DIE TO REVIVE

Capítulo 14: Planes de futuro Parte II

Sale por la puerta que habíamos entrado ye va a un pequeño escenario que hay en medio de la sala, la gente al ver que está ahí al medio empieza a callar y a prestarle atención. Hace un pequeño discurso de lo que aremos y pide voluntarios para acompañarnos a California. Al principio poca gente levanta la mano pero al cavo de un rato unas cincuenta personas están con la mano al cielo, deven ser un poco menos de la mitad que vendrán con nosotros, pero son mas que suficientes. En cuanto papá baja del escenario la gente se empieza a dispersar y hacer sus tareas, algunos montan y cargan armas, otros empaquetan comida,... Me dirijo a papá y lo miro con una pequeña sonrisa en la cara.
- Bien hecho papá, veo que eres tú quien tiene el control aquí. - Le digo amistosamente.
- Si, bueno, digamos que los salve de la muerte. - Dice cabizbajo. - Bueno ahora será mejor que te bayas con tu madre a comer y después a dormir, mañana te espera un largo día.
- No, no me iré de aquí hasta que no triemos el barco o los barcos que nos llevaremos, yo empecé esto y quiero asegurarme de que salga bien así que... - Alargo la mano para que me enseñe el camino al embarcadero.
Papá asiente y pasa por delante mío, lo sigo hasta una puerta que da a un extenso pasadizo, caminamos ágilmente por el hasta que llegamos hasta la puerta del final, me hace un gesto de que yo mismo la puedo abrir y así hago. Las últimas luces del día entran por la pequeña puerta y me dan a los ojos. Camino hacia afuera y veo el grande puerto de Nueva York, quedan pocos barcos comparados con los que había antes, habrá unos cincuenta, que gran mayoría de ellos son botes o pequeñas lanchas motoras. A un lado hay un crucero atracado, pero yo no necesito un barco tan grande, sigo mirando todo el puerto y visualizo dos lates grandes de color blanco y negro.
- Esos. - Digo señalando a los barcos.
Corro por el puerto hacia ellos y me planto delante de uno de los dos, son enormes, perfectos. Subo en el barco y lo empiezo a inspeccionar, medirá unos 25 metros de largada y tiene tres plantas, veo que en la entrada del barco hay un botón rojo con un dibujo de un coche, al lado hay una descripción:
"Compartimento para coches, solo abrirse cuando el barco está parado y amarrado a un puerto"
Sigo adelante por el barco hasta llegar delante du una piscina, es pequeña, tiene cuatro tumbonas a su alrededor de color negro, sigo avanzando y subo una pequeña escalera que me lleva a la entrada del barco, tiene una puerta transparente y una ventana pero no alcanzo a ver lo que hay adentro porque está oscuro. Desenfundo mi arma y agarro el pomo negro de la puerta, lo estiro rápido y la puerta se abre, apunto con el arma a la oscuridad, no hay nadie ahí dentro. Enciendo la luz con el interruptor de al lado de la puerta, la luz no va, supongo que el generador debe de estar apagado. Giro la cabeza y miro a papá.
- ¡Tú be a inspeccionar el otrobarco! - Le grito.
Al mismo momento que me escucha sale disparado para el otro barco y empieza a subir. Vuelvo la mirada a la oscuridad y saco la caja de cerillas que llevo en el bolsillo y enciendo una cerilla, hace poca luz pero es suficiente, camino por la gran sala y me dirijo a la puerta que hay a un rincón con un cartel de unas escaleras. Me dirijo a esa puerta y agarro el pomo con la mano que tenía la cerilla, pongo el arma en alto y abro la puerta, un frío escalofriante me invade. La cerilla se apaga y entro en pánico, me pongo tenso y saco de nuevo la caja de cerillas de mi bolsillo, saco una, las manos me tiemblan y me cuesta encenderla, pero al fin se enciende. Sigo bajando las escaleras hasta llegar a la sala de máquinas, está llena de máquinas que desconozco y tanques de agua. A una pared hay una palanca roja y negra con un símbolo de un rallo. Corro hacia el que está detrás de un panel de interruptores, miro al suelo y veo un rastro rojo. Sangre. Con valentía alzo la pistola y la pongo enfrente mío junto a la cerilla. Miro detrás del panel de luces y veo un niño pequeño en el suelo, de espaldas a mi. Parece vivo. Respira. Me acerco a el y tiro el arma al suelo, acerco la mano temblorosa a su espalda. "Estás bien, chico" pregunto en voz baja. Le toco el hombro con la mano... Sin previo aviso el pequeño niño se tira encima mío. Está muerto. Abre su boca de tal manera que le sale sangre de las mejillas. Yo lo sigo aguantando por los dos hombros para que no me como o me mate, pongo una de las manos en su cuello y lo aguanto por ahí, la piel se le empieza a deshacer y a chorrear sangre, es asqueroso. Alargo la otra mano para coger el arma, no llego, la estiro lo mas que puedo pero no llego. Agarro al niño todavía mas fuerte por el cuello, mis manos ya se encuentran mas adentro de su cuerpo y la sangre me empieza a caer por la cara, con un tirón rápido y fuerte le rompo la nuca y consigo sacarlo de encima mío. Una vez está al suelo cojo el arma y le disparo a la cabeza que tal explota al recibir contacto con la bala. Caigo de espaldas al suelo, la sangre de su cabeza me ha salpicado la cara y tengo las manos ensangrentadas también.
Me levanto y subo la palanca de la luz, la luz de la habitación se prende y también la de todo el barco. Agarro el cuerpo del niño y me lo meto en la espalda, subo las escaleras y salgo a fuera el barco. Estoy en la cubierta, me boy a un lado del barco y tiro al niño por la borda. Alzo la vista y veo que el barco de enfrente ye tiene luz así que me dispongo a salir del mío. Voy hasta la parte trasera del barco y salto al puerto. Camino unos cuantos metros y me encuentro con papá que ya sale del barco.
- Di a alguien que revise y limpie ese barco. - Le digo a papá.
- Pero que coñ... - Empieza papá, pero yo lo corto.
- Me voy a duchar y a cenar, adiós. - Le corto.
Me voy.