¿Qué te puedo decir?

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La familia Loud siempre habían hecho todo juntos; pero nadie puede parar el tiempo, Rita de Loud y Lynn Loud padre, tenían a su gran familia compuesta de 11 hijos, cada uno con afinidad a algo en particular, por ejemplo: Lynn hija con los deportes, Leni con buen gusto para la moda o Luan con un "extravagante" humor; así sucesivamente con cada hija, pero no nos olvidemos de el único hijo, Lincoln Loud. Lincoln había crecido entre sus primeras 5 hermanas que daban todo para hacerlo feliz y el disfrutaba de el tiempo compartido, viendo desde bebe la evolución de cada una, pero el le tenía cierto cariño a Luna, la tercera hija, la niña "rockstar", ambos disfrutaban el uno del otro desde la niñez. Pero ahora todo era diferente


Lori estaba a punto de graduarse de su universidad, Leni trabajaba como diseñadora para una importante marca de ropa (estaba gracias a su carisma, no por su intelecto), Luan estaba en la universidad estudiando la carrera de teatro, Lynn hija consiguió que un equipo de futbol se fijara en ella y ahora estaba en un equipo profesional, Luci junto a las gemelas Lola y Lana habían formado un equipo tripartita donde cada una se apoya en las habilidades de la otra aun siendo tan diferentes entre sí, Lisa seguía con sus experimentos solo que ahora con un laboratorio subterráneo y Lily se encaminaba para entrar a la primaria. Por ultimo Luna y Lincoln habían hecho... nada. 


Luna seguía con la idea de la banda "Las cabras lunares"; eran conocidas ya en el estado, pero no daban ese paso a la fama, Sam, su novia, le recordaba que "Antes de la paz esta la tormenta, ¿O era al revés?". Lincoln por su parte había conseguido que cada una de sus hermanas fuera feliz tanto dentro como fuera de la casa, pero ahora que  4 hermanas estaban fuera, 1 en los subterráneos, 3 se amaban tanto como para compartir cuarto y otra que casi nunca estaba en su recamara; se había quedado sin propósito, ya no era "el hombre del plan" ahora solo era el hermano.



Era una mañana de sábado, la lluvia azotaba en todo Royal Woods, Lincoln se encontraba viendo la televisión llevaba puesto un pants negro junto con una sudadera azul marino, toda la familia había salido para un concurso de Lana, el junto con Luna se quedaron para resguardar el fuerte. Luna extrañamente estaba callada, era de esos días donde disfrutaba de tocar a todo volumen sin que alguien le dijera algo. Lincoln echado en el sofá y pensando sobre el infernal silencio, recibió una llamada de su padre.


-Hola papá -hablo con un animo nulo- ¿Ya vienen en camino?

-Lo siento campeón -decía el patriarca de la familia- no creo que lleguemos en un buen rato, las calles están inundadas y el caballo que domo Lola, que iba a ser el vehículo de Lana cuando ganara se comió un pedazo de pelo de ella, lo estamos escondiendo, -empezó a susurrar- no creo que sobreviva.

-Espero puedan esconderlo -contesto algo triste- Luna y yo seguiremos cuidando.

-Muy bien hijo, yo... !Nos encontró¡, tengo que colgar -se podía escuchar las exhalaciones de Lynn padre- !Lola súbete en... -La llamada había sido terminada.

-Ire por una velas.


Lincoln subió las escalaras para poder encontrar unas velas en el ahora cuarto de las gemelas y Luci, paso por el cuarto de su hermana Luna, que estaba vestida con un pants y su camisa que usaba de pijama, tirada al lado de la icónica litera de esa habitación, con una hoja en su mano derecha y la guitarra acústica en la mano izquierda.


-Hermana, ¿estas bien? -pregunto Lincoln recargado en el marco de la puerta-.

-Estoy de la mierda -contesto, trato de ponerse en pie, pero no pudo la hoja de papel voló a los píes de Lincoln, pero la guitarra nunca fue soltada- ¡Carajo!, ¿Una manita?.

Amor musical. (Loudcest)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora