Cap 30|| Pasado

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Al llegar a la casa un sentimiento de nostalgia se apoderó de mi.

"La casa de Kevin"

Las puertas estaban cerradas pero planeaba tirar la ventana abajo y después taparla con la cortina.

Necesitaba un sitio donde alojarme que no fuera el castillo.

Dejé al dragón fuera y pensé con que podía romper la ventana.

Por suerte, en la parte trasera había una ventana sin barrotes, esa la utilizaba para leer.

Por el camino me encontré una rama de madera bastante grande y era perfecta.

Llegué a la ventana y la tiré abajo con todos los cristales cayendo sobre mí.

Por suerte, me había cubierto un poco la cara con ropa y no se me clavó ninguno.

O eso esperaba.

Acabé quitando todos los cristales que pude, para que al pasar no me clavara,pero para asegurarme dejé una chaqueta de la bolsa de ropa en la parte de abajo de la ventana ya que era la parte donde más sobras de cristales habían.

Al pasar me di cuenta de que todo estaba desordenado,como si alguien hubiera entrado y me entró miedo.

"Debe ser una coincidencia" pensé no muy segura pero tratando de convencerme a mí misma.

Paseé por las habitaciones y lo único desordenado era el salón, mi habitación parecía igual.

Llegué al salón y empecé a ordenar.

Hasta que algo,que me erizó toda.

Aura, te escribo esto porqué últimamente noto que me observan y creo que voy a ir al castillo pronto, por si acaso no llego, si lees esta carta sin mí es que tenía razón, alguien me seguía.

Me llevé la mano en la boca sorprendida, alguien se había llevado a Kevin y tenía que descubrir quién.

Empecé a buscar más cartas o pistas, pero no había nada.

Tampoco sabía que hacer ni nada y en ese momento lo único que quería era descansar y olvidarme de todo,

Desempaqué mi ropa y la ordené en los muebles mientras ordenaba un poco la casa.

Estuve ordenando un buen rato y como ya era la hora de comer empecé a preparar arroz.

Hasta que alguien llamo a la puerta.

Alex

Al abrir la puerta tal como esperaba estaba Alex.

Él se me quedó mirando y estuvimos en silencio bastante tiempo hasta que dijo:

-Aura, no es lo que crees en serio, yo sólo estab...-dijo pero no lo dejé acabar.

-Alex déjame,por favor aunque sea por unos meses y por favor no hagas más excusas-dije.

El no estaba de acuerdo y no sé cómo no me di cuenta que sí que había razones detrás de todo.

-Adios Aura-dijo.

Yo solo asentí y cerré la puerta.

Sabía que todo lo que decía eran excusas así que no me quería ni molestar en escucharle.

Pero una parte de mí siempre estaría con él y eso lo sabía.

Estaba cansada, necesitaba dormir.

Una vez escuche el carruaje irse volví y ahí fue cuando olí a quemado.

El arroz se había quemado.

Lo había puesto en fuego alto porque no quería esperar tanto y entre Alex y todo ahora no tenía arroz.

EL REINO PERDIDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora