La loba
-Shakira.Alana.
Llegaba tarde, sin embargo no era para tanto.
-¡Nena!, mi amor, Llegas tarde.
Crystal, una drag con mucho brillo, talento y amor para dar. Su peluca de Dolly Parton, sus tetas falsas y maquillaje exagerado de tonalidades lila la hacian resaltar de una coqueta manera, me recibió en el camerino, hoy habia full house, así que daríamos un gran show.
El sonido de la música y el bullicidio de la gente afuera me llenaba de emoción y nerviosismo. El escenario estaba listo, luces, sonido...
La paga sería buena hoy, y ahora que no tengo trabajo...
Mierda.
-¿Dónde está Louis?- pregunto.- No estaba en la barra.- Tomé asiento frente al espejo mientras Crystal comenzó a recojer mi cabello para colocarme una peluca de rizos rubios.
-Estaba hace un momento aquí, probablemente esté en el depósito.
-Ok.
El camerino estaba solo y espacioso, sin embargo pelucas, trajes, lentejuelas, maquillaje y hasta un par de tangas estaban esparcidos por el lugar.
-Las demás están listas, por si lo preguntas- Crystal sonrió ante mi mirada inquisidora por el lugar.
Sabe que no soy fan del desorden aunque siendo honesta, mi closet esta peor, con tangas y todo.
-Ok pequeña loba.- Crystal colocó un último gancho a mi peluca, luego me tomó de los hombros con ánimo- ¿Estás lista para aullar está noche?.
Mi sonrisa coqueta y mi aullido la hizo reír.
-...-
Joseph.
Se lo que pensarás.
Alguien como yo entrando a este feo lugar.
La verdad es que tenia curiosidad.
Pagué mi entrada, me colocaron una cinta Neon en la muñeca con el logo del bar, además dejé una generosa propina al gorila de afuera para vigilará mi auto, uno nunca sabe que podría pasar en este feucho lugar.
No me juzgues.
Lo primero que me golpeó al entrar fue el olor, cigarrillos y alcohol. Las luces estaban bajas y algunas de diferentes colores neon ondulaban por el lugar, afortunadamente la barra tenía asientos libres mientras que pequeñas pero altas mesas ya tenían ocupantes, habían sofas en las esquinas con una mesita en el centro, dando un toque de privacidad, las personas de allí parecían estar muy concentrados en lo suyo.
Mientras recorría el lugar con mi mirada me fijé en un escenario bien iluminado con una corta pasarela que llegaba al inicio de la pista de baile. El lugar no era grande Pero tampoco estaba corto de espacio.
Sentí aún más curiosidad por saber en dónde se encotraba la pequeña pez, así decidí llamarla.
No me preguntes el por qué.
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MAYBE SOME DAY...
RomanceDicen que la vida puede ofrecerte segundas oportunidades. Bien, pues debí haberle cerrado la puerta en la cara. Aunque si lo hubiera hecho, mi corazón nunca hubiera sanado, tal vez no hubiese sido feliz. ¿Pero qué es ser feliz realmente?. Quizás de...