El mundo de la mente

2.1

Corro, corro sin saber hacia donde voy, ¿por qué estoy corriendo? 
Debo tranquilizarme... pero por alguna extraña razón no puedo... solo quiero huir, pero ¿huir de qué?

¿Qué me persigue? solo sé que debo alejarme... ¡Mis manos, Mis manos! ¡En mis manos tengo sangre!

¿¡ Cómo llegué aquí, que fue lo que pasó!? 

El cansancio me venció, solo puedo dejarme caer, debo recordar, ¿Acaso soy un asesino? Dios, espero que no, ¿De quién es ésta sangre?

Tranquilo Alessandro, comienza mirando a tu alrededor, piensa ¿Dónde estás? al parecer estas en un pequeño parque, desde aquí puedes ver la calle... ¿Qué hago aquí? ¿Por qué no puedo recordar nada de lo que me pasó?

Tranquilo... debo estar tranquilo, debo recordar, debo normalizar mi respiración, inhalar y exhalar... concentrarme en eso. Debo pensar, yo conozco este parque he pasado por aquí un montón de veces, queda de camino... de camino... de camino, ¿a dónde?

Lo mejor será ir a la calle quizás eso me ayude, pero no puedo no solo tengo mis manos ensangrentadas, parte de mi ropa también lo está, ¿¡Qué he hecho!?

La tarde se desvanece, comienzo a sentir que el frío lastima mi cuerpo, solo llevo puesto una camiseta de manga corta. creo que he deambulado por este parque por quizás veinte minutos desde que recobré la conciencia, aún no sé que hacer ¡Momento! yo tenía una campera, no solo esta camiseta, lo recuerdo,  yo salí de mi casa, fui al trabajo... y... ¡Dios, no, no por favor! Estoy cerca del cementerio, ahora lo recuerdo, yo debía encontrarme con Nathaly hoy, ella me lo dijo, hoy hacía fecha de la muerte de papá, yo salí del trabajo y vine al cementerio... pero solo eso recuerdo.
¡Nathaly, dios mío Nathaly! a ella no le pudo haber ocurrido nada, no recuerdo haberla visto.

Debo sacarme la duda, reunir el poco valor que me queda e ir hasta ahí.

Siento el cansancio en mis piernas, un punzante dolor en mi cabeza y la sangre seca en mis manos. El paisaje es hermoso, y tétrico a la vez. los hermosos árboles, la calle desierta y detrás el monumental cementerio imponiendo su silencio y majestuosidad, con sus colosales estatuas, sus gigantes paredes, y una gran cantidad de tumbas.  Cuantas vidas extintas... cuantas historias que ya no serán contadas jamás, cuánto dolor que fue sellado, para que por la eternidad predomine el silencio y la nada, me siento vacío, me siento confuso, pero no hay rastros de nada por aquí, lo mejor será entrar,debo ver la tumba que contiene lo que alguna vez fue mi padre ¡que masoquista es todo esto! 

¡Ohh! dios por favor ¡NO! ¿¡Por qué!?....

Alessandro luego de ver aquella dantesca escena cayó en un desmayo... su temores estaban bien fundados. 

El destino reía con ironía, la muerte jugaba con la vida de éste muchacho a su total y caprichoso antojo, puesto que a los pies de la tumba de su padre, yacía en el suelo un cuerpo rodeado en un charco de sangre, aquella vida se había extinto, con ojos apuntando hacia ningún lado, la boca entre abierta, y sus cabellos alborotados empapados en sangre estaba lo que alguna vez fue Nathaly, que había sido brutalmente asesinada.