🥧 04: No Puede Ser.

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Jimin percibió a Jungkook con una actitud muy extraña después del momento en la que le dijo que no se comió el curry que él mismo le había empaquetado para el almuerzo. A pesar de eso, no hablaron más acerca del tema, por la noche el alfa le dio un corto masaje en el cuello y luego cenaron algo ligero para después irse a la cama.

Fue muy temprano por la madrugada que Jimin sintió a Jungkook dando vueltas sin parar y finalmente mucho antes de que la alarma diaria sonara, lo escuchó levantarse y salir de la casa. Antes el menor solía ejercitarse con mucha frecuencia, ahora simplemente salía a correr cuando estaba sintiéndose estresado o nervioso por algo.

Él no supo que pensar en ese momento, por un segundo creyó que quizás Jungkook se había molestado por el hecho de que dejó intacto el curry de su lonchera, quizás creyó que no le había gustado y eso lo hizo sentirse triste, no era la primera vez que le pasaba. Jimin recordaba cuando el alfa una vez le preparó banana bread para uno de sus aniversarios y fue el peor postre que había probado en su vida. Por más que quiso fingir que le había quedado bien, él lo terminó probando y luego estuvo triste por horas porque sabía terrible.

Ahora esperaba que fuera eso, porque no sabía como explicarle que al abrir la tapa del contenedor de la comida, el aroma del curry le revolvió el estómago hasta el punto de mandarlo directamente hasta el baño de la cafetería para devolver la cena del día anterior.

Jimin estaba nervioso, llevaba días sintiéndose extraño, pero justo cuando pensaba en analizar sus síntomas, la alarma sonó haciéndolo dar un respingo del susto. Estiró el brazo para apagarla y luego soltó un largo suspiro mientras se abrazaba a sí mismo. Un poco de tiempo después decidió levantarse, ya que Jungkook no parecía volver, se metió a la ducha, salió, se secó el cuerpo, el cabello, se puso crema hidratante con aroma a vainilla y luego se puso su uniforme que había dejado planchado desde el día anterior.

Después salió a la cocina y ahí se sirvió un vaso con agua, estaba terminando de beberlo cuando escuchó la puerta ser abierta. Su alfa apareció apresurado, sudoroso y a pesar de la tensión de la noche, sonriendo en grande. Parecía que la actividad matutina le había devuelto el buen humor. El omega por su parte se perdió en la imagen de los perfectos brazos de su alfa, descubiertos porque traía puesta una camiseta sin mangas, tragó saliva olvidando todo lo nervioso que se encontraba y le correspondió la sonrisa que este le brindo al verlo.

—Hola, bonito, ¿dormiste bien? —le preguntó poniendo sobre la barra frente a él una bolsa.

Jungkook se acercó y lo tomó de la cintura con cuidado de no acercarse demasiado porque estaba sudado y sucio y Jimin estaba limpio y bonito. A pesar de eso, le dio un beso de los buenos días en los labios y le acarició la mejilla con cariño. Al omega le volvió el alma al cuerpo con esas pequeñas acciones.

—La verdad apenas dormí porque creí que estabas molesto conmigo porque dejé el curry... —se lamentó haciendo un puchero involuntario.

El castaño negó rápidamente mientras abría la bolsa que había dejado en la barra. De ella sacó un par de vasos de jugo de naranja con tapa y un par de sandwiches de pavo con vegetales.

—Amor, no, no pienses eso —le dijo mientras desenvolvía uno de los sandwiches y lo cortaba cuidadosamente por la mitad. —Sólo que tuve un día caótico en el trabajo y luego me preocupé porque dijiste que te sentiste mal —trató de sonar lo más convincente posible.

—De todas formas lo lamento, era curry de caja, pero aún así aprecio cuando me haces el almuerzo, eres el alfa más adorable que existe —sonrió el omega de manera encantadora.

Jungkook le devolvió la sonrisa atontado. Siempre que su omega le decía cosas de ese tipo y luego su rostro se iluminaba con una de esas brillantes sonrisas, sentía que podría derretirse, su corazón se aceleraba y su estómago se revolvía a causa de las mariposas que revoloteaban como locas, o más bien como las avispas que volaban como furiosas ahí dentro. Podían pasar mil años y su preciosa sonrisa siempre le haría sentir que todo lo que lo ponía nervioso, triste o molesto, no existía.

Apple Pie Life 𐦍 KookMin 「Omegaverse」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora