𝙄𝙈𝙋𝙀𝙉𝙎𝘼𝘽𝙇𝙀 : 𝙁𝙍𝙀𝘿𝘿𝙔𝙏𝘼𝘽𝙊.

#4

Vaya mañana para empezar el día, levantarme para chocar en una mery no es lo ideal, todo por culpa del puto Isidoro con su mensaje reenviado a todas sus mujeres que me terminó llegando a mi también, claramente no me echare la culpa por haberlo leído mientras conducía. Ahora estoy aquí comiendo suelo en la carretera, es lamentable mi situación ¿Nadie me va a ayudar? Por más que intento encender la radio no me va, el olor de la sangre que sale de mi nariz me da un poquito de nauseas, y vaya golpe en la cadera me llevo hoy. Aproximadamente unos 5 minutos que estoy en el piso arrastrándome como un gusano cuando un compañero viene y me lleva al hospital, un héroe para mí. Por suerte mi cadera de acero no sufre mucho daño, solo un poco adolorido.

Me subo a la mery que mi compañero amablemente me trajo y me dirijo a una tienda de ropa, que ahora mi outfit está echo un completo desastre, la ropa ensuciada y con algo de sangre en la camisa, definitivamente no puedo ir así por las calles, que hoy estoy más coqueto. Y quién sabe, tal vez Freddy me vea y me agarré nuevamente como ayer, ojalá.

Ya con mi nuevo outfit, una gorra y chaleco policial nuevamente, una camisa rosa claro, un pantalón negro y unos tenis rosa al igual que mi camisa, sin duda me queda el rosa. Al llegar a comisaría insulto por radio a Gordon y Isidoro, luego se reclamarle al putero de Isidoro sobre su mensaje comienzo a patrullar con el, hoy a diferencia de ayer es día de éxitos. Y mientras estamos atendiendo un robo a tienda, Freddy nos apoya nuevamente y puedo hablar con el aunque sea un poco, eso siempre me viene bien. Cuando logramos con éxito el robo, Freddy nos encarga a los detenidos... Pero algo no está bien.

Un vacio en mi estómago y una sensación extraña en mi nuca, como si hubiera algo raro, podria ver por el retrovisor del patrulla como un coche por décima vez pasaba cerca nuestro, una sensación de nervios recorre mi cuerpo, pero no la que Freddy me provoca, definitivamente esto no me hagas está gustando, sobretodo porque nuevamente veo el coche detrás de nosotros. Aprieto el volante mientras mi respiración se acelera levemente, mi mente comienza a hacer varios escenarios, todos acabando muy mal, en un semáforo puedo ver por el retrovisor como el coche desconocido se acerca más se lo que alguien normal haría, y sin aguantar más la situación aceleró aunque esté en rojo, puedo escuchar varios autos pitar y a Isidoro hablarme o gritarme, al igual que los atracadores, pero lo ignoro todo, no es propiedad cuando ese maldito coche también se saltó el rojo para seguirnos.

Sin dudarlo me dirijo a comisaría y estacionó sin cuidado, con fuerza abro la puerta y voy al otro para sacar a Isidoro del auto, lo logro sin mucho esfuerzo mientras mi respiración sigue demasiada acelerada ahora, todos los sonidos a mi alrededor se sienten lejanos, se que Isidoro está informando algo a Freddy por radio, pero no me importa, la cabeza me duele, un pitido largo es lo único que escucho ahora, las náuseas están tan presentes que no me sorprendería vomitar aquí frente a todos, se que hay más gente a mi alrededor aparte de Isidoro, lo puedo saber por las diferentes voces distantes que puedo oír. Solo quiero que me dejen tranquilo, solo quiero que todos se callen, solo quiero que la cabeza deje de dolerme, solo quiero a Horacio..

“¡Ese pobre cobarde nos abandono!”

Mi cuerpo entra en automático y lo único que recuerdo es que estoy vestuarios, y la sensación de la pastilla pasando por mi garganta, mi respiración se tranquiliza mientras me siento en el piso, por fin puedo sentir la sensación de respirar con tranquilidad. Al volver completamente en mi y mirar a mi alrededor puedo ver a Freddy frente a mi, tenerlo cerca me da una seguridad, desea que esté cerca mío, que no se aleja, que pueda acurrucarme entre sus brazos... ¿Porque me hace sentir así? Cuando su voz suena puedo sentir mucho más tranquilo y lo escucho atentamente.

—¿Que sucedió, Gustabiño? ¿Las pastillas?.

—N-no... Un coche nos estaba siguiendo y...

—¿Un coche? ¿Que clase de coche era?.

Después de describirle el coche deportivo que nos seguía Freddy pone a la malla en alerta sobre ese coche, luego sin preguntar me levanta del piso, pero no puedo evitar aferrarme un poco a sus brazos, me puedo mantener un momento ahí entre ellos, sentirme cálido. Al no ser rechazado no me aleje, quería sentirme más entre sus brazos pero la puerta de los vestuarios siendo abierta abruptamente me hace tensa el cuerpo, cuando Freddy y yo estamos en una situación así solo alguien nos interrumpe... El puto viejo.

—¿¡Que coño es esto!?

—Le ayude a levantarse del piso. Cálmate, neno.

—S-si.. es qu-

—¡Me importa una mierda qu-

—¡Un puto coche me estaba siguiendo!

Conway guarda silencio y su semblante de enojo cambia a uno serio, sin mencionar nada sobre como nos encontró me saca todos los datos sobre el coche y Freddy le confirma que el coche que me siguió fue reportado como robado, definitivamente cambiar de tema funcionó, que vergüenza me hace pasar este viejo. Al no querer seguir patrullando y cansado, de mala gana Conway me encerró en su oficina y pude dormir ahí sobre un sofá, definitivamente mejor que el piso. Quitando la situación del coche este día no había sido tan malo, había podido estar cerca de Freddy.

¿Porque Freddy hace que me sienta así con su presencia?.

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¡GUSTABO VIVE!
Soy lágrimas, definitivamente el espagueti esta en peligro. Voy a extrañar a Auron. (⁠╥⁠﹏⁠╥⁠)

Un capítulo corto, espero les guste.
Al no tener tanto material para este capítulo me inventé está situación del coche.

¿Quién lo estara siguiendo?.

¡Gracias por leer!