Rosa a sangre

12: Adoptar la mentalidad

Notas al final del capítulo.

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Guarda historias en sus pétalos, con un aroma que a libertad se asemeja. Aunque el invierno a descansar la lleve, en cada primavera, a la vida se entrega. Y que de alguna manera está ligada a un susurro de vida con el alma despierta.

Ricky no siente nada de mucho, el dolor de cabeza parece ser serio. Se ha mantenido en la habitación y no ha escuchado rastro del atleta.

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Después de un sueño que parecía eterno, despierta cuando la noche ya remplazo al día. Al salir de su habitación, nota que la televisión en la sala está encendida y Ji Woong, quien al parecer ya ha regresado, se encuentra cómodamente sentado en el sofá.

-¿La chica ya se fue? - pregunta.

Ji Woong no responde de inmediato. Apaga la televisión y luego dirige su mirada hacia Ricky, quien acaba de despertar.

- ¿A qué chica te refieres?

Ricky se queda en silencio por un momento, pensando en cómo debe responder.

- Vino por la tarde, me reclamó por tomar momentáneamente el pañuelo de la cómoda - explica, mientras empieza a notar un golpe en los labios de Ji Woong.

- ¿Qué ha pasado? - pregunta preocupado, acercándose para observar más de cerca.

- ¿Dijo algo?

Ricky lo mira extrañado, sin saber qué es lo que debería decirle. Solo ha sido comparado y nada más. No sabe a qué hora se retiró del lugar.

- No preguntó por usted, me quedé en la habitación y no sé en qué momento se fue.

La expresión de Ji Woong cambia, mostrando dudas.

- ¿Quién es ella? No parece muy amigable.

- No es alguien que deba importarte.

- Entonces, ¿por qué tiene acceso? Si no es importante, ¿por qué vino?

- No es asunto tuyo.

- Hace unos días sí lo era.

- Hay cosas que necesito manejar por mí mismo, Ricky.

Bien, ahora nada es de su incumbencia cuando antes el hombre le había hecho saber que si lo era. Ahora es un cero a la izquierda.

Ricky se queda mirando a Ji Woong, no entiende por qué está siendo tan reservado sobre esta chica misteriosa.

- ¿Por qué no puede simplemente decirme quién es? - pregunta Ricky, su tono es más duro de lo que pretendía.

Ji Woong se levanta del sofá y camina hacia él.

- Parece ser muy importante para usted, tanto que quiere mantenerla en secreto de mí.

- Solo tú me interesas de esa forma, ella solo es alguien cercano

Ji Woong habla con tal seguridad que provoca tensión en Ricky. Ji Woong sonríe al darse cuenta de lo que sucede.

- No deseo a nadie más, si eso te causa inquietud.

Lo dice con tal sutileza, tocando su corazón con tal delicadeza, que Ricky retrocede un poco hasta la encimera de la cocina.

- No soy yo quien complica las cosas.

Ambos se encuentran en el centro de cada situación que surge. Ji Woong intenta persuadir a Ricky hacia donde sea que esté su relación.

El atleta se toma el tiempo para analizar la situación y buscar cómo girarla a su favor. Le sorprende que, a pesar de todo, esté pensando en cómo solucionar y reparar lo que esté roto en ese momento.