Cruce de Caminos

Dejarse llevar

La pequeña Beloved corría feliz y gritaba llena de alegría cada vez que yo la atrapaba y llenaba su cara de besos.
Como amaba a esa pequeña, su sola existencia llenaba de luz la vida de todos los que la amabamos.

Mi respiración estaba agitada así que me detuve un momento a descansar.

– Ya estas vieja – Se burló Sam – ¿Como planeas terminar la misión con tu novia si no puedes aguantar correr?

– ¡SAM!

– Estoy bromeando

– ¿Desde cuando bromeas? – Fruncí el ceño – Es raro

– Mmm

– Además no es novia

– Pero dijiste que se besaron muchas veces ayer

– Eso no la hace mi novia

– ¿Quien besa a otra persona sin ser novias? – Sam parecía genuinamente sorprendida, y en ocasiones como estas me daba ternura la inocencia de mi NO tan inocente hermana

– Acaso ¿Mon y tú no se besaban antes de ser novias?

– No – Sam negó fervientemente – Solo nos mordíamos

– ¿qué?

– Si hacíamos un intercambio, ella me mordía la nariz y yo le mordía los labios

– Eso es besarse

– No – Sam me miró seriamente – Solo mordía sus labios, morder y besar es diferente.

– Bueno – Negué – No importa, el asunto es que no somos novias

– Pero se besaron mucho

– Si

– Y la abuela te dio su bendición

– Si

– Y sentiste mariposas en el estomago

– Si

– Y la manoseaste en el auto

– Si

– Y quieres tener sexo con ella

– Si – Me detuve instantáneamente, Sam sonrió con picardía – No espera

– ¿No quieres?

– No es eso, es que no preste atención

– Entonces ¿No quieres tener sexo?

– Si quiero, es decir – Sam me confundía – Espera dame un momento.

Sam espero pacientemente a que pudiera poner en orden mis ideas, si había alguien además de A-Nueng que podía ponerme nerviosa definitivamente esa era mi hermana.

– Ahora si ¿Cual era tu pregunta?

– ¿Quieres tener sexo con tu novia?

– Aaaaa ¿Por qué eres tan directa? – Me quejé – Ya te dije que no es mi novia

– Pero...

– Si nos besamos pero no somos novias, me encantaría a decir verdad pero creo que A-Nueng aun no confía en mi

– ¿Por qué dices eso?

– Bueno – Rasque mi cabeza – Desde ayer que me fui de su casa no responde mis mensajes

– Ahora es una adulta, tal vez solo está ocupada

– Puede ser, realmente no quiero pensar mucho en ello – Sam me sonrió