Una hora después luego de que Steve logrará tener de rodillas a Bucky y Clint, siendo el ganador de la pequeña discusión se dio cuenta que Tony y Sara no estaban, así que se acercó a Natasha quien había encendido la television.

— Están en la cocina. —Mencionó Natasha sin dejar de ver la televisión.— Sara dijo que no queria interrupciones. —Steve solo resopló y se sentó en el sofá.

— ¿Cuánto tiempo estaremos así? —Preguntó Clint.

— Hasta que yo lo ordene.

Clint y Bucky suspiraron resignados se quedaron así hasta que Sara salió junto a Tony.

— ¡Si galletas! —Pronunció Clint poniéndose de pie se acercó a Tony quién sostenía una charola.—  ¡Aaah! ¡No puede ser, son almas en penas!

— Son galletas con la forma del símbolo de Hydra. —Contestó Tony frunciendo el seño.

— Pues esta parece que grita, salvenme.