Capítulo 16

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Narrador omnisciente

La parejita había iniciado su viaje de vuelta a la casa de la castaña.

Diana caminaba de la mano con Akko, quien llevaba una gran sonrisa en su rostro.

Diana: Se nota que estás muy feliz.

Akko: Eres muy observadora je.

Diana: No sueltas mí mano desde que nos despedimos de Lukić.

Akko: ¿Te molesta?

Diana: No, no me molesta.

La castaña sonrió más, acercándose al rostro de Diana, poniendo a ésta ligeramente nerviosa.

Diana: ¿S-Si?

Akko: Te amo.

Diana: ....

Akko: Je, ahora te pones nerviosa.

Diana: Por supuesto, ya no soy tú guardiana y ahora sé que nuestros sentimientos son mutuos.

Akko: En pocas palabras, ya soy tú novia.

Diana: Lo eres.

Ambas siguieron caminando por un rato, llegando a un pueblo cercano, afortunadamente ya sabían a que lugares recurrir para poder conseguir comida y refugio.

??: Oh, ustedes de nuevo, ¿Desean la misma habitación?

Akko: Si, por favor.

Ingresaron a la habitación y la menor se tiró en la cama mientras que Diana se dirigía al armario para sacar unas cobijas.

Akko: No dormirás en el suelo, ya no.

Diana: Oh.. je supongo que me acostumbré.

Akko: Ven.

La rubia hizo caso y se sentó en la orilla de la cama siendo rodeada en unos brazos.

Akko: Hace tiempo quería hacer ésto...poder abrazarte sin el temor de saber que no podría estar contigo.

Diana acarició sus manos y las besó con suma delicadeza.

Akko: Je.

Diana: ¿Tienes hambre?

Akko: Un poco, pero prefiero dormir un rato

La joven Cavendish se dió media vuelta para abrazar a la contraria y acomodarse ambas en la cama. Akko apretó el abrazo y cerró sus ojos.

Diana: Descansa, después bajaremos por algo de comida, no iré a ningún lado.

Akko: Está claro que no, no pensaba soltarte.

Diana sonrió para después caer profundamente dormida con su pareja.

Los días pasaban y recurrían a los lugares a los que habían visitado anteriormente.

Akko: Diana, ¡Mira! El señor con los caballos.

Diana: No me subiré por segunda vez a esa bestia.

La nipona rió y acarició las mejillas de Diana.

Akko: Calma, irás conmigo otra vez.

Diana: ¿Y me obligarás a abrazarte como esa vez?

Akko: Bueno, eso dependerá si me abrazas o no por tí misma.

Diana: Mmm tienes suerte que haya aprendido a ser empalagosa contigo.

Akko: Jeje, entonces ¿Podemos montar a caballito?

Diana: Está bien está bien.

??: Es un placer verlas de nuevo señoritas, ¿Desean rentar un caballo?

"Mí guardiana"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora