En un giro del destino, la escritora Adara Rossi es acusada de un crimen que no cometió. Secuestrada en la noche, su salvación llega con Lian, un misterioso hombre de ojos rojos capaz de cambiar de forma.
Atrapada en una red de mentiras y engaños...
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Adara_
La noche había caído, y con ella, la necesidad de desaparecer en sus sombras. Lian y Luca, mis inesperados protectores, habían decidido que era hora de un cambio radical. Sentada en una silla improvisada en nuestro escondite, Lian se armó de tijeras y comenzó a cortar mi cabello con una concentración que no le conocía.
― Solo un poco de estilo, ¿eh? ― bromeó, mientras mechones de mi cabello caían al suelo. ― No te preocupes, te dejaré fabulosa.
Miré a Luca, buscando alguna señal de apoyo, pero él estaba demasiado ocupado preparando la mezcla para decolorar mi cabello oscuro.
― ¿Fabulosa o como si me hubiera atacado una podadora? ― repliqué, intentando ocultar mi nerviosismo.
Luca soltó una carcajada, su mirada cómplice encontrándose con la mía en el espejo.
― Confía en nosotros, Adara. Después de todo, ¿Qué podría salir mal? ― dijo, y algo en su tono no me tranquilizó del todo.
El proceso fue largo, y no sin sus momentos de tensión. Lian, con una sonrisa traviesa, se burlaba de cada expresión de duda en mi rostro.
― ¿Qué pasa? ¿No confías en mi habilidad con las tijeras? ― preguntó, mientras yo me resignaba a mi suerte.
― Es tu habilidad para no dejar calvas lo que me preocupa ― contesté, ganándome una risa de ambos hermanos.
Para mi sorpresa, y alivio, el resultado fue menos desastroso de lo esperado. Mi cabello ahora caía en una melena hasta los hombros, con un flequillo recto que enmarcaba mi rostro. Luca, con manos más hábiles de lo que su apariencia sugería, había logrado aclarar mi cabello a un rubio ceniza, salvándolo de la ruina con una mascarilla milagrosa.
― No está mal, Lian. Tal vez tengas un futuro como estilista si esto de ser un cambiante no funciona ― dije, inspeccionando su trabajo.
― Oh, siempre es bueno tener un plan B ― respondió él, guiñándome un ojo.
Con mi nueva apariencia, Luca decidió que era el momento de compartir más sobre el mundo al que pertenecían. Sentados en el suelo desgastado de nuestro refugio, me habló de los dos clanes principales de cambiantes, de aquellos que podían transformarse en animales al cual ambos pertenecían "Los desilientes" y de los que cambiaban su apariencia humana mediante la sangre estos últimos se hacían llamar "Los bloodthirsty”.
― No somos vampiros, aunque la gente tiende a confundirnos con ellos ― explicó Luca, su voz seria por primera vez en la noche―¿Y esto ojos―señaló la mirada de Lian―Son una secuela de ser convertidos en cambiantes
Escuché, fascinada, mientras mi mente de escritora tejía historias de misterio y suspenso alrededor de la información que me daban. Era un mundo que superaba cualquier ficción que hubiera escrito, y sin embargo, aquí estaba, viviéndolo en carne propia.
La noche se desvanecía, y con ella, la falsa seguridad de nuestro escondite. Pronto tendríamos que movernos, enfrentar la realidad de nuestra situación. Pero por un momento, entre risas y secretos compartidos, me permití creer que todo saldría bien.
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¿Les gustan los capítulos cortos? o ¿Prefieren que sean capítulos más largos? ¿Les sigue pareciendo entretenida la historia? Nos leemos el lunes 🌹
