Formidable

Capitulo 3

Algo mejor que hacer

2 de la mañana, Paul y Cris seguían en el Balcón conversando, al parecer la estaban pasando bien.

-oye, ya no te pregunte, pero ¿Como conseguiste mi número?, no hemos hablado más que en la escuela y nunca me lo pediste.- Chris sonrió sutilmente y recargo su rostro en su mano esperando una respuesta.

-bueno, eso... ja ja, pues hice algo malo, en realidad me metí a la oficina del director para ver tus datos personales y- antes de que Paul pudiera terminar de hablar, Chris escupió el trago de vino y se sorprendió.

-¿Qué tú que? ¿Por que? ¿No pudiste solo preguntarmelo y ya?- el peliazul rio nervioso, se comenzaba a dar cuenta que Paul no era alguien que controlara sus inpulsos o como hablar con la gente, no era nuevo ya que así conoció a su amigo Frank, pero, en Paul era aún más grave, no tenía filtros y hacia cosas sin pensar mucho en las consecuencias, de cierta forma eso le agradaba ¿romper reglas? era algo que Chris amaba hacer.

- bueno, quería tu número en ese momento y tu no estabas, no había otra cosa que hacer- comenzó a reír mientras apagaba su cigarrillo tirandolo al suelo para proceder a pisarlo.

-eres alguien que resuelve rápido- termino su copa, tomo la botella y sirvió un poco mas de vino.
-¿Quieres?- le ofreció beber de la misma copa que él.

- Si, gracias - bebió de un solo trago el vino que había, para Paul el vino era como agua.

-wow, ve lento, la noche aun comienza- sonrió y bebió directo de la botella.
-si para ti las 2 de la mañana es el inicio de la noche, por mi esta bien...-

-dime ¿Por que las fiestas? ¿Así es como conoces chicas o por que hacen tantas en tan poco tiempo?- ambos seguían bebió de la botella aunque no era algo de que preocuparse si ayudaba a que dejaran de perder timidez y soltar más palabras.

- jajaja ¿Que?, no, claro que no, es por el dinero, me gusta el dinero y bueno, mi padre dice que no debo trabajar y enfocarme en mis estudios, pero para mi la escuela no es lo mío, créeme lo intento- suspiro y sonrió, era algo que no le decía a muchos, se avergonzaba un poco por ser un chico sin intereses en el mundo educativo, pero el era realista, si no podía con la escuela debería hacer algo al respecto desde ahora.

-oh, ya veo, ¿no te gusta la escuela entonces?-
- no es eso, aprender es algo que amo, pero la escuela no hace que me llame la atención, aprenderé por mi cuenta, supongo- jamás había dicho esto en voz alta, es algo que siempre piensa pero no le gusta decirlo, suena pretencioso y molesto, sentía como si quisiera justificar el no querer estudiar porque le aburría muchísimo.

Pasaron horas platicando en el balcón, como si ambos se conocieran de años atrás, terminaron de beber la botella de vino barato, la música aún se escuchaba, faltaban un par de horas para que el sol saliera, esa noche fue eterna para ambos, de una buena manera.
El tiempo pasaba más lento pero a ninguno de los dos le molestaba, era como si el universo les recompensará con unas horas más de noche.

- perdona que pregunte, no es que quiera que te vayas, pero ¿a tus padres no les molesta que estés fuera tanto tiempo o toda la noche?- a Paul le preocupaba un poco pues no quería ser la razón por la que castigaran a a Chris o algo así.
- no, en realidad creo que ni siquiera saben que estoy fuera de casa, o tal vez sí, no lo sé - rio torpemente mientras se recostaba en el suelo, al parecer el vino le hizo un poco de efecto, no estaba borracho completamente pero si un poco mareado.

-bueno, me alegra que no te preocupe- Paul se acostó en suelo junto a el, mirando el techo mientras la poca luz de la luna aún entraba por el balcón.

-¿oye, quieres más vino? Estoy seguro que Chivo compro unos cuantos mas- Paul se sentó apunto de irse, Chris lo sostuvo de la mano y lo detuvo.
- no, no te vayas, no necesito más vino, en realidad me tome más de la mitad de botella yo solo y no soy bueno reteniendo el alcohol, quiero seguir consciente otro rato mas- sonrió sutilmente y lo miro a los ojos.

- vale, pero ¿estas bien verdad?- se acerco un poco a Chris, sus ojos estaban cansados, mientras que los de Paul estaban rojos y entre cerrados.

Ambos se miraban en silencio, un silencio para nada incómodo, la música desaparecía, sus ojos brillaban, sus rostros de acercaban, no había nada que los detuviera...

- ¡Paul tienes que ver lo que hay abajo! Benit- oh... lo siento, debí tocar ¿cierto?-

Tal vez sí había algo que los detuviera, Jaime llegó gritando, al parecer pasaba algo en el piso de abajo, pero al entrar solo encontró a ambos jóvenes sospechosamente juntos.

- ¡ah! ¡Maldita sea Jaime! ¿Qué pasó? - Paul molesto, se levanto y ayudo a Chris a ponerse pie mientras le gritaba a su amigo.

- lo siento, no quise asustarlos, yo debo besar, digo bajar, mierda... debo irme. - Jaime cerró la puerta un poco avergonzado por la escena que vio, en realidad no hacian nada importante pero para el era nuevo ver a Paul interactuar con alguien de esa manera.