Capitulo 3.

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Parque, cena y celos de Lux.

Mi casa en estos momentos era un desastre total. En la cocina teniamos a Logan con un delantal de princesas que no se de donde lo saco y a Lux con otro delantal pero de superheroes que tampoco se de donde lo saco. Había harina por todos lados, hasta el perro estaba... ¿DE DONDE MIERDAS SALIO UN PERRO?.

— Buen día pastelito.— saludo Logan dejando la ultima tortita en el plato.

— Buenos...

— MIRA TIO LOG ME CONSIGUIÓ UN PERRITO.—me interrumpió la niña que estaba llena de harina.

—Espera un per...—juro que a estos dos los asecino hoy mismo.— SACA EL MALDITO PERRO DE AQUI.—grite a la vez que el puto animal me meaba los pies, ambos pares que tengo en mi cocina comenzaron a reirse.—ahora diganme... ¿con el permiso de quien trajeron a ese animal a mi casa?

— Pues mio da.—Lux se cruzo de brazos y creo que frunció el ceño, con tanta harina en su cara no podía ver bien.—¿algun problema con eso?

— Muchos, ¿quien....

—Genial.—nuevamente interrumpío.— se llama Ares.

Suspire pesadamente y me sente en la barra, agarre la cafetera que Log había dejado en la mesa y me serví algo de cafe. Una vez que deje la cafetera nuevamente donde mi amigo la había dejado, decidí darle un largo trago... mala idea, pesima idea, pero ¿quien putas hace que el cafe tenga saber a rancio?.

—¿Esta rico?.—pregunto Lux viendome mientras pestañaba.—lo hice yo, contiene, brillantina, unas cuantas cucharadas de azucar y ehm...

—Esta riquisimo.— interrumpí aquella lista,que estaba nombrando y la verdad no quería saber que más le había puesto al pobre cafe, aunque, no se ni porque o estoy tomando.

Sin que ella se de cuenta fui hacia el lavaplatos y tire todo el cafe.  Prendí la cafetera y me hice un nuevo cafe, ganándome dos miradas de odio.  No se como Logan podía tomarse eso.

- Paaaaaaaaaaaaa, ¿podríamos ir al parque?.- la pequeña hizo cara de perro abandonado, cosa que no me causo ternura para nada.

- No.

- Pero...

- No.-volví a negar.

- Por favooooorrrrrr.- ahora se unió Logan haciendo puchero también.

- No.

- Por fiiiiiiiiiis, prometo portarme bien.- volvió a hablar Lux aun co el puchero.

Suspire pesadamente, rindiendome, estaba clarisimo que no iba a ganar por muchos no que les diga.

Una vez que terminamos de desayunar, cada uno se fue a cambiar, bueno a Lux directamente la tuve que bañar, aunque termine más bañado yo que ella. Luego de bañarla y cambiarla, llegue a la conclusión de que también me tenía que bañar, gracias a la demonia que me dejaron en mi puerta.

Cuando todos estuvimos listo, salimos del piso  y nos encaminamos hacia el elevador.

— ¿Crees que te diran algo por llevar a Lux?.- Logan pregunto y estaba claro que se referia a la empresa.

— No, soy hijo del dueño y encima estoy a cargo así que no.— respondí guardando mi celular, siendo sinceros no me importaba mucho que pudiesen decirme. La cría se íba a quedar en mi oficina, eso espero.

Una vez que estuvimos en el estacionamiento, fuimos hacía mi auto y nos subímos en este. Desgraciadamente volvímos a tener una pelea por quien iba adelante conmigo, ¿adivinen quien gano? Exacto, la demonia. El pobre Logan estaba en el asiento detras con los brazos enojado y mirando hacía la ventana aún con el ceño fruncido. Muy maduro por cierto.

Equipo LDonde viven las historias. Descúbrelo ahora