Celos

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Me levanté temprano esa mañana porque sabía que A-Nueng vendría a visitarme.
Tal vez por motivos de trabajo, pero la tendría en el palacio conmigo, eso me daba la oportunidad de pasar tiempo juntas y ponernos al día.

Quería cocinarle algo rico, así que me apresuré a ir al mercado y comprar los mejores ingredientes. Quería que se sintiera feliz de probar mi comida por primera vez ya que durante el tiempo que estuvimos juntas no logré tener aquel gesto con ella.

Toda la mañana me dedique a preparar las mejores comidas, estaba tan feliz y concentrada que salte del susto cuando vi que Sam se encontraba a un lado mío

– ¿En que momento llegaste aquí?

– Hace poco, te vi tan concentrada que no quería interrumpir – Mi hermana miro toda la comida que había cocinado – ¿harás muchas entregas hoy?

– No

– Entonces ¿Por qué parece que cocinaste para un batallón?

– No seas exagerada – Pero cuando me di cuenta Sam tenían razón, había cocinado Pad Thai, Som tam, Tom Kha kai y Panaeng mu

– Creo que ya te diste cuenta – Sam me miro – ¿Para quien es toda esa comida?

– A-Nueng viene a comer a casa hoy

– Creí que te odiaba

– Loca ¿Cuando dije que me odiaba?

– Por tu llanto ayer, creí que tal vez ella te odiaba

– A-Nueng no me odia – o eso espero, dije para mi misma – Como sea ¿Que haces aquí?

– Quería ver como estabas, ayer nos dejaste preocupada – Le sonreí a mi hermana, desde que la abuela partió nos habíamos vuelto aun más cercanas.

– Estoy bien pequeña

– Sabes que puedes hablar conmigo y con Mon

– Lo sé

– ¿Segura que estas bien?

– Muy segura – Mi sonrisa se amplió mas lo que provocó que Sam me mirara sin creerme

– Cuando mas sonríes mas triste estas

Suspiré, mi hermana me conocía lo suficientemente bien para notar mis estados de ánimos, toqué su cabeza y le sonreí con cansancio.

– Te prometo que estaré bien –Sam asintió

– Mon y yo haremos una comida familiar el sábado, estaremos felices de verte ahí, también ira la familia de Mon y Kirk

– Puaj – Odiaba ese nombre – ¿Por qué tienes que invitar a tu ex? ¿Mon no se siente insegura?

– ¿Por qué se sentiría insegura? – Sam no entendía – Mon sabe que solo haría el amor con ella

– Entendí, entendí – Levante las manos para evitar que mi hermana siguiera hablando – Ya no quiero saber nada de tu vida sexual, suficiente tuve con lo de ayer

Sam se fue no sin antes decirme que podía ir a visitarla cuando quisiera, que la pequeña Beloved estaría felíz de ver a su tía.

Como faltaba poco para que A-Nueng llegara subí a mi habitación para poder bañarme y cambiarme, no quería que la pequeña de ojos bellos me viera desaliñada.

Me sentía un poco tonta porque había un raro sentimiento de felicidad y nerviosismo. Aun me preguntaba como esa niña me causaba todas esas sensaciones.
Me mire al espejo y estaba satisfecha con lo que veía, a decir verdad yo era una mujer muy atractiva, eso era innegable.
Había elegido unos jeans negros y una blusa blanca suelta, intenté no verme exageradamente arreglada, así no le daría una impresión equivocada a A-Nueng.

Cruce de Caminos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora