ENTRE EL INFIERNO Y EL AMOR

HASTA NUNCA

- Es injusto Christopher haces esto por que estas enojado por dejarte anoche, pero no podía dejar a Brat solo.

- ¿Es tu perro y por eso lo tienes que cuidar?.

- ¿Te estas escuchando? Por lo menos entonces si se cuidar a un perro, porque tu no pudiste cuidar a Zeus.

- Joder, callate, ya te he dicho lo que tenía que decirte he tomado la decisión de terminar nuestra relación, tu antepones a otros antes que lo nuestro, pero ten por seguro que si yo corro a acompañar a una de las chicas con quien folle me harás la escena de tu vida y estoy acostumbrado a no ser la prioridad de alguien entonces prefiero ser yo mi propia prioridad siempre, sin la necesidad de que otro me convierta en su prioridad, esto se termino James, lo que sea que hayamos tenido, ya sea buen sexo buena conexión en la cama se acabó.

- Christopher, tenemos una relación no puedes venir a tomar esa decisión porque, porque yo te amo.

- No me interesa la manera de amar que tienes Rachel, estoy harto de que sigas prefiriendo a otros antes que lo nuestro y te lo vengo repitiendo hasta el cansancio, prácticamente mi boca ya ha sangrado por todas las veces que ya te lo había dicho.

- ¿Lo haces para follar mejor con Gema? - Pregunta Rachel.

- Te estas escuchando de manera muy tonta Teniente, pero a donde encaje mi polla ya no tiene nada que ver contigo solo tendremos la relación de Coronel a Teniente.

- Christopher, perdóname por lo ocurrido te juro que no volverá a ocurrir, yo...

- No hagas falsas promesas que no vas a cumplir en lo absoluto Rachel, te conozco y ante el primer lloriqueo de tus seguidores, de tus ex amores o de un simple soldado saldrás corriendo, primero tienes que ser tu, después tú y por último tú, pero no eres capaz de hacer eso, para ti primero es Cualquiera antes que tu felicidad y no te juzgo tenemos diferente debilidades, la mía soy yo mismo, la tuya es cualquier persona.

- Christopher, por favor, no podemos terminar esto que tenemos.

- Ha terminado anoche cuando te espere hasta tarde con un punto anillo, te iba a pedir que fueras mi esposa Rachel, la mujer que quería a mi lado, la misma por la cual estaba dispuesto a convertir el mundo en cenizas, destruiría todo si no te tuviera conmigo, te daría el puto poder de destruirme si así lo hubieras querido, pero resulta ser que hoy es un nuevo día y no quiero ser destruido por ti, prefiero convertir el mundo en cenizas porque me desafiaron a mi, y no por una mujer, prefiero arder en un infierno, pero lejos de ti, y tampoco quiero arder por ti - las palabras de Christopher estaban desestabilizando a Rachel - Si has venido siempre a mi es porque soy el único que puede protegerte.

- Christopher, basta, Detente ya no sigas, te amo.

- Tu manera de amar me da cáncer - Rachel no pudo contener las lágrimas ante aquel hombre que ella decía conocer, pero ahora mismo parecía ser un demonio que no dudaría en derribarla -. Por eso Rachel, he tomado la decisión de que como Coronel de esta base Fueras enviada a los Estados Unidos, allí estarás mejor, puedes retirarte, Teniente - Rachel vio que no habían manera de que Christopher se detenga y le estaba hablando en su tonada superior, no como el hombre que la ama.

- Fue un Placer estar en su ejército, Coronel.

- Hasta Nunca Teniente - Entonces Rachel supo que Christopher Morgan la babia soltado lo sentía en la frialdad de su mirada y en la lejanía de su voz, se acabó, y ella en el fondo no quería aceptar que fuera su culpa, sus miradas, Azul y Gris se encuentran, seguían siendo intensas, pero parecen que ya no están entrelazados, el hilo rojo entre ellos se perdió, pero las puertas del Infierno siguen abiertas para su nueva ocupante, es aqui donde la Bestia desenreda el nudo de su corazón.