Mike
10:00 de la mañana.
En toda la noche no he podido pegar ojo. Esta situación es inquietante, terrible, horrorosa... El teléfono suena.
Llamada entrante de James Marshal
-¿Si?- pregunto.
-Mike- responde con voz temblorosa.
-Dime.
-Elizabeth ha tenido un accidente- me quede paralizado, estaba en completo estado de shock. No podía estar pasando, no podía estar pasando otra vez.
-James, ¿donde esta?- dije con un hilo de voz.
-En el hospital Sant Mary's- el mismo hospital cuatro años y un día más tarde. Empeze a respirar como si hubiese corrido una maratón de más de un millón de kilometros.
-Necesito que vengas.
Llamada finalizada.
Tan rápido como un rayo en días de tormenta me cambie y conduje la moto hacia el hospital. Sin pensar en nada más que en ella. Todos los demás pensamientos se quedaron en el fondo de mi cabeza.
Ella y el accidente de mi madre. Mi madre, Katherine y Elizabeth. No quería asistir a otro funeral. La quería a ella, viva, feliz, conmigo... Se había convertido en algo sumamente importante en mi vida sin yo darme cuenta.
Entré en el hospital y comencé a correr a las urgencias donde se encontraba Elizabeth. Choqué con una enfermera. Llegué y comencé a preguntar a todas las enfermeras y médicos que había en el pasillo.
-Mike, estamos aquí- susurró Madison detrás de mi medio sollozando. Me gire y vi como comenzaba a llorar. Ambos nos abrazamos.
-No debí dejar que se fuera, soy estupido, por mi culpa ha sucedido esto- digo casi comenzando a llorar.
Nos sentamos en la sala de espera durante horas, jodidas y largas horas en un jodido lugar que se alimenta de vidas.
Las enfermeras ya estaban cansadas de mi después de todas las veces que pregunte por ella.
-Familiares de Elizabeth Marshal- dijo una mujer de unos 43 años, la médica.
Como alma que lleva el demonio me levante hacia esta.-Puede...
-Tu no eres familiar- me interrumpió James.
-James, quiero verla.
-Ni siquiera deberías estar aquí, ¡todo esto es por tu culpa!- gritó enfadado.
-Señoritos no discutan aquí- advierte la médica.
-Perdone, es que me pone de los nervios.
-Vayamos con la señorita Elizabeth- mueve los papeles- al parecer el accidente fue durante la noche de ayer. Tenemos un testigo que dijo que la señorita conducía a más de la velocidad permitida y otro coche perdió el control y chocó contra ella- James giro la cabeza y yo recordé que el accidente era parecido al que mi madre había sufrido hace 4 años, en su caso fue un borracho que chocó contra ella.
-¿Como esta ella?- pregunte en voz baja.
-El choque fue fuerte, el coche salió propulsado dando vueltas campana. El golpe que se dio en la cabeza provocó un traumatismo craneal y varias heridas no demasiado profundas. El coma es un poco peligroso pero el estado de gravedad es casi mínimo- Coma.Coma.Coma. La palabra retumbaba dentro de mi cabeza como un fuerte dolor.
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Enamorada de ti
RomantikElizabeth Marshall y Mike Miller enamorados desde que se vieron vivirán una historia llena de emoción, risas, amor... Un cachito de la novela para que puedan leer al ver la descripción (capítulo 7): Llegamos me dirijo a la puerta, el todavía me obs...