Solo una apuesta- Jack Gilinsky

Capitulo 58

Afuera estaba Jack recostado de su auto y sobre este había un gigantesco ramo de rosas. Yo al ver la escena me regrese nuevamente al colegio intentando que él no me viera.

Yainés: ¿Qué pasa? ¿No te emociona ver a Jack?

Yo: ¡Claro que sí! Pero si me ven con él lo podrán en Twitter y se formará un gran escándalo. No quiero que eso pase.

Charlotte: Ahí tienes razón. -mi celular sonó y era Jack-

Llamada:

Jack: ¿Ya saliste del colegio?

Yo: Sí y te vi pero no quería que te reconocieran y comenzaran los chismes.

Jack: ¿Chismes? ¿Estás preocupada por eso? Porque a mí eso no me importa.

Yo: A mí eso si me importa, Jack. Sé lo importante que es esto para ti.

Jack: Bien ¿Dónde estás?

Yo: Adentro ¿Te parece si camino hasta la esquina y me recoges allí?

Jack: No me gusta la idea pero si eso te hace sentir mejor te espero allí. Apúrate te extraño mucho.

Yo: Y yo a ti. Ahora salgo. -colgó-

Camine hasta la esquina y subi al auto de Jack. Este me tomó del rostro y se acercó a mi para besarme por largo rato.

Jack: Si pasaba un minuto más sin verte iba a morir.

Yo: No seas exagerado Jack -beso mi mejilla- ¿Por qué no me dijiste que llegabas hoy?

Jack: Porque quería sorprendente.

Yo: Lo hiciste... créeme- bese la mejilla de el y me sente correctamente en mi asiento. Jack estiró su brazo y del asiento trasero sacó el ramo de rosas que había visto sobre su auto-

Jack: Son para ti.

Yo: Gracias... ¿Iremos a algún sitio?

Jack: No tengo nada en mente pero si quieres podemos ir a comer a donde trabaja Sierra.

Yo: Esa idea me gusta. Tengo hambre. -Le mande un mensaje a Elizabeth diciendo que iría a comer con Jack-

Llegamos al pequeño restaurante y Jack me abrió la puerta para entrelazar nuestras manos y caminar adentro. Tomamos una mesa y Sierra nuevamente nos atendió.

Yo: ¿La pasaste bien?

Jack: Sí, aunque si hubieras estado conmigo quizás la hubiera pasado mejor. ¿Y tú?

Yo: Bueno, pasé más tiempo con las chicas así que no estuvo tan mal.

Jack: Ahora pasarás más tiempo conmigo. -Depósito un beso en mi mano-

Yo: Son los planes -le sonreí-

Jack: Quizás podemos irnos un fin de semana a Miami. Solos tú y yo.

Yo: Dudo que a Elizabeth le guste mucho esa idea, Jack.

Jack: Bueno, podemos llevarnos a Nash y a Nicole.

Yo: Quizás...

Luego de comer hablamos un rato con Sierra y Jack me devolvió a la casa. Abri la puerta y Hayes se lanzó sobre mi.

Hayes: ¡Cataaa! -Enrollo sus piernas en mi cintura-

Yo: Hayes... me voy a caer. Bájate, bájate. -Hayes volvió al suelo pero me abrazó fuertemente-

Hayes: Nash y yo te trajimos muchas cosas.

Yo: ¿Sí?

Hayes: ¡Claro!

Yo: Me baño y bajo.

Hayes: Ok -deposite un beso sobre su cabello y subi a mi cuarto para entrar a la ducha. Sali secando mi cabello con la toalla y vista se poso en la cama donde había una cajita dorada con un lazo rojo....

Tome la cajita en mis manos y la abri para encontrarme con un cigarrillo electrónico color rosado y bajo el una nota:

"Lo vi y pensé en ti... eres una niña y deberías estar usando un cigarrillo de juguete. Sam"

Yo: Ja Ja que divertido Sam.

Sam: Lo sé. -Voltee asustada y vi a Sam parado al lado de la ventana con sus brazos cruzados y una sonrisa de diversión-

Yo: ¡Casi me matas!

Sam: Lo siento.

Yo: ¿Cómo entraste?

Sam: Bueno, luego de gritar varias veces ¡Rapunzel, Rapunzel! ¡Deja caer tú cabello! Y no obtener respuesta decidí subir por cuenta propia -Mientras hablaba hacía muecas rara y yo solte una risa-

Yo: ¿Entraste por la puerta cierto?

Sam: Así es, Sky me abrió.

Yo: Gracias por el útil regalo. -le enseñe el cigarrillo-

Sam: De nada.... aunque en realidad mi regalo es este. -me pasó la caja dónde por lo visto vino el cigarrillo y yo lo mire con una ceja levantada-

Yo: Esto es una broma.

Sam: No, sólo ábrelo.

Yo: Eres raro.

Sam: Y eso te gusta. Ahora abre la caja.
-Solte una risa mientras abría la caja y pensaba que Sam probablemente es el chico más raro que conosco-

Yo: Juró que si adentro hay un insecto te mató.

Sam: Oye, jamás te haría algo malo.
-Volteo la caja para que lo sea que hubiera dentro cayera sobre la palma de su cama y cayó un lindo brazalete- Es una Pandora, ya sabes una pulsera para colocarle charms y todo eso. Como puedes ver ya tienes tres.

Yo: Siempre quise una pero nunca me animé a comprarla. Gracias.

Sam: Bueno, entonces creo que es el regalo perfecto.

Yo: Es algo muy muy cercano al regalo perfecto. -le sonreí divertida-

Sam: Ven, déjame ponértela. -Se acercó a mi y mientras la abrochaba me miró a los ojos- ¿Me extrañaste?

Yo: No

Sam: ¿No? -me miró con una ceja levantada-

Yo: Nope

Sam: Eres una mentirosa.

Yo: Bueno, creo que es un poco obvio que sí.

Sam: Me encantaría escucharte decirlo
-su cercanía conmigo aumentó y nuestros labios ya rozaban poniéndome nerviosa-

Yo: ¿Por qué?

Sam: Porque eso me dejaría saber que te importo.

Yo: Bueno, eres mi amigo obviamente me importas. -Sam puso sus manos en mi cintura-

Sam: Sabes que no hablo de ese tipo de interés.

Yo: Entonces... mi querido Sam, no sé de que hablas.

Sam: Puedo enseñarte -hizo su agarre más fuerte en mi cintura-

Yo: Si.... yo creo que eso no va a ser posible. -Puse mis manos en su pecho y lo aleje de mi-

Sam: ¡Oh vamos cata! Sé que quieres ese beso tanto como yo..

Yo: Sam..

Sam: ¿Es por el puto de Jack cierto?

Yo: Quizás todo esto sea por una apuesta pero eso no quita el hecho de que se mi novio.

Sam: Bien, puedo esperar dos semanas para darte el mejor puto beso de toda tú vida y para que sea memorable será frente a Jack.

Yo: ¿Cuántos tornillos te faltan?

Sam: ¡Muchos! ¿Sabes por qué?

Yo: No

Sam: ¡Porque sólo pienso en esos dulces y carnosos labios que tienes sobre los míos! ¡Me traes loco Cata!