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Había comenzado mi relación con el chico de Hufflepuff, Cedric Diggory. Todas las chicas querían estar con él y me eligió a mi, sabiendo que había terminado una relación hacia poco, no le importo.
Él me decía que podría arreglar ese vacío y se lo agradezco tanto, así como lo dijo lo está haciendo.
En nuestra relación no habían nada de peleas por el momento, tal vez un poco de celos pero nada grave. Habíamos comenzado a salir hace 3 meses y hace 8 meses termine con Theodore Nott.
Hoy tenía pendiente una cita frente al lago negro junto a Cedric. Ya faltaba poco para la hora en la que nos debíamos encontrar, así que me cambie y fui hacia allá.
Al llegar pude ver una mantel tirado en el suelo y con una canasta llena de comida. Solo faltaba algo..
— Hola bonita – sentí unas manos en mi cintura, sabía de quien era.
— Hola lindo – volteé con una sonrisa y le di un beso en los labios.
— Ven, siéntate, espero que te guste – se sentó sobre el mantel y comenzó a sacar las cosas de la canasta. Pude ver galletas, frutas, cupcakes y otras cosas ricas.
— ¿Las galletas las hiciste tú? – me senté y lo ayude a sacar lo que quedaba en la. canasta.
— Si – asiente dándome una sonrisa. Lo mire con ternura. — Come lo que quieras – comió una de sus galletas y abrió los ojos como plato.
— ¿Qué pasó? – lo mire divertida.
— No comas las galletas, están.. – agarro rápidamente la bolsita en la que se encontraban las demás de estas y las metió a las canasta. — Puede que estén un poco duras y quemadas..–
Solté una risa — Pensé que eran de chocolate – bromeé a lo que el me miró mal.
— Si bueno, los elfos de la cocina no me habían dejado hacer las galletas y me insistían en que ellos lo podían hacer, pero yo las quería hacer especialmente para ti. Espere a que se distrajeran y las hice rápidamente, no sabía cuánto tiempo exactamente debía dejarlas..– miraba hacia al frente y sus mejillas se tornaban rosadas.
No podía evitar tener una sonrisa y mirarlo con ternura, amaba como me contaba todo con detalles.
Tome su mano.
— Gracias por eso, por más que no hayan salido como quisiste, fue un detalle muy lindo– bese su mejilla y el me miró con una sonrisa grande.
— Te amo mucho, Madidi – sonreí.
— Yo igual – dejo un beso en mi frente y después empezamos a comer.
Autor's Note:
Demasiado corto, pero quería mostrarles como era su relación con Cedric.
