Cap 29 Plagas

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Heartforde siempre se ha caracterizado por ser un pueblo tranquilo ajeno a los caóticos seres vivientes que se esparcen por toda la isla, un lugar donde monstruos y habitantes comunes y corrientes conviven a diario.

Lamentablemente esta tranquilidad se a estado mermando en tan solo veinticuatro horas, una clase de sueño colectivo afectó a todos sus habitantes, posterior de eso un grave caso de insomnio azotó la población, era el primer dia que ocurría, pocos se percataron que el vecino así como cada uno de ellos no pudo dormir bien.

Y si no fuera suficiente se comenzaron a reportar uno y otro caso de un monstruo que estaba invadiendo los domicilios ajenos, algo que incluso otros monstruos estaban reportando ya que este no se le podía ver bien y solo se veía su silueta durante un breve periodo bajo las camas, los más activos buscando al responsable era los mismos monstruos del lugar pues uno de ellos estaba dando una muy mala fama a los demás.

En otro de los extremos de la isla una de las más deshabitadas pero con mayor densidad de bosque pequeños temblores agitaban los árboles ante su lento y calmado paso, temblores que poco a poco se intensificaban.

Parecía que cada hecho estaba ajeno uno a otro pero cada uno de estos estaba dirigiéndose a la misma ubicación.

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Oscar y Erizo tenían algo de tiempo buscando esa pequeña criatura, era fácil seguir el rastro, lo malo es que era tan rápida y escurridiza que al momento de preguntar algunos señalaban una dirección y otros terminaban indicando otra.

No fue más que unos diez minutos de búsqueda más tarde que lograron reconocer a dos pequeños.

— es tan lindo — Lem mencionaba mientras abrazaba a esa bolita de pelos, que incluso ya tenía un sombrerito de papel.

Mientras Jim usaba un pedazo de hierba para llamar su atención — Deberíamos llevarlo a la cabaña —

— crees que tenga hambre — Lem comentó mientras seguía acariciando la oreja

En un momento la pelusa negra se espantó y salió corriendo a muy alta velocidad.

Oscar y Erizo no perdieron el tiempo y salieron corriendo tras la pequeña criatura dejando a Jim sorprendido y a Lem un poco desorientada.

— Rápido que no se escape— Erizo trataba de acelerar pero el aire le faltaba para mantener el ritmo.

Al poco se perdieron de vista dejando tras de sí solo un sombrerito de papel apachurrado.

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Varios minutos más tarde Max desde una colina cerca del territorio de los gigantes veía a lo lejos como dos grupos se dirigen al territorio de los yetis, aunque los más furiosos era el de Alexa quien estaba molesta seguida de Jim y Lem; por el otro lado Oscar y Erizo quienes trataban de alcanzar algo lejos de su vista.

Max tenía curiosidad asi que primero terminaba lo que había empezado.

— Así que tú podrías saber algo — Max por fin pudo sujetar con su mano lo que parecía ser un cable prácticamente traslúcido del grosor de su puño aunque grande relativamente esquivo — Perdon por esto — Max enterró sus caninos y comenzó a desgarrar.

Lo que fuese que Max mordió se retorció tan fuerte que lanzó a Max algunos metros, este no recibió daño solo que perdió de vista su objetivo.

Poco después un leve temblor empezó a sacudir la isla, fue leve solo un segundo pero lo suficiente para llamar la atención de todos el pequeño fenómeno tectónico.

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