「Manos Atadas」(Isagi x Bachira) [Blue Lock]

𝐁𝐚𝐜𝐡𝐢𝐫𝐚

Bachira

Barcelona― Octubre 24 °C

Bachira estaba seguro que aceptar aquella visita iba más allá de solo querer verlo, teniendo el presentimiento de que quizá las cosas iban por otro lado, o quizá no. Pero de lo que estaba seguro era que no sabía cómo sentirse, menos de qué era lo que realmente pasaba; evitando la misma pregunta, distrayendo su cabeza con otras actividades; haciendo lo posible por no atormentarse en el camino a una verdad que, sí estaba seguro, iba a angustiarlo.

Miró la hora en su celular y revisó la última vez en línea de Isagi, seguro estaba cerca.

A veces recordaba aquella primera vez que conoció a Isagi en medio del campo; su mirada enfocada en todo el panorama, avanzando con rapidez y esquivando a cualquiera que se ponga en su camino; y supo no iba a ser fácil, pero cuando conectó miradas el piso le tembló.

―Fue raro. ―susurró para sí mismo recordando aquella sensación.

Pero de nuevo una sonrisa se le formaba al recordar cómo al retomar compostura aprovechó los segundos de distracción de Isagi para robarle el balón. Luego de ello, fue un juego demasiado entretenido, tanto que siempre lo repetía en su memoria cual película. El corazón le latía con fuerza cada que ello ocurría, sabiendo ahora que por ello fue la primera vez que aceptó ir a las celebraciones organizadas luego de cada partido, todo con el objetivo de no quedarse con las dudas y las ganas.

Porque Bachira era alguien curioso, sobre todo consigo mismo; el querer descubrir la razón de aquel relámpago de emociones claramente tomaría prioridad.

Su sorpresa fue otra cuando notó que la cercanía de Isagi fue la respuesta a sus dudas.

Sin embargo, decidió ignorarlo parcialmente.

Más allá de todo, le agradó poder ser él mismo aunque sea unas horas con alguien, sintiendo un ambiente tranquilo y divertido. Era reconfortante, tanto que decidió darle su número para mantener el contacto, anhelando muy en lo profundo de su ser poder volver a verlo solo para pasar un buen rato hablando.

Pero con el pasar de los meses la sensación de querer volver a sentirse en paz con alguien empezó a abrumarlo, sobre todo cuando no se encontraba entretenido con algo; recordando las sonrisas que se le escapaban a lo largo del día una vez tenía la mente en blanco, imaginando lo que sería volver a ver a su amigo y quizá jugar un 1vs1 junto a él. Estar junto a él.

Era peligroso, o eso pensó al sentir un ligero rechazo a sus propias actitudes; pensando que lo mejor sería guardar distancias para no seguir rompiéndose la cabeza con algo que no sabría cómo batallar.

Aunque las cosas siempre cambian a la hora de los hechos, porque cuando Isagi le dijo que podría viajar un fin de semana a España no se negó en lo absoluto.

Y ahora se encontraba en el aeropuerto, viendo la hora de conexión de Isagi cada diez minutos para saber si había llegado.

No quería hacerse más ideas. Todo ese tiempo había preferido ignorar aquel mal sentimiento que le causaba sobre pensar lo que ocurría en su cabeza y pecho. Sintiendo sería lo mejor para sí mismo y su paz mental, no dándose la oportunidad de torturarse con una situación que quizá no tendría lugar si no lo permitía. Al final era dueño de sus decisiones, y por mucho que quiera o no algo, podría controlarlo no importa lo tarde que era ―o eso trataba de auto convencerse―.

Tomó sus audífonos y se los colocó con el fin de poder apaciguar el ligero nerviosismo que le ocasionaban los hechos ignorados con algo de música; y daba igual, en definitiva, solo era un nerviosismo completamente normal, pensó.

Porque solo iba a verlo por segunda vez, luego de tres meses de hablar todos los días por chat y llamadas interdiarias, no había nada de malo en estar ansioso por ver a su amigo. ― ¿No? ―.

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Eso es todo por esta semana ¡Gracias por leer! Muak :3

Subiré un cap cada jueves! :D si no me olvido por la U jsjs, pero prometo ser continua!

(Limy Alaaya)