FNAFHS Before the Show: Prelude

Tod

-¡Mira mamá, la maestra me dió carita felíz en la actividad de hoy!
-Ajá...

La indiferencia se hacía notar desde lejos. El niño pequeño, de piel oscura y un lunar en la mejilla, aún era demasiado inocente para darse cuenta, así que mantenía la hoja con pintura y unas felicitaciones escritas por la maestra con orgullo ante su madre, la cual ni siquiera volteaba a mirarlo, sencillamente se quedaba mirando su teléfono y pasando su dedo de abajo a arriba en la pantalla.
-Y, y, y... ¡Y!... -El niño agitó una mano- Hoy la maestra habló sobre el compañerismo ¡Y me usó como ejemplo! ¡Dijo! "Así como lo hizo Tod cuando le compartió su almuerzo al descubrir que Eddie había dejado el suyo".
-...

La mujer no le prestaba atención, ni siquiera había forma de saber si lo había escuchado o no. Tod aún con su gran sonrisa se acercó a ella y miró la pantalla de su teléfono.
-¿Que haces, ma?
-Agh, nada, vete de aquí. -Dijo la señora con Amargura.

La madre lo empujó y lo hizo caer sentado al suelo y éste golpe fué lo que le borró la sonrisa. La madre del niño se levantó y se encerró en el baño, dejándolo solo en el suelo. Lo que vió Tod en la pantalla de ese teléfono era un chat, y la foto del sujeto con quien su madre hablaba de un hombre con barba sonriendo a la Cámara abrazado con una mujer y una niña. Es una lástima que Tod no pudiese leer debido a su tan corta edad.

Pasaron las horas, el pequeño Tod se había cansado de golpear la puerta y llorar por hambre, su madre aún no había hecho nada para almorzar. Cuando por fin la puerta se abrió, la señora estaba vestida de manera elegante y caminó hacia su habitación, tomó una cartera y tomó a Tod de la mano.
-¿Quieres ir a casa de tu tía, Tod? -Preguntó la madre con una sonrisa.
-Si, pero tengo hambre...
-Comerás allá, tranquilo.

Y dicho ésto, la señora se lo llevó hasta la puerta y caminó un par de cuadras con él. Tocó la puerta y una señora mayor salió a recibirlos.

Lo único que Tod puede recordar fué que lo primero que hizo fué correr a ver a su prima, Toddy, y que justo después de abrazarla, la madre de Tod se despidió agitando la mano y cerrandole la puerta en la cara cuando el niño corrió para despedirla con un abrazo. La tía de Tod le acarició la cabeza y le dijo que no se preocupara, que su madre iba a volver a la noche.

Pasadas altas horas de la madrugada, Toddy, una niña de la misma edad de Tod, caminó por la sala de estar, donde su madre, quien sería la tía del niño, estaba discutiendo nerviosa por teléfono diciendo frases como "¡Tienes que regresar! ¡Es tu hijo!" y similares. Toddy miró el sofá y vio la espalda de su primo, el cual estaba asomado por la ventana. Toddy se subió a su lado y lo miró: El niño parecía triste y llevaba algo en la mano.
-¿Que pasa, Tod? -Preguntó la niña.
-Estoy esperando a mamá... -Contestó Tod, batallando contra el sueño.
-Escuché que se fué lejos. -Dijo Toddy como respuesta.
-Si...
-¿Crees que regrese?
-Si, va a regresar. -Dijo él, mirando a su prima con una sonrisa- Y cuando lo haga, le daré ésto...
-¿Que es?

Toddy tomó lo que Tod traía a la mano. Era un dibujo hecho con crayones donde se podía ver a un niño felíz en medio de un hombre con una maleta y sombrero; y una mujer con las mismas ropas de su madre cuando se fué, hecho con todo el talento que una mano inexperta de cinco años podía ofrecer.
-¡Somos nosotros! -Dijo el niño recuperando la alegría.
-¿Nosotros?
-No, no, Mi mamá y yo encontrando de nuevo a papá y llevándolo a casa. ¡Esos somos nosotros!
-Ooohhh
-Si, así es. Cuando mamá regrese, voy a mostrarle ese dibujo, y cuando lo haga, vamos a ir a buscar a papá y luego...

El niño continuó contándole su grandioso plan con energía a su prima, quien lo escuchaba atentamente y se emocionaba al escuchar todo lo que iba a hacer. No tenían idea de que ese iba a ser el último día que Tod vería a su madre.

Voz: Charlyto