Harry tenía su cabeza dando vueltas.
Sentía las manos de Louis sobre su cintura a pesar de que ya habían pasado varias horas, sentía sus mejillas sonrojadas, sus labios rotos de tanto morderse y su aroma ser un bálsamo dulce que no se me iba a dispersar.
Sus manos seguían temblando de nervios, su estómago revolverse y sus ojos derramar lágrimas espesas hasta empapar sus mejillas. No podía creer que el regalo que sus manos todavía abrazaba contra su pecho se lo había hecho Louis.
La pequeña bolsita de galletas seguía intacta, con todo y su listón mal decorado y la notita que escribió con su puño y letra, decorandola con unos sellitos de florecitas que quizás robo de algún lugar para hacerlo ver más bonito.
Dios.
¿Como podia dejar de ser un tonto y pasar a ser el dueño de sus pensamientos en un abrir y cerrar de ojos?, llevaba días pensando que estar a su lado no era tan mala idea, que compartir las clases eran menos tediosas y que sus bromas para hacerlo reír servían para olvidar lo que sucedió en sus primeros meses ahí.
Y después lo que pasó en su celo.
¿Cómo es que terminó llamando a Louis?, ¿cómo es que Louis parecía haber disfrutado de esa llamada y sin embargo no lo utilizaría como pretexto para chantajearlo?
¿Louis nunca tiró sus galletas?
¿Louis nunca intentó lastimarlo?
Eran muchas preguntas que pasaban por su cabeza en estos momentos que su cabeza no quería prestar atención a nada que lo rodeaba. Había dejado de escuchar al profesor desde que miro a su cuaderno y sus dedos trazaron con delicadeza el nombre de Louis en las líneas. Su mente se había puesto en pausa cuando el aroma de las galletas era el aroma del alfa y que su lobito estuviera agitando su cola y moviendo sus orejas.
Necesitaba verlo.
Necesitaba preguntarle muchas cosas.
¿A Louis le gustaba?, se preguntaba mirando el temblor de sus manos cuando su mente estaba más ocupada en mostrarle una respuesta correcta.
Louis, le gustaba.
Siempre fue esa gran ilusión donde deseaba muchas cosas a su lado. Sabía que había llegado ese momento donde negarse a algo que su pecho le gritaba que estaba en lo correcto ya no era necesario ignorar. Ya no iba a poder seguir ignorando esto que su mente bloqueaba y su corazón gritaba.
Cuando el timbre resonó en los altavoces, tomó sus cosas y fue el primero en salir del salón. Recuerda que Louis le dijo que estaría en la cafetería así que no dudo ni un solo segundo en caminar hasta allá, mientras caminaba observó que Zayn estaba caminando hacia el mismo lugar, así que solo apresuró sus pasos para alcanzarlo.
─ ¡Zee! ─ gritó Harry, tocando su hombro cuando lo alcanzó y el omega de ojos miel se giró a verlo con una amplia y bonita sonrisa.
─ Hola Harry ─ respondió el omega, esperando y dejando que tomara un poco de aire.
─ ¿Sabes si Louis está en la cafetería?
Zayn asintió.
─ ¡Si!, de hecho iba justo para allá, ¿vamos?
Harry asintió.
─ ¿Cómo has estado?, estos días casi no te he visto en la escuela ─ preguntó él, en tanto el omega ojimiel lo tomaba del brazo para caminar juntos.
─ He estado ocupado, de hecho creo que este es mi último semestre. El restaurante de mi familia no le ha ido muy bien en estas fechas, hemos decaído mucho en venta y pagarme la universidad genera gastos extras que pueden invertirse en otras cosas, así que tomé la decisión de salirme de estudiar y ayudar a mi familia, comenzaré a trabajar en estas vacaciones de verano y ya no regresar.
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we should be together
Novela JuvenilLouis va a reprobar una materia para ir a tutorías con el chico que le gusta aunque eso lo lleve a tener que tomar medidas extremas para que él le haga caso, ya que su reputación no es la mejor de todas y ese Omega lo traerá como desea.