28| Te esperaré

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5 meses después.

Era viernes a mediodía  y el día súper soleado, el verano es una de mis estaciones favoritas.

Estaba  todo perfecto, Alex y yo teníamos una relación sana y Lia y yo visitábamos a sus abuelos mínimo una vez a la semana incluso había conocido a sus amigos.

Nube dormía cada noche conmigo pero una vez la dejaba fuera se iba con sus mejores amigos.

Trabajaba en el jardín cada mañana y en el huerto,me dedicaba a regar y a recolectar los vegetales.

Mientras los recolectaba, llegó Alex.

-Hola,dentro de poco  tengo que irme a la otra ciudad del reino por unos asuntos importantes, cosas aburridas-dijo.

-Vale,yo estaré por aquí trabajando o haré algo con Lia, ya veré-dije.

-Vale, adiós Aura-dijo

Y se fue,la verdad me encantaba que no fuera cariñoso,  como yo porque odiaba las personas empalagosas.

Acabé con mi trabajo en el jardín y me dirigí dentro para dárselo a las cocineras.

Todos los vegetales o comidas que recolectaba se los daba a las cocineras ya que lo necesitaban para la comida y la verdad hacían un buen trabajo.

Toqué a la puerta y me abrió la cocinera con una sonrisa, al ver mi cesta llena de verduras.

La verdad es que hoy había sido uno de los días con más comida que llevaba y me emocionaba bastante ya que me gustaba.

-Lo utilizaré ahora para la comida ya que sólo faltan unos 30 minutos,muchas gracias Aura-dijo.

Asentí, hasta que se me ocurrió algo.

-¿Puedo ayudar a hacer una ensalada?-dije.

-Sí, claro,tiene que ser para mucha gente así que haremos un bol grande y la gente que se ponga la cantidad que guste, tengo los demás vegetales en la nevera, ven-dijo.

Abrió la nevera y había cientos,ahi me asusté, pero ya era muy tarde.

Empecé con los tomates y después la lechuga, el pimiento que había recolectado y por último las zanahorias.

Iba por la mitad de cortar la zanahoria cuando me corté el dedo.

Un corte bastante profundo y con sangre,pero tenía demasiada vergüenza de decir nada, así que solo seguí y me enrolle papel.

Sí,el papel de cocina no era una buena idea.

Acabé con la ensalada y se la di a la cocinera.

-Perfecta!Tiene muy buena pinta muchas gracias Aura-dije.

Sonreí y me fui corriendo, me alegro de que no pude ver su cara al irme corriendo con la mano con sangre intentando salir del papel de la cocina  pero no creía que había visto la herida, así que bien.

No sabía si había enfermería, así que me dirigí a la habitación de Lia lo más rápido de que pude.

Toqué a la puerta y Lia salió con una mascarilla en la cara verde y gritó al ver mi mano.

-Por favor, llévame a la enfermería, no está para morirme, pero  es profunda y sangra-dije.

Ella empezó a correr y la seguí,la imagen era la siguiente: yo con una mano sangrando y ella con una mascarilla verde.

Después de correr por unos minutos llegamos a la enfermería.

Entramos y me atendieron enseguida.

Me vendaron la herida y como era muy profunda me tuvieron que coser la herida,nunca había sentido tanto dolor en mi vida.

EL REINO PERDIDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora