Capítulo 2

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¡Hola! Sigo con esta historia de Omegaverse.... a ver que les parece la continuación.... Bueno, adiós:

Mientras Charlie estaba en su oficina algo raro le estaba sucediendo. Sus manos empezaron a temblar. Algo hizo que sus pupilas se dilataran y sintiera que el ambiente subía la temperatura, como los grados eran de la temperatura del fuego. 

Notó como su respiración se entrecortaba. Su forma de súcubo golpeaba fuertemente la puerta para ser libre, ella quería salir a la luz y de esa manera... Charlie, asustada por sus pensamientos y su forma de pensar entró a su oficina y puso muchos muebles delante. ¿Que le sucedía?. 

Charlie empezó a tener a Alastor en mente. No había nada que la sacara de ese agujero. Recordaba sus preciosas palabras para referirse a ella, cuales eran "dulzura", "querida", "hermosa dama"... Todas esas palabras se clavaron en su mente y algo debajo suya empezó a estar humeda. ¿Qué estaba pasando?. 

Sintió como su forma de súcubo sentía tantas ansias por salir y encerrarse de nuevo, pero junto al atractivo venado que no salía del cerebro de la protagonista. 

En ese momento no podía pensar ni en Vaggie, ni en los consejos de Husk, ni en el correo que le dió Niffty. Algo dentro de Charlie tenía que salir, algo que sí o sí debía salir, una explosión de algo, no aguantaba más y se rindió. Soltó por primera vez sus feromonas. 

Todos estaban reunidos en el salón. Nadie notaba nada raro por ahora. Todos se preguntaban por que Charlie estaría ausente... pero siguieron con sus actividades. Estaban todos formando un grande círculo para hablar, como normalmente hacían en las terapias. Nada raro. 

Un olor empezó a bajar por las escaleras, poco a poco entrar en el salón, acercarse.... Nadie notó nada. Tres, dos, uno. Algo llegó a el olfato del alfa. Un sonido de un roto de un tejido hizo que el pecador que hablaba se callara, vió como Alastor clavaba las uñas en su sillón, rasgándolo. Luego se llevó las dos manos a la cara, tapándo su nariz y su boca, sin permitir que ese olor volviera a ser respirado. La poca "substancia" que fué respirada por el demonio de la radio hizo que sus pupilas se dilataran y su corazón empezara a latir algo rápido. ¿Una omega en celo? Esta era la primera vez que una mujer en celo tenía consecuencias en él. 

-No puede ser -dijo haciendo que todos se voltearan a verlo. Aún con las manos en la cara gritó- Poned cadenas y un candado muy fuerte en la puerta de la princesa ¡YA!- la omega en celo era la princesa, y él lo sabía. 

-¡Husk pon cadenas en mí habitación una vez que yo esté dentro!- gritó mientras se metía a su habitación a toda prisa. 

Husk y los demás residentes del hotel, al no ser afectados por el encantador olor, que ellos no notaron, cogieron cadenas y cerraron fuertemente la habitación de la princesa, y al mismo tiempo la del alfa. 

-¿Alguien nos puede explicar por que Charlie y Alastor están encerrados con cadenas en sus habitaciones?- dijo Vaggie junto a los demás redimidores. 

-Vaggie, tu novia está en celo por primera vez, y eso ha hecho que Alastor también lo tenga, el al ser un alfa, y ella una omega, se atraen mutuamente, y tenemos que evitar que pase algo indecente- dijo Husk. 

Ninguno de ellos se esperaba tal acontecimiento. 

(...)

Charlie se encontraba en su habitación, al borde de la locura. ¿Qué le estaba pasando? Ella era completamente ajena al tema. Espera, un momento... esto no podía ser lo que ella empezó a creer. El... ¿celo? Por primera vez. Esa era la explicación de no poder quitarse de la cabeza al venado. 

Él la enloquecía, y veciversa, ya que Alastor en su habitación enloquecía al oler tal aroma. ¿Quién pensaría que un olor tan dulce como el suyo sería adictivo? Él sabía lo que pasaba. Se había informado sobre el tema, se puso boca abajo y se tapo la cara con sábanas, como si puediera filtrar el oxígeno. 

De nada sirvió. El aire quemaba, sus mejillas ardían y sentía que el calor era demasiado, pero no tenía quemaduras en la piel. 

La princesa, en su habitación, no resistió más, su súcubo salió a la luz, haciendo que sus cuernos y sus ojos se convirtieran rojos como el rubí. Ella aporreó la puerta hasta que logró que se rompiera. Unas cadenas habían. Con un simple golpe con sus afiladas uñas consiguió romperlas al segundo.

Se encaminó rápidamente a la habitación de este, mientras, en el otro lado de la habitación el olor se hizo más presente lo que hizo que Alastor no resistiera, soltando sus feromonas de alfa. La princesa jadeó al oler tal aroma, pero justo cuando rompió la puerta y los dos se avalanzaron al contrario, algo los pichó. 

Lilith había pichado a Charlie con una aguja en el cuello, cosa que hizo que ella se desmayara, el mismo caso con Lucifer quien inyectó en el demonio de la radio la misma substancia, haciendo que tuvira el mismo resultado en el venado. 

-Parece que mi carta le llegó tarde, querido -dijo Lilith mientras levantaba a su hija del suelo para meterle los supresores en la boca. 

-Puede que no llegara tarde, pero que el celo se le manifestara antes de leerla, mi reina- dijo Lucifer agarrando a Alastor del brazo con brusquedad para casi atragantarlo con los supresores. 

-Lucifer, amor, ten cuidado- dijo Lilith. 

-Este tipo casi le quita la virginidad a mi manzanita -dijo él devastado. 

-Lucifer por favor ya es mayorcita- dijo Lilith.

-Y yo que me alegraba de que fuera lesbiana para que no se la quitaran- dijo Lucifer "llorando". 

-Tu hija es bisexual, no lesbiana... y seguramente el tener el celo hará que corte con su novia, cosa que me alegra algo, ya que no tendremos que discutir con ella, por que el infierno necesite un rey, no una reina consorte... 

-¿Estas suponiendo que este tipo se haga rey? -dijo Lucifer impactado. 

-¿Qué otro alfa aparte de tí no es un tipo asqueroso?- dijo la reina con toda la razón. 

-El hijo de los Von Eldrich... no da igu- dijo siendo cortado por la reina. 

-¿El que solo quería el trono? -dijo ella. 

-¿Y si Alastor solo quiere el trono?- dijo Lucifer.

-No lo creo... se acabará enamorando de nuestra hija. Mira -dijo señalando algo en su meñique. 

-No -dijo Lucifer impactado

-Si. -dijo la reina. 


Todo lo extraño- Omegaverse -CharlastorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora