Rachel.
Mis manos se hunden en la cabellera oscura, en tanto él busca más acceso a mi cuello, sus besos no se detiene, ni por más dormido que este. Parece que lo hace inconscientemente.
Suelto un suspiro, buscando respirar con normalidad, sin moverlo. Está muy dormido, a pesar de los besos perezosos, lo está.
Y diría que estoy feliz de que esté descansando, por qué... Bueno, lo estoy... Pero creo que algo lo está sobrepasando.
Para que caiga así es difícil, tiene el sueño ligero, tiende a sentir cuando me muevo aunque sea un poco, y hace nada me levanté por otra manta, y lo único que hizo fue tomarme y acomodarse sobre mi parcialmente.
Y volvió a caer rendido.
Sé que muchas cosas lo tienen cansado, el tener que visitarme a mi cada dos semanas o cada semana no es su cosa favorita. Todo hubiera sido más sencillo si hubiera aceptado el amparo, así me tendría más cerca y no a horas de distancia, pero en ese momento, mi muerte se veía como la única solución a todo lo que teníamos encima.
A todo lo que yo tenía encima.
Sé que no le gustó mucho mi decisión, pero no dijo nada, me tomo, al igual que una maleta llena de mis pertenencias, me hizo subir a su jet y me interno en un centro a cargo de su tío.
Veló y vela por mi seguridad, y se lo agradezco con todo lo que tengo, pero... Me siento mal, por qué a veces me siento como una carga. Sobre todo cuando viene así de cansado.
Sé que tiene como mil problemas fuera, nunca se queja conmigo, por qué se supone que no debería saber nada de la FEMF. Pero quisiera que se desahogará aunque sea un poco.
Sus brazos se enredan con más fuerza a mi al rededor, utiliza esa misma fuerza para rodar y llevarme con él, colocándome sobre su pecho.
—Duérmete —deja un beso más en mi piel.
—En eso estoy —susurro, ahora yo, dejando un beso sobre su pecho.
Un suspiro es lo que lo hace volver a quedarse dormido.
Joder.
Cuatro años y sinceramente, no sé que me hizo para tenerme así de enamorada, pero lo sigo viendo como el hombre más perfecto que existe.
Llevo tres años en el exilio, mis miedos y esperanzas van de la mano, unos aumentando, otras disminuyendo.
Miedo a que se canse de tener que venir a mi, que se canse de tener que cuidarme... Que le cansé buscar lugares donde esconderme... Que se cansé de esta vida.
Mis esperanzas de volver han disminuido en un -0.5%. Sé perfectamente que no debí tenerlas desde el principio, pero me aferraba a el qué, quizá, cuando capturará a Antoni, volvería a su lado.
Parece que no va a ser así.
«—Acepto el exilio a cargo del Coronel Christopher Morgan...»
A veces en serio me cuestionó si debí o no aceptarlo. Él quería que fuera el amparo, pero Alex puso las cartas sobre la mesa.
Amparo o exilio.
Cualquiera bajo su cargo. Bajo su supervisión.
El abogado me dijo que podía declinar de cualquiera y si elegía un exilio, podía ser como los otros y ser a cargo de cualquier persona en casos internos.
¿Pero qué dije yo?
Que lo iba a extrañar demasiado, que no podía alejarme de él tanto tiempo. Que él que se hiciera cargo de cualquiera de las opciones que tenía, me aseguraba verlo, aunque sea para cambiar de país o lugar.
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𝐂𝐚𝐥𝐥 𝐈𝐭 𝐖𝐡𝐚𝐭 𝐘𝐨𝐮 𝐖𝐚𝐧𝐭 | 𝐅𝐚𝐧𝐟𝐢𝐜 𝐂𝐡𝐫𝐢𝐬𝐜𝐡𝐞𝐥
FanfictionMiniFic Chrischel donde Rachel es exiliada bajo el cargo de Christopher (No veremos su vida en el exilio, más bien en el regreso y un poquito de su vida) Espero lo disfruten<3