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La mirada de la mujer estaba perdida amaba al tal Satoru Gojo por llamar a Geto y hacerlo salir de la casa como alma que se lleva el diablo.

Quedo con tres hombres desconocidos, no era lo peor dos de tres la ignoraban y otro la miraba como si fuera un caramelo, Ryomen la miraba de manera intensa.

-oye muñeca eso se va a quemar- sonrió el tatuado apoyando su cabeza en su hombro.

Era alto y muy fuerte ¿si se enamoraba…podrían estar juntos?, volteo su mirada a los ojos penetrantes del mas alto, quizás era guapo pero no mas que Geto o al menos no a sus ojos.

-¿te importa si me atraganto de  maldita comida quemada?- sentencio la mujer con desinterés apagando la llama de la cocina.

-hum…pensé que como vamos a protegerte podrías darnos de comer muñeca- gruño lamiendo su cuello- pero no tengo problemas con comerte a ti cariño.

La chica se crispo, y camino rápidamente con su plato de comida a su habitación, dejando a los tres hombres solos.

-deberías dejarla en paz Ryo no debes hablarle de esa manera a la muñeca del jefe – sentencio Choso mientras miraba su computadora.

-¿y? Si el jefe no la va a tratar como una reina ¿Qué me impide a mi hacerlo? – gruño Ryomen apunto de entrar a la habitación de la mujer de no ser por Yuji.

-lo siento Ryo, pero la señorita dijo que nadie podria entrar- sentencio Yuji mirando firme al tatuado y apretando su brazo con fuerza – por favor retírate y cumple con tu trabajo o me veré forzado a reducirte.

Ryomen sabia a lo que se refería Yuji, y sabia perfectamente que el no mezclaría trabajo y sexo por el momento.

Suspiro y se soltó caminando al sofá de la casa prendiendo la televisión aburrido, según Geto a las 7 la mocosa iniciaba un directo pero hoy lo dudaba.

Mañana Geto tendría tres trabajos disponibles aun se sentía confundido, ¿Qué tenia de especial la niña para que ellos volvieran?, terminar una guerra en 1 día lo dejo agotado y solo quería sacarse todo el estrés.

De todas maneras...no le molestaba esperar su turno, si la niña seguía de esa manera tan malcriada, Geto se aburriría o eso pensaba Ryomen.

La verdad sea dicha, Geto jamás dejaría ir a su linda Candy, y T/N quizás no podria dejar ir a Geto, solo por haberle dado un techo y confianza no importa lo que pase ella le pertenece a Geto y si el quiere prostituirla ella no se negaría.

 Se acercaban las 7 y por alguna razón se sentía nerviosa, Geto no llegaba, ¿acaso debía iniciar el live? ¿debería no hacer nada? 

Como si fuera poco Ryomen no habia hecho mas que tratar de entrar a la habitación y acosarla con gritos e insinuaci...

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Se acercaban las 7 y por alguna razón se sentía nerviosa, Geto no llegaba, ¿acaso debía iniciar el live? ¿debería no hacer nada?

Como si fuera poco Ryomen no habia hecho mas que tratar de entrar a la habitación y acosarla con gritos e insinuaciones.

No quería seguir con el en la misma casa, quería que Geto llegara pronto y le dijera que todo fue parte de su castigo por hablarle mal.

Pero también pensar en Geto tan enojado como antes la asustaba, sus labios dolían y si lo pensaba bien Ryomen solo lo hacia de broma…¿no?

Porque el era bueno y Geto estaba loco ¿verdad?

¿VERDAD? Quería arrancarse el cabello y llorar, no sabia que hacer y pensar que todo esto era el inicio no hacia mas que someterla a un estrés terrible.

Se estaba hiperventilando, necesitaba ayuda no sabia que pasaba.

Se estaba ahogando ¿Qué pasaba?, sentía sus pulmones doler, sentía que sus ojos lloraban camino como pudo a la puerta abriéndola con dificultad y susurrando un débil.

-ayuda…

Se sentía como un imbécil, le habia pegado a T/n, le habia dicho cosas horribles

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Se sentía como un imbécil, le habia pegado a T/n, le habia dicho cosas horribles.

Habia sido un completo imbécil.

-me pregunto si ella quiere verme...

Susurro mirando como Satoru pateaba la cara de un soplón, se sentía acabado nada podria sacarlo de ese estado tan deprimido.

O quizás si, la mujer que estaba en la casa sana y salva con sus tres mejores hombres ¿no?

El podria confiarles la vida a ellos 3 a si que no dudaba que T/n estaría bien, corrió a su teléfono cuando lo sintió vibrar, lastimosamente no era Candy era otro deudor pidiendo una cita, pero hoy debía cumplir su rol como matón y cobrar.

Eso lo divertía mucho, le gustaba mucho romper los dientes y escuchar las mentiras que tenían para el.

Caminar por las calles vacías le recordaba a cuando recién comenzó con esto y aun si no lo dejaba notar estaba aterrado.

Se sentía tan solo tenia dinero pero era miserable, miro a la mujer con lastima, estaba sola y su marido se fue corriendo a penas lo vio.

Miro toda la casa mientras la señora lloraba, revolvió cajones y abrió maletas.

-n-no tengo dinero...no me mate por favor- chillo llorosa aferrándose a sus piernas- LLEVATE A SU HIJO ESE HIJO DE PERRA ME AMARRO CON ESTE NIÑO

Detrás de ella habia un mocoso quizás de 4 años o 5 que sabría el de niños, miro a la mujer llorar a sus pies temblando por su vida y supo que quizás el mocoso no era muy amado en ese hogar.

Suspiro tomo al niño y lo dejo en la puerta de la casa, el era un matón no la caridad, con el bate en las manos soltó una carcajada y lo estampo en la mandíbula de la mujer.

Quizás se la rompió, quizás no, le daba igual pero no se detuvo golpeo sus brazos y también sus piernas.

-cuando hables...dile a ese hijo de perra que si no me paga en 3 días voy a colgarlo de las pelotas en un puente mientras aun esta vivo y me voy a divertir por horas viéndolo llorar.

Camino lleno de sangre y tomo al mocoso, jugo un poco con su cabello, y lo tomo desde la barriga para llevarlo bajo el brazo.

un niño...

¿Como se vería T/n embarazada?

¿Seria una linda mamá?

¿Que iba a hacer con este niño?

Un pequeño de ojos negros y cabello picudo.

Se sentía extraño cargar a un mocoso, además tenia nombre de mujer.

¿Que clase de burla era esa?

Camino con el niño bajo la axila llevando a un pequeño crio de 5 años que lloraba como si fueran a matarlo.

No lo llevaría a la empresa, y no planeaba dejarlo con T/n aun se sentía ofendido, se sentía mal por como lo trato.

Como si el fuera cualquier imbecil.

sexy porn star (Suguru Geto) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora