[✓] ❛️️️️❛BODYGUARD❞ - Ao3 Traducción [TERMINADA]

CAPÍTULO 34.

CAPÍTULO 34.

—Ces—, le dijo Hermione al subsecretario, —tengo una tarea para ti.  Junto a Lovegood y Longbottom, entrenarás a guardias y aurores en el uso de armas muggles.  Si tienes suficiente tiempo, puedes experimentar mejorando tus armas de forma mágica.  Y dígale al asistente del ministro que usted asumirá el cargo por un día dentro de dos semanas.

La pelirroja la miró, congelada en seco.  Cuando le llegó el contenido del mensaje, chilló de alegría y salió corriendo como una flecha de la oficina sin mirar atrás.

Draco la siguió con la mirada, divertido por su reacción espontánea.

—¿Capacitación?  ¿Con un arma muggle?

—Pensé que era necesario.  No lucharemos contra los mortífagos, sólo con hechizos.  Dado que utilizan armas no mágicas, debemos estar preparados para repeler dichos ataques.

El guardia asintió con aprobación.

—Me pregunto una cosa…—comenzó en voz baja.  — ¿Cómo supo el atacante su dirección?  Esta es información ultrasecreta.

— A mí también me molesta, pero no se me ocurre nada.  Quizás Greengrass lo espió en alguna parte.

— Puede ser posible.

 

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—Levántate ahora—, la instó mientras ella todavía estaba sentada en su oficina, llena de papeles para revisar.

Ella le dedicó una sonrisa traviesa.

— ¿Dónde tienes tanta prisa?  —preguntó asombrada.

—Ya verás—, respondió misteriosamente.

Hermione frunció el ceño, pero su mirada furiosa no tuvo ningún efecto.  Él simplemente se encogió de hombros y sonrió encantadoramente.  Sacudió la cabeza con desaprobación y volvió a lo que estaba haciendo.

— ¿Se te ocurrió algo allí?  —murmuró en voz baja.

—Nada especial—, respondió, mirando al frente.  —¿Por qué deberían reemplazarte mañana?

Ella lo miró a él.  Parecía incómoda e insegura de querer decirle lo que tenía en mente.  Ella se levantó y caminó lentamente hacia él.  Ella puso sus manos sobre su chaleco y casualmente comenzó a desabrochar las hebillas.  Draco la miró atentamente.

— ¿Te gustaría tomarte libre mañana? —murmuró.

Él apenas la entendió.

-—¿Por Qué es eso?  —preguntó con recelo.

Ella guardó silencio.  Largo.  La respuesta no pudo escapar de su garganta.  Esto lo irritó un poco porque ella rara vez estaba callada.

— Mañana… Mañana es el cumpleaños de tu madre —comenzó vacilante.