Moonlight || Megumi Fushiguro

Epílogo

ADV: El siguiente capítulo contiene spoilers de Sunrise. Procura haber leído al menos hasta el capítulo dieciocho (incluido) para mayor contexto.

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09.09.2018

Desde que Kugisaki e Itadori se integraron a la escuela, Akemi busca instancias para que pasemos tiempo todos juntos. Me alegra que finalmente haya podido cumplir su deseo de tener más compañeros de clase después de lo solitaria que fue la educación particular que recibió.

En estos dos días del viaje a Shimoda organizado por Gojo-sensei, hemos podido compartir con los chicos de segundo también.

Hacemos una fogata e Itadori quiere que contemos historias de terror, sin embargo el único que conoce algunas es él. Aún así, charlar de otras cosas que no están relacionadas con la hechicería es agradable. Además, me gusta escuchar la risa de Akemi y verla tan contenta después del incidente en el evento de intercambio.

Maki-senpai y Kugisaki se van a dormir.  Está haciendo más frío y ya es tarde.

—Llevaré esto a la cocina —dice Akemi, cuando empezamos a apagar la fogata.

—Te ayudo con eso, Hinode.

Itadori va con ella cargando las demás cosas, y me quedo ayudando a Inumaki-senpai y Panda-senpai.

—¿Y esto? —pregunto tomando una bolsa que quedó en el área.

—Ah. Es de la cocina, no lo usamos.

Camino hacia el interior, y por el ventanal noto que Akemi e Itadori continúan en la cocina.

—Yo me di cuenta hace un tiempo sobre tus sentimientos, y muchas veces no me doy por enterado de nada —escucho decir a Yuji antes de cruzar el umbral.

—¿Tan obvia he sido? —pregunta Akemi con esa risilla que suelta cuando está nerviosa.

—Estoy seguro que es recíproco.

Me toma unos segundos procesar esas palabras y siento un nudo en el estómago que asciende hasta mi garganta. Dejo la bolsa en el mesón sin saber bien dónde meterme. Mi mirada viaja de uno a otro mientras intento asimilar lo que acabo de escuchar.

Sé que no estoy en derecho de decir nada, así que bajo la mirada y me retiro en silencio.

¿Cómo no me di cuenta de que a Akemi le gustaba Itadori?

Por supuesto, es el tipo de persona que le gustaría. Es agradable y risueño como Ino. Es todo lo contrario a mí.

Las palabras de Tsumiki vienen a mi mente. Cualquiera podría enamorarse fácilmente de Akemi, y si ella es feliz, estaré bien.

Dolerá, sí. Dolerá verla cada día enamorarse más y más de otro. Pero si Itadori dijo que es recíproco, no puedo intervenir.

Cuando, hace un par de días, Itadori me preguntó si Akemi y yo estábamos saliendo, jamás imaginé que lo preguntaba con estos intereses.

Salgo hacia la ventana lateral, y cuando estoy cerrando, ella lo detiene. No tengo fuerzas para mirarla, así que fijo mi vista hacia la playa.

—Megumi... Sobre lo de antes... ¿Tú oíste algo?

Asiento. Pero no quiero hablar de esto. Tal vez es egoísta, pero no estoy preparado para que me hable felizmente sobre que le gusta alguien más.

—¿Y qué piensas?

Tengo que tomarme unos segundos porque siento que no me sale la voz.

¿Qué pienso?

Pienso que se me está acabando el mundo en este momento. Que lo inimaginable está sucediendo y que soy un idiota.