La muerte de Lord Voldemort no había sido la única orden que ejecutó Umbra. Dentro del ministerio también había una avanzada de mortífagos enviada por Voldemort para que una vez que cayera Hogwarts, el ministerio ya estuviera asegurado también. Umbra sabía que Voldemort podía ser un lunático pero no era un tonto. Voldemort querría asegurar al menos una victoria. Si fallaba en Hogwarts, tendría aun así el ministerio y podría hacerle al vida miserable a todo el Reino Unido.
Así que Umbra había decidido enviar algunos elementos clave al ministerio. Kingsley para empezar, lidero algunos aurores que si bien no sabían que estaba pasando, siguieron a Kingsley porque los artefactos que estaba usando contra los mortífagos, los estaba diezmando rápidamente. Kingsley agradecía el último artículo de los terribles Weasley que ahora trabajaban con los 2 merodeadores que quedaban más Severus Snape, una bomba paralizadora.
Similar a los teasers muggles, esta bomba de arcilla estallaba contra el objetivo y daba una descarga eléctrica tal que su objetivo caía desmayado. No servían los hechizos enervantes porque lo que quedaba freído era el cerebro y el cuerpo tardaba tiempo en recuperarse de una descarga eléctrica. Ni siquiera los magos podían contra el poder de la electricidad en sus cuerpos. Y lo mejor de todo ¡Ni siquiera eran pociones o magia! La bomba de arcilla tenía dentro elementos químicos que al estallar se combinaban y creaban la descarga.
Los aurores que vieron lo que lanzaba Kingsley contra el grupo de mortífagos, estaban atraídos y asustados por igual tanto por el auror como por los artículos. Tonks, que estaba peleando a su lado, era otra combatiente que ahora temían y deseaban. Gracias al entrenamiento de Umbra, los hechizos de Tonks eran bastante destructivos y estaba abriendo brechas entre los mortífagos que estaba tratando activamente de huir de la metamorfomaga.
Arthur Weasley, un hombre que todos creían era tranquilo y nada belicoso, estaba reduciendo a varios mortífagos como si fuera un animal salvaje mientras su esposa que entro al ministerio "a dejarle el almuerzo a su maridito", había logrado desmayar a una veintena de mortífagos ella sola, dando una imagen tan aterradora como si la mismísima Bellatrix hubiera estado su lugar. No había dudas de por qué aquel matrimonio se había unido en primer lugar y sus hijos eran poderosos, ambos eran extraordinarios duelistas.
Algunos mortífagos de Umbra que estaban dentro de las filas de los leales a Voldemort, iban desapareciendo a sus compañeros y se movían constantemente, ayudando a disminuir los números y poniendo todo a favor de sus compañeros de Umbra.
Alastor hizo en el ministerio el papel que estaba haciendo Mundungus en Hogwarts y mientras los Weasley, Kingsley y Tonks se encargaban de la vanguardia, él se estaba encargando de los pocos que habían logrado huir y estaban tratando de escapar. Fue muy gracioso para el auror retirado el observar desde aquella cornisa como los mortífagos en fuga se dieron cuenta de que había barreras anti-desaparición y fue aún más gracioso cuando dichos mortífagos vieron que el flu también estaba cerrado a todos.
Alastor Moody descendió ante los mortífagos como una especie de ser oscuro (que a Alastor le recordaba ese comic muggle de Batman) y simplemente dejó que los movimientos de toda una vida y unos cuantos nuevos aprendidos, surgieran de su interior. Cuando Alastor acabó, estaba seguro de que todos estos mortífagos tendrían un fuerte trauma con él, los ojos de vidrio y las patas de palo.
La batalla acabó cuando recibieron la señal del final de Voldemort y varios mortífagos cayeron al suelo en agonía mientras sentían el fin de su maestro. Los mortífagos de Umbra ya tenían bloqueada esa señal en sus marcas, así que era fácil ahora identificar a los compañeros de gremio de los que debían atar.
Alastor abrió la red flu y les indicó el camino a sus compañeros oscuros antes de que los aurores liderados por Kingsley llegaran ahí. Sabían que aún no era momento de revelar sus rostros y debían mantener un perfil bajo hasta que Umbra pusiera a sus políticos en línea para todos los puestos vacantes que habría en el Wizengamot.
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Seeds
FanfictionTom estaba esperando a alguien en la estación King Cross luego de terminar el quinto año y de repente se encuentra con una escena muy familiar, excepto que no es ni la ciudad que el creía, ni el año que el creía y el chico que esta frente a él sabe...