COMPRADA POR MI MAESTRO

CAPÍTULO 40: UN DIA DE CAMPO (PARTE 1)

El primer dia al lado de Oliver ha sido muy lindo, todo ha parecido un sueño, dije que no pensaría mas en David y asi ha sido, o al menos lo intente. Al salir de la escuela, el paso por mi. Fuimos a comer y luego se quedo conmigo viendo películas. Fue algo hermoso estar toda la tarde con el, ahora seguimos viendo una película mientras estamos acostados en la cama

-Oye mi amor - dice Oliver mientras acaricia mi pelo - me encanta poder estar contigo asi. No quiero separarme nunca.

- Yo tampoco mi amor, estoy tan feliz contigo. Pensé que extrañaría mi casa y si, un poco mi amor. Pero tu has hecho que no lo piense mucho, estoy muy feliz contigo -

- Y yo contigo mi niña, me haces el hombre más feliz del mundo -

- Y tu me haces la mujer mas feliz del mundo - me apego mas a el mientras el me rodea con sus brazos - mi amor, hay algo que me encantaría poder hacer contigo

-Claro mi amor, tenemos todo el tiempo del mundo para que hagamos todo lo que quieras mi amor. Pero, dime ¿que te gustaría que hicieramos mi vida?-

-Pues me encantaría tener un dia de campo contigo mi amor, asi como en las películas de romance, perdernos tod el dia en un bosque, tal vez cerca de un río. Comiendo juntos, acostados en el pasto verde mientras miramos al cielo, besarnos con la brisa del viento - me siento un poco nerviosa mientras explico como quiero que sea nuestra salida. Tal vez piense que soy muy ingenua o crea que soy muy romántica

-Claro mi amor, haremos lo que tu quieras. Y si quieres que hagamos algo asi, sin duda lo haremos. ¿Te parece si lo hacemos mañana?-

-¿En verdad mi amor? - digo con entusiasmo y algo de sorpresa mientras lo miro a los ojos - me encantaría, seria fabuloso. Sin duda quiero hacerlo

-Pues entonces le pediré a Inés que prepare un poco de comida para que llevemos mañana y nos iremos temprano. Tengo el lugar perfecto para ir -

-¿asi? Cual es mi amor? - lo miro mas alegre que nunca por la idea, además de que estoy muy curiosa

- Sera una sorpresa mi amor, es una sorpresa que espero te guste. Para mi es un luga especial y que vaya contigo mi amor lo hace aun mas especial - acerca mi rostro con su mano hasta quedar a milímetros del suyo, para luego darme un lindo y suave beso. Es lento y tierno.

Seguimos viendo la película mientras nos damos besos de vez en cuando hasta que llega la noche. Al caer la noche Oliver baja a decirle a Inés que si podía preparar comida para mañana, mientras que Oliver busca las cosas necesarias para ir, y yo solo me quedo escuchando musica ya que me dijo que quería fuera sorpresa por lo que no me dejo involucrarme.

Después de un rato vuelve a la habitación y nos preparamos para dormir.

A la mañana siguiente nos despertamos temprano para poder disfrutar del dia, que para nuestra suerte seria un dia soleado y hermoso.

Yo me metí a bañar primero mientras Inés terminaba de cocinar y Oliver alistaba las demás cosas, quise ayudar, pero fue inútil, ya que me dijeron que ellos lo arreglarían.

Después me cambie y me puse un pantalón de mezclilla, unas botas negras y un suéter color morado, mi pelo lo deje suelto mientras que mi maquillaje fue sencillo. Mientras yo me terminaba de arreglar, Oliver se bañaba, al salir yo ya estaba lista y solo vi como se vestía. Se puso un pantalón de mezclilla al igual que yo, una camisa a cuadros, y un chaleco color negro, sus zapatos fueron unas botas cafés. Aunque el dia sería soleado, la mañana era algo fresca.
Después de un rato partimos rumbo a nuestro día de campo, hoy no iríamos en el típico coche de Oliver, hoy íbamos a ir en un jeep de color rojo, ideal para los dos, con la parte trasera de color negro.

- ¿Me dirás a donde vamos amor?- pregunte un poco ansiosa por saber

- No, mi amor. Es una sorpresa -

- Por favor dime, al menos dame una pista- dije haciendo un ligero puchero

-Bien amor, vamos al mundo de las hadas, duendes y unicornios - seguido de esto me volteo a ver mientras me dedicaba una sonrisa  por sus palabras

Después de esto nos pusimos en marcha, mientras íbamos en el camino hablábamos pero tambien podía disfrutar del paisaje, salíamos de la ciudad poco a poco, después podía ver arboles y mas arboles, después de una hora casi pude ver que pasamos por un pueblo, pasamos al lado de un kiosko muy bonito, en el que su alrededor había bancos de madera en vez de metal, como son casi siempre. Pero el camino continuo, nuevamente pude ver mas arboles, y llegado el momento nos estacionamos, pude ver que tendríamos que adentrarnos un poco, pero se veía hermoso desde mi perspectiva