Nueve

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Capitulo especial dedicado al trío de esta historia♡

Advertencia de capitulo largo con smut.

—Amor..~ —El Omega rodó ligeramente los ojos y siguió caminando mientras empujaba el carrito de compras casi lleno.

—Cariño..~ —Bufó esta vez mientras agregaba el cereal favorito de su hermano a las compras.

Seok-Jin estaba dispuesto a ignorar un rato a sus alfas, después de todo estos fueron los que le dejaron temblando las piernas por días tras su último celo.

Esta vez el tomaría el control.

Si bien los síntomas aparecieron en los menores hasta esta mañana mientras su hermano hablaba por celular, estos parecían avanzar incluso más rápido que cuando estaban en el averno.

No pudo evitar suspirar por el aroma de sus hombres, agradeciendo a Satán que justo cuando algo de lubricante salió de su entrada terminó de agregar todo al carrito.

Ambos alfas se mostraron un poco más hiperactivos y territoriales cuando percibieron ese toque dulce de su Omega.

Tan dulce.

Tan delicioso.

Uh, alfas hormonales.

Las mejillas de los susodichos se encendieron ante la ligera reprimenda que les dió su luna.

A veces era un tanto bochornoso poder escuchar entre si a sus partes animales hablar, aunque eso formó parte del pasado para ambos menores en cuanto su pareja tuvo que pagar.

A pesar de tener una marca clara a cada lado de su cuello, el cajero tuvo las santísimas bolas de coquetear con su Omega, mismo que respondía a ello con el único fin de ser amable.

El duo de alfas se miraron a los ojos y asintieron en silencio, iban a recordarle a su omega algo muy importante.

Ellos solo comparten entre ellos.

El viaje fue corto, pero para sorpresa de Seok-Jin sus menores estuvieron algo callados durante el trayecto, sin embargo lo dejó pasar, tal vez estaban empezando a sentirse mal.

Al llegar bajaron todo, verlos con el semblante algo decaído le rompió el corazón a Jin. —Amores, suban a nuestra habitación, descansen un rato en lo que arreglo las compras.

Con un asentimiento de cabeza subieron juntos y allí empezó no solo su plan, sino que también su celo.

Justo al cerrar la puerta tras su espalda Namjoon sintió su cuerpo sufrir un golpe de calor que le provocó un estirón en el vientre y también... En el pene.

Hoseok abrió la boca para preguntar si estaba bien, pero lo único que salió fue un jadeó entrecortado, su espina dorsal sufrió una descarga casi electrica que le entumeció el cuerpo.

Al estar mareados y desorientados sus lobos no tuvieron que poner mucho empeño para dominar el cuerpo de sus humanos, revelando iris rojos y amarillos que brillaban en contraste a sus dilatadas pupilas.

Unidos por el destino 𝙏𝙖𝙚𝙠𝙤𝙤𝙠Donde viven las historias. Descúbrelo ahora