CAPÍTULO 4

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El rostro de Katsuki era sombrío y aterrador, sin medir su fuerza tomó a Shouto del cabello y lo obligó a mirarlo.

-Quiero divorciarme de ti porque al fin has demostrado tu verdadero rostro. Esto no tiene nada que ver con Ochako, ya que, en primer lugar yo nunca te amé, ¿no crees que tu papel de víctima ya llego demasiado lejos?

Shouto solo atino a guardar silencio, cada palabra que salía de la boca del cenizo eran como agujas perforando su débil corazón.

- ¿Quieres que siga Todoroki? –preguntó con una sonrisa burlona–Ten en cuenta que mi reconciliación con ella no tiene nada que ver contigo, te lo advierto, si te atreves a ir con mi madre a contarle sobre la relación entre Uraraka y yo, ¡Te lo haré pagar a un precio muy caro!

Después de decir eso, Katsuki lo soltó y lo empujo bruscamente para posteriormente dirigirse a la puerta.

El bicolor mantenía la mirada perdida, limpió algunas lágrimas que habían descendido sin permiso alguno. Antes de que Katsuki saliera completamente, Shouto gritó fuera de control. –¿Crees que me importa que haya regresado? ¿O que si están juntos de nuevo? ¡Mientras no firme el acuerdo de divorcio, todavía cuenta como infidelidad, y esa idiota de Ochako seguirá siendo una tercera que interviene y eso ante la sociedad es inaceptable! –su voz sonó particularmente clara y sin tartamudeos.

Katsuki se detuvo, dio media vuelta y regresó, observó como Shouto permanecia aún en el suelo, arrodillado, sin importarle el dolor que causaría en aquel frágil cuerpo lo pateó ferozmente en el estómago, no bastándole con eso volvió a patearlo en el pecho, el bicolor grito de dolor sobre aquel frio suelo.

Katsuki no habló, encendió un cigarrillo y se puso en cuclillas, mirando el rostro dolorido del bicolor con tanta frialdad. Agarró el cabello de Shouto nuevamente y miró su frente cubierta de sudor, pero aún así no escatimo en decir. – Ya que tanto quieres morir, te cumpliré ese deseo. Así que no te atrevas a volver a retarme, porque las consecuencias serán peores.

Shouto se agarró el abdomen y jadeó de dolor, pero aún en su estado respondió con una sonrisa burlona .– ¿Crees que tu madre estará de acuerdo con nuestro divorcio? ¿Crees que te dejara ir con la perra de Ochako? Ella mismo sabe lo que ha hecho. No lo olvides, todavía tengo acciones en la compañía Bakugo. Seguiré siendo tu cónyuge legal antes de que se selle el divorcio.

Los ojos de Katsuki mostraban frialdad y todo su cuerpo exudaba ira. Presionó la cabeza de Shouto y la estrelló contra el suelo.

El más bajo lucho con todas sus fuerzas para sacarse al cenizo de encima. Después de un golpe sordo el pequeño hombre solo sintió un dolor severo y se desmayó.

Cuando Shouto despertó se encontró acostado en la cama de un hospital. El fuerte dolor de cabeza casi logro desvanecerlo nuevamente. Yuri le dijo que había estado en coma durante dos días y que el médico le dijo que tenía una ligera conmoción cerebral.

La puerta se abrió y Katsuki entró, al ver el rostro pálido y vendado del bicolor en la cama, tan solo atinó a decir.

-Mi madre está aquí, es mejor que no digas tonterías.

La puerta se abrió de nuevo dando paso a una hermosa mujer que, pese a su edad lucia maravillosa, su mirada era tan profunda que Shouto no se atrevió a mirarla.

Mitsuki caminó hacia la cama del hospital tomando las manos del bicolor y preguntó con una mirada angustiada.– Mi niño, duele, ¿verdad?–al no obtener respuesta alguna se puso de pie.

–Estoy bien, ya no duele, no debiste tomarte la molestia de venir hasta aquí, solo fue un acciden...

-¡KATSUKI!, ven aquí inmediatamente.–la mujer trataba de mantener la compostura.

El cenizo se acercó a su madre y cuando estaba a punto de hablar la mano de su madre impacto contra su rostro. Mientras Katsuki se agarraba el rostro su mirada cruzo con la de Shouto , sus ojos rubíes solo atinaron a mirarlo con enojo.








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Te amo Mitsuki reina 🙈

Loto negro-|Bakutodo|( ADAPTACIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora