EL REINO PERDIDO

8|Casi

No paso nada.

Mi cara de decepción era difícil de disimular.

Marc se reía y yo le miré con mala cara.

-¿Os pensabais que sólo tocándolo iba a aparecer una hada a guiarnos el camino?Tendrá que ser más difícil porque para descubrir un portal tiene que ser complejo.

Tenía razón, obviamente no iba a ser súper fácil.

-Tenemos que pensar que debe haber alguna adivinanza o alguna pista en el mapa.

Los tres asentimos y empezamos a buscar a nuestro alrededor durante la siguiente hora y mirando el mapa y no pudimos encontrar nada.

-¿Qué hacemos? ¿Por qué nos lo ha puesto tan difícil de adivinar?-dijo Alex.

-¿No lo entendéis?Ella no puede ponerlo tan fácil ya que sería demasiado  notable para los cazadores de brujas que merodean por aquí y la podrían descubrir y es muy complejo crear estos mapas  requiere mucho esfuerzo-dije mientras seguía mirando a mi alrededor.

Ellos me miraron sorprendidos.

-Tienes razón pero tan difícil no puede ser ésto,  es casi imposible-dijo Marc.

Tenía razón y no sabía que se nos escapaba.

-Tienes razón,no tendría que ser tan difícil, hay algo que se nos escapa y no sé el que -dije.

Le quité el mapa a Marc amablemente y ahí me di cuenta de lo que nos habíamos pasado por alto.

No habíamos girado la hoja.

Me sentí estúpida, habíamos estado una hora buscando como locos en todos los rincones y ¿no habíamos girado la hoja?

Entonces vi un sol casi invisible pero lo suficiente para verlo.

-Mirad, hay un sol y tiene que significar algo-dije y ellos miraron el sol con curiosidad.

Nos quedamos pesando en silencio un par de minutos.

-Esperad!No os dais cuenta que estamos rodeados de árboles?Si hay un sol en el mapa eso significa que tenemos que ir al sol y a lo mejor tocar el trozo de tela o hacer algo por el estilo-dijo Alex.

Tenía razón y no sabia como no se nos había ocurrido antes.

Corrimos hasta una zona hacía sol y empezamos a enseñar el mapa al sol.

Una persona paso con un caballo y nos pregunto si necesitábamos ayuda,tal cual, dábamos miedo.

Cuando ya habíamos perdido la esperanza, algo luminoso salía del libro.

Eran unas lineas de color dorado que nos senalaban el camino.

Era increíble, era como si el mapa supiera exactamente dónde poner las líneas.

Era magia y me asustaba y me gustaba a la misma vez.

Nos miramos y empezamos a seguir las líneas.

Llevábamos 2 horas caminando y serían sobre las 11 de la mañana lo que significaba que hacía mucho calor.

El sitio era muy extraño y nunca había estado ahí.

Era misterioso y a la misma vez te daban ganas de entrar en las profundidades del bosque.

El portal tenía que estar por ahí, obviamente no estaría en el bosque normal.

Nos paramos a descansar ya que al final estábamos un poco cansados y por suerte había unas piedras perfectas para sentarse y habíamos traído almuerzo.