🔥CAPITULO 6🔥

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Juliette

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Juliette.

Juliette: Ya deja el mal humor princesito.

Sus ojos me miran desde el sofá en el que está sentado en la sala, acabo de terminar de cambiarme, normalmente uso sudaderas y ropa ancha porque me siento mas cómoda para ir a la universidad, pero los fines de semana que salgo con mi mejor amigo sale mi otra yo, una que viste faldas y vestidos, la verdadera yo, la que muestra lo que es y no se deja intimidar.

Mi mejor amigo pasa una lenta mirada por todo mi cuerpo, empezando por las botas que llegan hasta mis rodillas, pasando por mi corta falda negra, luego por la remera pegada al cuerpo que es prácticamente transparente salvo por la zona de los pechos y termina en mi rostro donde lo único que permanece de mi otra yo son los anteojos.

Zacharie: Estas hermosa —se levanta y bufa— como siempre.

Juliette: ¿vas a ir de mal humor o nos quedamos?

Me mira fijamente a los ojos, sabiendo que no cederé o planta una sonrisa en ese hermoso rostro que tiene o nos quedaremos aquí a mirar una película, elegiré la más aburrida solo para molestarlo.

Suspira y sus comisuras tiran de la sonrisa que me encanta, tan grande y hermosa, tan única con el aro en su labio, tira de mí hacia su cuerpo y me envuelve en un abrazo cariñoso como siempre hace, al llevar mala mirada siempre la gente piensa que es frío y solitario, pero en realidad es una de las personas mas amorosas que conozco.

Me reprendo mentalmente al decir eso, no conozco buenas personas por supuesto que no serán cariñosos, pero mi mejor amigo lo es, siempre lo fue conmigo, al igual que Dominique.

Margot por otro lado es la típica chica que quiere ir agarrada de tu brazo por los pasillos de la universidad mientras va diciendo chismes que escucho de todo el mundo, no es nada parecida a mi, pero no puedo alejarla, ella estuvo para mi junto a mi mejor amigo en mis años de preparatoria, me apoyo cuando se burlaban de mí, me apoyó cuando me encerraban en los baños, simplemente no puedo alejarme cuando fue buena conmigo, no cariñosa, buena.

Zacharie: Ya estoy mejor, solo hacía falta cargarme de tu energía.

Juliette: No me sobra la energía ¿sabes? un día me la robaras toda.

Zacharie: Intentaré dejarte suficiente energía para que puedas acurrucarte conmigo cuando pase sol.

Parpadeo borrando los sentimientos que me generaron sus palabras, sonaron tan jodidamente sexys y para nada era lo que quería decir, pero me fue imposible concentrarme en realidad en lo que quería decir cuando la voz de mi cabeza decía que me dejaba agotada después de horas follándome, cuando la imagen en mi cabeza es de el y yo acurrucados desnudos en su cama con transpiración cubriendo nuestros cuerpos y las respiraciones agitadas.

Zacharie: ¿Por qué te sonrojaste?

Sus manos están envolviendo mi rostro mientras sus ojos miran fijamente los míos con un brillo especial que no puedo distinguir, generalmente puedo saber todo de él con verlo a los ojos, pero no se que es lo que sus ojos me quieren transmitir.

Juliette: Oh no por nada ¿vamos? —carraspeo sintiendo mi voz aún más ronca de lo que ya está— no podemos llegar tarde hoy, ya sabes.

Asiente con su cabeza indeciso y toma mi mano para guiarnos hacia la salida, bajamos en el ascensor y nos subimos a su carro, el purgatorio es un club en el que pocos pueden entrar porque hay una serie de pruebas que tienes que pasar para hacerlo, nosotros pasamos, al final todos los entrenamientos que mi mejor amigo me dio sirvieron porque pude entrar, es un lugar en el que me puedo sentir yo misma sin que nadie me juzgue porque aunque hable nadie pensara que me quede con esta voz por chupar una polla sino porque me cortaron la garganta, me ahorcaron o lo que fuera, bueno, eso depende en qué zona del club estés, mientras no estés en el prostíbulo del club nadie pensara que te mandaron una polla por la garganta.

El club tiene todas las experiencias oscuras que te guste transitar, desde peleas clandestinas a carreras terminando en un prostíbulo donde las mujeres que quieran dinero fácil y rápido aparte de pasar una buena noche de sexo van allí, quizá no necesites el dinero, pero quieras follar salvajemente con uno o todos los desconocidos que quieras, el club tiene todo tipo de morbos y es lo que me hace sentir que nadie me juzga, no cuando veo mujeres follando con cuatro sobre un sofá para que todos puedan ver.

Claro que no detuve mi vista allí más de dos minutos, pero eso fue suficiente para saber qué es lo que quiero, yo quiero ser como esa mujer, no quiero solo un hombre, quiero varios, quiero y merezco el amor de varios hombres.

Llegamos al club y entramos por la zona de carreras donde hay un estacionamiento, bajamos del carro y automáticamente empezamos a escuchar los gritos y abucheos de la carrera que está transcurriendo en este momento a solo unos metros de nosotros, una sonrisa se planta en los rostros de ambos aunque hoy no vinimos por las carreras, vinimos porque mi amigo está peleando por su puesto como invicto en las peleas clandestinas.

Juliette: Estoy segura de que ganarás princesito, siempre lo haces.

Zacharie: Diabolo no tiene la reputación de jugar limpio.

Diabolo es quien peleará contra mi mejor amigo, tiene la reputación de meter gente en sus peleas o usar instrumentos que están prohibidos, no entiendo como aun no lo han prohibido a él aquí.

Juliette: Si me necesitas entraré.

Zacharie: No, ya hable con ghost él entrará si ve que algo no va bien.

Asiento como si en verdad estuviera de acuerdo con el, cuando en realidad iré a amenazar a ghost diciéndole que si se mete se quedará sin polla.

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