Seeds

11.- La familia Black

Las vacaciones de invierno llegaron y para disgusto de Dumbledore, Draco anunció durante el desayuno antes de irse a los carruajes, que Orpheus lo había invitado a la mansión Black y que Draco había aceptado, sobre todo para "rehacer lazos familiares" ahora que había perdido a su propia familia. Harry ofreció hacer un "enlace familiar" para anexar a Draco a la familia Black.

Eso significaba que Grimmauld Place sería cerrada a solo la familia Black, y eso incluía únicamente a aquellos que estaban relacionados por sangre o matrimonio a los Black. Pero, como "premio de consolación" le ofreció a Dumbledore una casa en Glendalough, Irlanda. Bastante bien "fortificada" contra intrusos (excepto todo Umbra, por supuesto, pero no le iban a decir esto al director). Dumbledore aceptó, viendo que era lo más que iba a conseguir... por el momento.

Un rato después de que los carruajes partieron, Dumbledore pensó en que quizás era algo bueno que Draco pasara las fiestas al lado de la familia que había dejado cuando se concentró en los Malfoy. Orpheus tendría a Draco sin intermediarios y quizás con el apoyo de Harry, Draco se sentiría más seguro de apoyar a la Orden y la lucha contra Voldemort. Quizás era una buena idea después de todo.

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—Juro que ese vejete es asqueroso—Dijo Draco ya en la Mansión Black apenas habían llegado.

Como en el expreso hubo una guardia de aurores, dado el estatus de "huérfano con dinero" de Draco y el hecho de que había tres miembros de la casi extinta familia Black (dos de ellos descendientes "directos" del último portador del apellido), la seguridad era primordial para ellos.

Tonks y su madre estaban esperando en el andén para Aparecer a todos en la Mansión Black, luego de que Harry le dijo a Dora lo que planeaban hacer con Draco (la versión "oficial", ya que Harry planeaba llevar a Dora y sus padres a Umbra luego de la ceremonia de enlace familiar de Draco) vía lechuza y ella pensó que era una idea genial, ya que su madre siempre había extrañado ser parte de la vida de su sobrino.

Dado que Kreacher y Dobby, que se trajo a la "ebria" Winky, trabajaban para los amitos Black, Dora y su madre se fueron, dejando a los cuatro adolescentes a solas para que "estrecharán sus vínculos" y ahora, con la casa a solas y todas las redes cerradas, excepto a la familia de sangre o matrimonio, dejando la fecha de la ceremonia para dentro de dos días.

La fecha fue escogida con días de antelación, planeando al detalle que se filtrara "cierta" información hacía la familia a través del enlace familiar. Este enlace les daría a los familiares de los Black, el conocimiento de la vida "resumida" de su nuevo miembro y de paso, rastrearía a todo mago y bruja que tuviera suficiente sangre Black, y eso incluía a Bellatrix, ligándolos a una lealtad mágica hacia sus miembros.

La gran ventaja de este enlace, es que castigaba severamente a todo aquel miembro de la familia que atentara contra otro miembro de la misma, de forma que si Bellatrix intentaba deshacerse de Dora o Andrómeda o Ted, sería castigada por la magia familiar.

Severus encontró este ritual en particular luego de la "adopción" de Thomas por parte de Sirius y se lo comunicó a Harry, quién pensó que era genial. Así que tenían esos dos días para poner la mansión en orden para el rito.

Mientras tanto, Draco y los demás descansaban de tener sus escudos de oclumancia arriba todo el tiempo. Dumbledore intento entrar en la mente de Draco y se encontró con una cortina de hierra tan gruesa como una bóveda de banco muggle y múltiples combinaciones. Evidentemente, esto frustro al anciano mago y siguió intentando meterse dentro de la mente del adolescente. Esto frustro y enojo a Draco, pero con la vigilancia en el tren, si hubieran echado una barrera de silencio, habría alertado a los aurores.