Tay
Abrí la puerta y me encontré con mi madre de brazos cruzados.
-No estábamos haciendo nada mamá, por Dios.
-Si claro dile eso a tu cabello Taylor.
Por inercia lleve mis manos a mi cabello para acomodarlo evitando la mirada de mi madre.
-Solo hablamos María, te lo juro.
-Los quiero a los dos en la sala. Ya
-Si señora- contestamos los dos al unísono y Nick volteo a verme con una sonrisa de complicidad.
-Déjatelos, te ves adorable.
-De verdad será mejor que salgamos de aquí lo antes posible.
Cuando llegamos donde estaban los demás ya sabía la que se me venía. Era claro que todos iban a tener preguntas, empezando por mi padre.
-Chicos. - no saludo- Taylor será que podemos hablar un momento.
-Pa, creo que ahora no es el momento.
-Si, si, si tienes razón. Mejor sigamos disfrutando. – se alejó un poco encorvado.
-Me siento fatal por él.
- ¿Por qué?
-Porque dure demasiado tiempo en decírselo. – Nick tomo mi mano y le dio un suave apretón.
-Estoy seguro que sabrá entender tu tiempo. - le devolví una sonrisa que esperaba que le hiciera entender que estaba agradecido.
- ¿Quieres beber algo? - le pregunte con la intención de despejar la leve tensión que papá había dejado en el aire.
-Lo que sea menos vino. No me gusta. - no pude evitar la sonrisa que se me formo.
-Es curioso, me la he pasado bebiéndolo y hace unos instantes no vi que pusieras objeciones. – le sonreí maliciosamente alzándole las cejas y el rodo los ojos.
-No es lo mismo.
¿Y por qué no es lo mismo?
-No sabe igual... ya sabes... en tu boca sabe diferente. – solté una risa y negué con la cabeza.
-Ok, lo tengo, no te sonrojes, entonces dime que tomas.
- ¿Champagne? - voltee los ojos con ironía-
-Claro cómo no, ya vuelvo, no te vayas a ir por favor.
Me fui a la cocina para buscar una copa nueva y el champagne que mi madre había metido en el refrigerador y fue justo ahí donde la encontré.
-Yo de verdad espero Taylor, que no hayan hecho nada indebido.
-Mamá, solo nos besamos y si te deja más tranquila te puedo dar detalles.
- ¿De verdad? ¿Eso quiere decir que Nick si siente algo por ti? - asentí sonriendo de felicidad.
-Eso parece, el plan funcionó.
-Cielo eso es genial- se acercó para darme un fuerte abrazo- sabía que Nick actuaba raro al no ir más a la cafetería, si es su lugar favorito, el mismo me lo dijo.
-Gracias, mamá por apoyarme desde el primer momento.
-Para eso soy tu madre, y como soy tu madre es mi deber advertirte que esta vez, por favor no metas las patas y hazlo mi yerno.
-Lo prometo. Ahora, si me disculpas ya lo deje solo mucho tiempo.
Cuando regresé a la sala lo encontré platicando con Maddy
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The Lion and the Wolf
RomanceNicholas y Taylor nunca se llevaron bien, en todos sus años de estudio. Pero ahora que la vida adulta les cae encima, se deben obligar a mudar y dejar de ser los niños que fueron en la universidad, para enfrentarse al mundo real. Que pasara cuando...