˚∗ ᵕ̈ :❝𝑯𝒆𝒂𝒗𝒆𝒏 ೫˚∗: | Enhypen Reactions [soft]

022. 💟 ʜᴇᴇꜱᴇᴜɴɢ˙♡⁠˖⁠꒰⁠ᵕ⁠༚⁠ᵕ⁠⑅⁠꒱

Este era hasta ahora el día más feliz de tu vida, te habías casado con el hombre de tus sueños.
Y es que vamos Heeseung es el sueño de cualquiera, todo en él era bueno. Incluso después de firmar no podías creerlo, habías practicado una sonrisa sutil mientras llegaba su día pero, esta sonrisa que tenías ahora, era mucho más grande y es que en serio estabas muy feliz.
Y ni hablemos de él, su sonrisa angelical brillaba en todo el lugar.

Tomados de la mano, riendo y disfrutando sus primeros minutos de casados se despidieron de aquellos que los acompañaron con la promesa de verlos por la tarde en la recepción. Y es que si, podrá parecer extraño pero decidieron que la ceremonia sería temprano por la mañana y la recepción, osea la fiesta sería al atardecer. Heeseung no quería tenerte por mucho tiempo lejos de él, así que por eso se hizo de esa manera.
Al llegar al que sería ya su hogar, solo descansaron.

La noche sería larga, muy larga.
Ya le habías comentado a Heeseung que tú familia era muy fiestera, y que si es caso podrían estar dos o tres días en la misma tónica alegre. Lo cual no le desagradó en nada a tu esposo, él también suele ser muy alegre y le gustan las fiestas para compartir con sus cercanos.
Al principio no podías pegar el ojo, es que lo tenías frente a ti dormido. Tan tranquilo, tan lindo, tan en paz, tan tuyo. Solo suspirabas mientras memorizabas cada parte de su rostro hasta que finalmente gracias al calor que su cuerpo emanaba, descansaste.

(...)

Cómo si se te estuviese escapando el alma te levantaste, viste el reloj. Las cinco y treinta de la tarde. La recepción comenzaba a las siete en punto y tú tenías que prepararte de nuevo. Levantaste a Heeseung quien solamente empezó a reír mientras corría a la cocina, en busca de agua y frutas mientras tú empezabas a acomodar tu cabello de nuevo y te maquillabas. Llegó de nuevo con su carita medio hinchada y un plato con manzanas y mandarinas.

— Mira mi amor, al menos comamos esto mientras llegamos.

— Mira tu cara, estás todo hinchado amor —te acercaste a él y tomaste su cara.

— Está bien, ni te preocupes... Tu eres quien tiene que brillar hoy.

— Pero yo no me casé con el aire Heeseung.

— Quiero que brilles está noche —te acercó a él y te abrazó— te amo, no sabes cuánto.

— Yo también te amo, mucho. Pero apúrate que llegamos tarde.

— Está bien, me lavaré la cara. —Regresó en nada. Y mientras él se dirigía al baño tu empezaste con el maquillaje. Que sería ligero porque ibas a sudar y tampoco querías ensuciar a nadie en medio del baile y el movimiento de la noche.

Eso sí, la sombra con brillitos te la pusiste en todas las partes que pudiste. Al salir de baño dándose palmadas en la cara seguramente porque se aplicaba un tónico, Heeseung te miró y mientras se acercaba a ti decía:

— Por Dios, te ves completamente divina —y te besó— hermosa mía.

Y pensaste que ya te habías acostumbrado totalmente a sus cumplidos, pero no. Ahí estabas tú, nerviosa y con una sonrisa tonta en tu cara.

(...)

Lograron llegar a tiempo, explicándole otra vez al personal de logística que asignaron para el evento, la serie de actividades que se realizarían. Y así fueron llegando sus padres, sus hermanos, sus amigos y el resto de su familia y conocidos que no habían asistido a la ceremonia. Recibiéndolos muy felices y animados.

— Los novios y por supuesto yo, agradecemos la asistencia de todos está noche. Por favor acérquense —hablaba Jay, quien era el padrino de bodas a ustedes que aún estaban entre las personas— ¡Un fuerte aplauso para esta pareja que está enamorada! —Gritó haciendo reír a su público, definitivamente habían elegido bien a su host— por favor tómese de la mano y dirijan unas palabras para sus invitados.