SOLO ÉL

21. ¿Era él?

Por suerte no había salido corriendo, al menos no de la forma en la que lo imaginé, fui más sutil y preferí decirle “estoy ocupada, hablamos otro día“ apenas terminé la oración salí corriendo literalmente y desde que llegué a mi casa no había salido de mi habitación.
Todas mis ideas eran un caos, nada estaba claro, tenía muchas preguntas, pocas respuestas y nadie más que yo podía responder.

No podía simplemente evitar las cosas y actuar como si nada pasara, porque si yo estaba confundida, Jack también lo tenía que estar, porque después de no mandarle tan siquiera un mensaje y que de la nada vea la nota de internet “reencuentro de la famosa pareja del 2019, Will Myers y Nicole
Holt” esa era una razón más para odiar a todo lo relacionado con noticias sobre famosos y redes sociales, lo único que hacían era meterse en tu vida como si tuvieran el derecho de decirdir que podías hacer y que no. ¿Qué se supone que le diría?, ¿Mis padres ya se habrían enterado? Y lo peor, tendría que salir a hablar con la prensa y aclarar todos los rumores y teorías que todo el mundo se encontraba especulando sobre mi vida y la de Will.

Estaba tan concentrada en mis pensamientos que no me dí cuenta, que alguien había entrado a mi habitación, hasta que sentí como se sentaron a mi lado.

Era Jack, lo sabía porque el era silencioso a comparación de Ian, Max, Emilio o Shelly.

– ¿Cómo estás? – fue el primero en hablar, quería romper el hielo esa era su forma de ser, el tenía paciencia, yo no.

– ¿Que haces acá? Se supone que me deberías odiar por todo lo que ha pasado.

– La gente tiende a crear teorías de lo que piensan que sentimos, sin embargo es mejor no hacer suposiciones y preguntar directamente. Por eso estoy acá.

Me había quitado las palabras, antes de que yo pudiera hablar, como si ya supiera lo que iba a decir, era como si me conociera, se sentía extraño. Ninguno de los dos hablaba, el silencio era cómodo y cuando al fin sabía que decir, escuché un suspiro de su parte antes de que hablara.

– Realmente no se que está pasando, solo se que internet explotó con la noticia de tu reencuentro con el hermano de Emilio – soltó una risa desganada, para luego mirarme – no se que es lo que piensas, pero lo que si se es que no me voy a alejar y mucho menos te voy a dejar sola. Se que necesitas espacio y que quieres estar sola, por eso no había insistido ni mandado mensaje, te conozco hace poco, pero...

– ¿Porqué haces todo esto Jack? – pregunté mientras me levantaba del sillón y caminaba hacia la ventana – ¿es que no te das cuenta?, soy un caos donde quiera que esté y...

– Me gustas pequeño Koala y eso también incluye que me importa todo lo que te suceda, sea bueno o malo, no me dejó llevar por los rumores que la gente o los medios de comunicación inventan – se puso a mi lado y me tomo de las manos – aparte eso no va hacer que me dejes de gustar.
Antes de seguir hablando tomo mi rostro para que lo mirara a los ojos y prosiguió a hablar.
– Tienes un pasado, pero quién no lo tiene, de ser así, no seríamos las personas que somos en la actualidad. Así que no creas que por una simple noticia me voy a alejar, a menos que tú me lo pidas.

Sabía que estaba hablando en serio, que ninguna de sus palabras eran broma, lo podía ver en sus ojos, por el pequeño brillo que habían adquirido al principio de sus palabras y por esa dilatación en sus pupilas haciendo que el azul de sus ojos se hiciera tan intenso como un océano.
Mi mente seguía procesando todo lo que Jack había dicho, mi shock era notorio, pero eso no quitaba que siguiera confundida con todas las emociones que había experimentado desde hace ya casi tres días.

– Lo siento mucho Jack, sabes que tengo un cariño enorme, pero no exactamente como tú lo quisieras, todo esto para mí es confuso y complejo, te agradecería que no intentes ayudarme. Por el momento prefiero estar sola.