Un viaje que lo arregla todo /Sterek

03

Stiles.

Sujetando mi mochila con fuerza subí al autobús escolar, para sentarme en una esquina libre.

—Woah, la carcacha del presente es este mismo camión. —susurré bajo, bastante impresionado mirando el nuevo y reluciente transporte. Saqué una libreta de mi mochila junto con una pluma para empezar a trazar mi plan.

Tengo cuatro fines de este viaje.

Número 1. Evitar que Paige reciba la mordida.

Número 2. Evitar que Kate Argent se acerque a Derek.

Número 3. Evitar que los Argent acaben con la mansión Hale.

Número 4. Si tengo suerte, con esto evitaré que mi pan tostado caiga en el lado con mantequilla y jalea.

Simple.

Con mi pluma rodeo las ideas y dibujo cosas para inspirarme, terminar por dibujar a mi hombre lobo.

—¿Me puedo sentar aquí? —una voz suave me sacó de mi mundo. Levanté la mirada y le sonreí a la chica.

—Claro, siéntate. —hice a un lado mi mochila para dejarla sentarse.

—Qué bonito dibujas. —señaló mi libreta con el dibujo de sourwolf, me exalté y cerré mi cuaderno para que no viera demás en mi hoja. —No te avergüences, son muy lindos tus dibujos. —me sonrió, yo le sonreí de vuelta.

No me avergüenzo, pero... ¡Casi leía mis planes! Si fuera así y la chica conoce a Paige o a Sourwolf estoy acabado.

—Soy Paige Krasikeva. —me tiende su mano, me siento desfallecer, pero al mismo tiempo me emociono, ¡Qué suerte! —Pero sólo dime Paige, nadie puede pronunciar bien mi apellido ya que es ruso.

—¡Genial! Yo soy Stiles Stil- Deaton, que diga. —me asusto al casi delatarme. —Soy Stiles Deaton, y realmente no me llamo Stiles pero nadie puede pronunciar bien mi nombre porque es Polaco. —hablo emocionado. Al fin alguien con el mismo problema de identidad que yo.

—Estamos juntos en esto de los nombres impronunciables, Stiles, seamos amigos. —me dice y yo asiento sonriente.

Y mis primeras clases se basan en estar con mi nueva amiga Paige, y mucho chismecito.

[...]

Omnisciente.

—Y entonces yo le pegué con mi bate, pero no es mi culpa, ¿quién cojones asusta a alguien en el baño? —le relató a Paige mientras devoro mi hamburguesa.

Ambos habían ido a la cafetería a saciar su hambre

La chica rió mientras comía una de sus papas. —Realmente te asustaste, Stiles. Pero no era para que le dieras un batazo a tu amigo. —habló tranquila y sonriente.

—Aquí estabas. —una tercera voz llamó la atención del nuevo par de amigos.

—Hola, Derek. —saludó Paige con un beso en la mejilla al moreno, el cual sonrió, pero sintió algo diferente, no lo mismo de antes. —Él es mi amigo, se llama Stiles Deaton, Stiles, él es mi novio, Derek Hale—el mencionado saludó con su mano y una sonrisa pequeña.

—Ya nos conocimos ayer en el bosque, estaba perdido y lo llevé con su tío, el veterinario. —relató mientras dejaba un beso en el dorso de la mano de su actual novia mientras se perdía en los ojos whiskey del castaño.

Stiles asintió efusivo. —Fue muy amable, este fortachón me llevó con mi tío Alan. —aduló sonriente.

Paige iba a hablar cuando un timbre en su celular la interrumpió. —Me tengo que ir, tengo que salir con mis padres. Nos vemos en la noche, Derek. Adiós Stiles. —dijo y besó a Derek, para salir de la cafetería y dejar a ambos chicos.

—Derek, contigo quería hablar. —dijo el castaño, revisando la hora y fecha en su celular.

Hoy era el día en que Paige iba a morir.

El Hale lo miró con el entrecejo fruncido. —Relaja esas cejas, es algo que realmente quieres saber, vamos a la biblioteca porque las paredes nos escuchan. —dijo en un tono misterioso para salir de la cafetería junto con el contrario.

[...]

—Para ser nuevo conoces muy bien la escuela. —acusó Derek mirándolo sospechoso. El castaño se quitó la pulsera que había tomado prestada de la veterinaria dejando al oído del contrario sus latidos del corazón, y a su olfato el dulzón olor del de lunares.

El Stilinski ignoró sus palabras disimulando con una enciclopedia abierta tapando su cara. —Sé todo, Derek. —habló misterioso. —Sé los planes que tienes está noche con Paige.

—¿A qué te refieres con todo? —preguntó mirándolo confundido.

—Sé que quieres convertir a Paige en una mujer lobo. —bajó el libro lo suficiente para que sólo mostrar sus bonitos ojos color miel. —Y nada bueno saldrá de eso.

—¿Cómo demonios sabes tú eso? —preguntó mirándolo interrogante, sus ojos brillando color ámbar. Stiles al verlos se le lleno el pecho de tristeza, pensando en lo que tuvo que pasar su novio.

—Sólo lo sé. Y quiero advertirte que muchos humanos no resisten la mordida. —le habló serio. Derek olisqueó el aire sintiendo las lastimeras emociones del chico. —Paige no la va a resistir, agonizará y tú la matarás para que no sufra. —terminó su relato.

El Hale se congeló ante lo que le acababan de decir. Nadie aparte de su tío y de Ennis, el alfa que le iba a ayudar, sabían lo de esta noche. ¿Quién realmente era él?

—Pero si no me crees... —pensó profundo Stiles. —Te ruego que lo hagas, no te puedo probar que lo que digo es cierto, pero te puedo jurar por lo más sagrado que tengo. —“Que eres tú” pensó Stiles. —Que te estoy hablando con la verdad, por el meñique. —extendió su dedo meñique derecho, mirándolo atentamente a sus ojos, verdes y café se encontraron.

El lobo interior de Derek se removía ansioso, y esto aumentó más cuando el moreno unió su dedo meñique con él. —No sé quién seas, qué quieres y qué es lo que planeas. —habló bajo y profundo el lobo, aún con los dedos entrelazados, ya que ese toque se sentía tan correcto. —Pero te creeré.

Stiles sonrió en grande, haciendo sonrojar al Derek adolescente al ver tan bonita sonrisa.