⭐ CAP 20 ⭐
Zhu _ Ya han pasado tres días desde que usted llegó, aún no veo mejoría en Shi Ying
Osusuki _ Tranquilo gran sacerdote, primero debe sanar las heridas internas, las cuales fueron muchas.
-Mientras los dos hablaban de lo ocurrido, una voz algo débil se escuchó.
Shi Ying _ Gran sacerdote, ¿Está ahí?
- Los dos se acercaron a Shi Ying, por fin recobraba el conocimiento
Zhu _ Aquí estamos, tranquilo
Shi Ying _ Me duele todo mi cuerpo
Zhu _ Es normal, pero poco a poco te vas a recuperar
Shi Ying _ Lamento todo lo sucedido, yo, me siento muy culpable
Osusuki _ El pasado no debe removerse, y solo recordarse cómo parte de una enseñanza, no sirve de nada cargar con culpas, estás solo generan debilidad en tu corazón
Shi Ying _ ¿Xie Yun?
Osusuki _ Debería sentirme halagado por eso, pero no soy Xie Yun, al parecer aún me veo joven. Xie Yun es mi hijo, él es quién más se parece a mí, tal vez por eso te confundiste.
Shi Ying _ ¿En dónde está él?, ¿Sigue ayudando a la gente?, el incendio ¿Aún sigue?
Zhu _ Shi Ying, el incendio fue apagado, y la gente se encuentra bien. Estuviste inconsciente durante muchos días, semanas tal vez
Shi Ying _ Entonces ¿En dónde está Xie Yun?
Osusuki _ Él está en el templo del Dios Inari
Shi Ying _ ¿Por qué no está aquí? ¿Algo le pasó?
Osusuki _ Él está bien, recupérate y te llevaré a dónde él está.
-Los siguientes días Shi Ying mostraba gran mejoría, lo que más deseaba era ver a Xie Yun, la mejoría de su cuerpo era notable, aunque internamente aún no estaba al 100%, pero ya había llegado el momento de partir.
Osusuki creyó oportuno regresar al templo del Dios Inari, después de todo ya habían pasado algunos días y conociendo a Xie Yun sabía que estaría ansioso por saber algo de su querido Shi Ying. Comenzaron a prepararse para su partida.
Shi Ying _ Gran sacerdote, llegó el momento de separarnos, usted ha hecho mucho por mí, pero tiene qué regresar a dónde pertenece, yo estoy y estaré eternamente agradecido por todo lo que me enseñó, lamento haberlos defraudado, nunca fue mi intención.
Zhu _ Shi Ying, aún recuerdo cuándo tu madre te puso en mis manos, siempre creí que esté era el camino correcto para ti, y hoy reconozco que estaba completamente equivocado, sé que a partir de éste momento nuestros caminos serán diferentes, pero eso no impedirá qué éste contigo en el momento qué me necesites, eres cómo un hijo para mí y aún tengo una deuda con tus padres. Solo cuídate y se fuerte ante todo aquél que quiera verte débil.
Shi Ying _ Lo haré, este no es un adiós, pronto nos volveremos a ver gran sacerdote.
- Ambos se dieron un fuerte abrazo, algo dentro del gran sacerdote le decía que tal vez sería la última vez que vería a Shi Ying.
Osusuki y Shi Ying comenzaron su caminó hacia el templo del Dios Inari, ya era el momento de hacerle frente a todo.
Osusuki _ Estás consciente qué ese sello te otorga poder ante los humanos, pero también odio y envidia
Shi Ying _ Losé, tal vez mi madre y el emperador siempre lo supieron, el poder siempre sacará lo peor de las personas, eso nunca cambiará aunque pasen años, décadas o siglos.
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El gran amor de un zorro
Short StoryHace muchos años existía la leyenda de un Dios zorro, que en las noches de luna llena podía convertirse en un humano. Este zorro era de una belleza inigualable, su rostro delicado, su piel era clara, sus ojos a pesar de ser fríos mostraban una calid...